El titular de MAPSA imputado por la muerte del obrero en Soler al 100
Cristian Chazarreta, abogado de la familia de Gabriel Burgos Melo (19), obrero que falleció cuando una zanja se derrumbó en Soler al 100, se refirió en FM De la Calle a la definición del fiscal Aguilar de imputar al titular de la empresa y a dos profesionales más. “Burgos Melo perdió la vida el 6 de noviembre de 2016, un domingo en que la empresa decidió comenzar con la obra aunque faltaba la autorización municipal y los controles pertinentes”, indicó.
“Los tres profesionales debieron ser rigurosos, cambiaron totalmente la planificación de la obra exponiendo a los trabajadores a condiciones vulnerables”, advirtió el letrado sobre: Ángel Pablo Matelica (ingeniero civil, director de la obra y titular de MAPSA), Miguel Ramírez (ingeniero en seguridad e higiene) y Nahuel Ostertag (subdirector de la obra), imputados por homicidio culposo y lesiones culposas de los tres obreros que sobrevivieron con secuelas.
El fiscal Aguilar continuó con la labor del Dr. Zaratiegui (apartado por una situación de salud), y en enero “recibe a la familia, le indica que iba a estudiar la causa y define las tres imputaciones para profesionales que intervinieron en roles preponderantes en esa obra”. También aseguró que los “incumplimientos son inagotables. Entre ellos: el estacado de las paredes para evitar derrumbes, controles periódicos, control continuo del director y personal de ingeniería”. Por el lado de la documentación expuso que no contaban con “la autorización provista por la Municipalidad (el expediente estaba en trámite y comenzaron a trabajar sin ella)”.
Chazarreta manifestó que había un “triángulo contractual entre FUMEBA (fundación que administra el Hospital Privado del Sur) EDES y MAPSA”. Mientras que la fundación solicitó la repotenciación del servicio, EDES tiene dos formas de realizar esa actividad: la hacen ellos (que están demorados con los plazos) o FUMEBA hace el aporte económico y contratan una empresa (MAPSA). “EDES se encarga del control de condiciones de esta repotenciación, pero intervienen las tres partes. […] Por el momento no fueron imputados y no tienen fecha de citación a indagatoria”, expresó.
Respecto a los obreros que sobrevivieron dijo que “siguen traumados, bajo contención familiar y psicológica. Quiero resaltar que los trabajadores son zanjeros toda la vida –desde chicos–, y luego de haber estado cuatro horas enterrados bajo tierra, difícilmente se puedan reinsertar laboralmente en el rubro que realizaron toda su vida. […] La familia de Burgos Melo quiere justicia y que se condene penalmente a los procesados responsables de este hecho”.
Sobre este tipo de accidentes que ocurren seguido en la ciudad, el abogado manifestó a titulo personal: “Esto se ve a diario, en determinados rubros los trabajadores quedan expuestos a lesiones porque no se hacen los respectivos controles. El cumplimiento de las normas es costoso, otras veces es por desidia de los empleadores”.