Privilegios y opacidad: modificaciones de la Ley Ómnibus en la industria hidrocarburífera
Integrantes del Programa Justicia Fiscal de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia analizaron los 53 artículos del proyecto “Bases” destinados a modificar la Ley de Hidrocarburos.
En un artículo publicado en elDiarioAR Sofía Pasquini y Natalia Segura Diez dan cuenta de las principales cuestiones que el gobierno nacional busca rediseñar de la Ley N°17.319.
Entre ellas, está la modificación del régimen de regalías, la prohibición al Estado Nacional de fijar precios, la incorporación del objetivo de maximización de la renta y priorizar las exportaciones en vez del autoabastecimiento.
“Lo que nosotros recalcamos en varios de nuestros trabajos, es la manera en que se mantienen en el tiempo esos regímenes en Argentina. Porque vos tienes a diferencia de los gastos directos, como por ejemplo, la Asignación Universal por Hijo, que se controla y se miden de manera constante”, analizó Pasquini.
“Vos podés hoy saber cuánta plata le estamos gastando en eso. A diferencia de estos gastos tributarios, que son gastos indirectos, no tienen controles y tienen muchas opacidades”.
“Básicamente, no sabemos quiénes se benefician, qué empresas son las que se adhieren, en qué medida reciben esos beneficios impositivos, más aún en temas como el que estamos conversando ahora, que es el de hidrocarburos que van destinados a sectores concentrados de la economía y que están marcados por la opacidad y la corrupción que los marca”, añadió la abogada del área de Justicia Fiscal.
Acerca de los cambios en materia fiscal que se producirían de aprobarse el proyecto, sostuvo que “si para atraer inversiones hacés una serie de políticas que no están claras y que no se terminan de saber a quién benefician, porque si tenemos encima un régimen, un sector que es concentrado, deberíamos tener un poco más de información”.
“Además, en el marco del problema del secreto fiscal no tenemos idea de quiénes son los beneficiarios finales de estas empresas que hacen uso de estas regímenes diferenciales. Y es dinero que el Estado deja de recaudar y que, por ende, deja de destinar a cuestiones importantes que benefician a toda la población como salud y educación. Y son porcentajes realmente muy grande, porque se estima que los gastos tributarios representan el 2,5% del PBI y se suman otros beneficios, eso se eleva a un 4,7%”, agregó Pasquini.