Caso Almada: “Fue muy burda la manipulación de la prueba”
Durante la semana pasada y esta se llevaron adelante audiencias en el marco del caso Ángel Almada. Esta semana continúan las audiencias indagatorias. En la actualidad, el Dr. Romero Jardín está llevando adelante la investigación.
El abogado Leandro Aparicio recordó a FM De la Calle que “en un principio a Ángel se lo declaró como posible suicida. Un comisario y algunos oficiales -que hoy están imputados- armaron las declaraciones, apretaron a distintos testigos, muchos de ellos menores de edad, para que digan que el chico se había suicidado. El ex delegado municipal (Marcelo Acosta) y su esposa fueron hasta la escuela a pedir la fotocopia del DNI para hacer los trámites para el entierro el mismo día que había fallecido. También llevaba de aquí para allá a los testigos, manejaba la investigación como si él fuese la persona encargada de hacerlo“.
Inicialmente, hubo un pedido expreso de que las testimoniales se tomaran en sede judicial y sin embargo se siguieron tomando en la DDI.
Aparicio tomó la causa unos meses después. Pidió testimonios de personas que “refutaban lo que supuestamente habían dicho, otras que aportaron testimonio a la causa. Producto de otras circunstancias como el hallazgo de otro celular que no era de Ángel en la casa de un señor que se llama (Horacio) Pagotto se abre otra vía y se entienden otras circunstancias que en otro momento no se entendieron”.
Las audiencias que se produjeron esta semana son de causas derivadas de la principal. Se trata de las imputaciones “al comisario de ese entonces, (Emir) Mansilla, a tres o cuatro policías más, a Pagotto, a Ferreiro que es la testigo que dice que Ángel le cambia el celular por dos cervezas y otras circunstancias de declaraciones falsa”.
Cabe destacar que “se hicieron pericias, por parte de Gendarmería, que acreditaron que no fue un suicidio”.
Además, Aparicio señaló que Almada “fue asesinado a doscientos metros donde se encontró el cargamento de cocaína más grande de la historia de Argentina que es una circunstancia que tampoco podemos soslayar así como la complicidad entre los policías y el ex delegado”.
“Fue muy burda la manipulación de la prueba. Específicamente las testimoniales. Es muy claro establecer la desidia en aportar elementos a la causa. Hay una voluntad muy clara de no investigar. Las cámaras que aportan mucho estaban en el DDI y no en la fiscalía, por ejemplo. Hace tres años que está secuestrado el celular del chico. Recién ahora por insistencia van a arreglarlo para poder peritarlo. Cuando quieren sí son rápidos. Acá hay otra cuestión que no la puedo llegar a dilucidar del todo”.
Según el letrado, el devenir de la investigación evidencia “muchas contradicciones, muchas mentiras muy claras”.