Artistas por la No Violencia: “El encuentro este año se viene a los barrios”

El XI Encuentro de Artistas por la No Violencia hacia Mujeres, Niñas y Niños tendrá una primera etapa en el barrio Miramar este sábado. Impulsado por Olga Corrales y organizado por la red de vecinas del lugar, desde las 16 habrá bandas en vivo, feria, talleres y esculturas en Fortaleza al 800.

“Venimos hace un par de meses trabajando en los barrios con los talleres. El encuentro este año se viene a los barrios, creemos que el arte transforma. Queremos acercamos un poco de todo el bagaje cultural que tenemos en Bahía, con sus artistas, y regalarle al barrio una jornada intensa de canciones y colores”, dijo a FM De la Calle Sandra Belmar, vecina de Miramar.

Hace tres meses las mujeres asisten a tres talleres: telar mapuche, herrería y soldadura y huerta.

“El encuentro surge del florecer en los barrios, luego de la pandemia se notó una necesidad muy grande porque hay una violencia extrema contra las mujeres, niñas y niños, violencia de todo tipo. Creemos que a través del arte podemos visibilizar todas esas problemáticas que están surgiendo. Las mujeres no podemos salir a trabajar porque hay mucha necesidad, lo podemos ver reflejado en las obras. Trabajamos juntas, con la presidenta de la sociedad de fomento, con la referente del club, con las vecinas que se van sumando con propuestas, con ganas. Creamos una red que seguramente nos juntemos a trabajar con las mujeres de Villa Nocito”, agregó.

El último fin de semana de noviembre se repetirá el evento en el barrio Villa Nocito organizado con la misma modalidad y participación de las mujeres del sector.

Belmar afirmó: “Nos damos cuenta que la violencia está a la vuelta de la esquina, que está en todos lados. Nos une un hilo delgado porque todas hemos sido víctimas en algún momento y el silencio ya no es parte de nuestra historia”.

El barrio tiene su equipo de futbol femenino. Guerreras de Miramar estará presente el sábado para juntar fondos. “Entraron en un campeonato interbarrial pero necesitan para que les habiliten la cancha. Eso implica comprar 2 o 3 camionadas de tierra. No solamente trabajan ellas sino que aportan entrenando a niños y niñas”.

“El concepto de autogestión nos queda genial porque está hecho a pulmón. La ayuda más grande vino de la universidad, recibimos muy poco de instituciones que tienen que hacerse cargo de solventar estos eventos permanentes. Presentamos el proyecto fuera de término, no hemos tenido mucho apoyo, casi nulo. Por eso decimos que es autogestivo, que hay mucha violencia institucional, hemos hecho hasta bingo virtual”, concluyó.

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