Envión: garantizan continuidad sin resolver precarización laboral
Integrantes de los equipos técnicos del programa Envión mantienen conversaciones desde principios de mes con las nuevas autoridades municipales para garantizar la continuidad del programa y terminar con la precariedad laboral que padecen desde hace más de cinco años.
“En cuanto a la modalidad de contratación sigue igual, por lo tanto, la precarización se mantiene. Lo que hemos logrado obtener de la reunión, como saldo si se quiere positivo, es que ante el recambio de autoridades, obviamente estaba en nosotros la duda de la continuidad del programa como política pública. Bueno, el secretario (de Políticas Sociales Fabio Pierdominici) reconoció que es una política pública fundamental para el trabajo con jóvenes en la ciudad de Bahía Blanca y lo que planteó es que va a seguir”, dijo esta mañana a FM De la Calle, Clemente San Martín.
Son treinta profesionales -que deberían ser 42, siete por equipo en cada una de las seis sedes- que trabajan bajo la modalidad de contrato de obra que se renuevan cada cuatro meses, no perciben aguinaldo ni antigüedad y deben hacerse cargo de la cuota del monotributo e ingresos brutos. Los salarios son de aproximadamente seis mil pesos en mano con una carga horaria de cien horas mensuales. Si bien no se prometieron cambio a ese panorama, “sí quedó planteado que van a continuar las conversaciones y en el caso de que la provincia no se haga cargo, el municipio tomaría las riendas”.
“Ya lo hemos planteado el año pasado cuando comenzamos este reclamo, los que nos contratan es el municipio, firmamos contrato con el municipio, los que supervisan nuestro trabajo, inclusive hacen la selección del personal que entra es el municipio. Por lo tanto, desconocer su responsabilidad respecto a nuestra situación contractual para nosotros es casi una burla pero es un punto donde no nos ponemos de acuerdo”, agregó el licenciado.
San Martín afirmó que “no solo es una cuestión de reclamo laboral o de nuestra situación contractual sino lo que queremos, más allá de los nombres porque no es que regularicen mi situación o la de algún compañero puntualmente, obviamente los que hacen mucho tiempo que están, sino darle estabilidad a la política pública del programa Envión”.
“Muchos de nuestros compañeros a veces tienen que resignar continuar en este trabajo por otras cosas y con ellos se pierden experiencias, el contacto con los jóvenes, el vínculo que se puede haber creado que para el trabajo con adolescentes es fundamental”, concluyó.