¿Qué sigue después del canje de deuda?
El gobierno logró cerrar dos tramos del canje de la deuda externa. El economista y columnista de FM De la Calle, Francisco Cantamutto, explica qué implica el acuerdo y qué panorama hay por delante.
“El primer acuerdo es en moneda extranjera bajo legislación extranjera, que logró una aceptación del 93% que con la aplicación de cláusulas de acción colectiva llegaba hasta el 99%. Quiere decir que si alcanza una mayoría de bonos que son canjeados, el resto o toma esa decisión o se queda con papeles que no valen nada. En el segundo tramo el canje que era con moneda extranjera bajo legislación argentina, se realizó con una ley que aplicaba las mismas condiciones que bajo a ley extranjera, con el 98% de adhesión”, explicó.
Enfatizó que “estamos hablando de 189 mil millones de dólares fueron negociados, equivale al 58% de la deuda total. Una re estructuración bastante grande y amplia, y en términos de monto más grande que la del 2005”.
Por un lado se generó un ahorro “de unos 34 mil millones de dólares, equivale a una quita nominal del 18%. Está basada en los intereses, no en quita de capital. Se corrieron los vencimientos próximos. De 59 mil millones que vencían, 56 se patearon para adelante, lo cual hace que la necesidad de dólares para este gobierno sea significativa. En el siguiente mandato, sea de quien sea, se provocaba un ahorro de 15 mil millones. Pero en los siguientes tramos del 2029 en adelante se acumula más deuda de la que había antes”.
Todavía resta la negociación con el FMI al que se le deben 44 mil millones, organismo que no está dispuesto a discutir una quita.
Las opciones son dos, la primera es “un préstamo de tipo stand by, de tres años como el actual, y la segunda es un acuerdo de facilidades extendidas que dura 10 años. Este último sería por el cual estaría yendo. Si fuera otro stand by de 3 años en el próximo gobierno no hay ahorro y hay vencimientos que no sabríamos cómo hacerlo”.
Cantamutto señaló que “el problema de un acuerdo de facilidades extendidas requiere de reformas estructurales. ¿Por ganar vencimientos vamos a aceptar que el FMI nos imponga reformas? Se va a enviar una ley al congreso para ver cuál va a ser la propuesta, es un hecho inédito en la historia argentina”.
“¿Cómo se va a considerar esta agenda con, por ejemplo, la recuperación de ciencia y técnica y presupuesto? Hace dos años los asesores del gobierno hablaban de la necesidad de avanzar a un esquema más regulado de controles cambiarios, de comercio administrado, de fondo de impulso a las exportaciones con mayor contenido tecnológico, de control selectivo de las importaciones, todo eso no solo que no sólo que no está en marcha sino que en la negociación con el FMI se descartaron”.
Finalmente, el economista destacó que “en donde hay un hueco gigantesco es el tema fiscal, todos los grupos del actual gobierno insistieron en que era necesario una reforma fiscal integral, donde aumentara el IVA a los bienes suntuarios, aumentar el impuesto a los bienes personales, gravar los patrimonios, las grandes fortunas, hacer pagar a los grandes ganadores incluyendo a los bancos. Nada esto ha avanzado. En este marco, hay una agenda pendiente que incluso se puede recuperar desde quienes hoy son gobierno, que es importante revisar de cara a las negociaciones que siguen”.