Femicidio en Buratovich: se espera la sentencia 

Concluyeron los alegatos en el juicio por el femicidio de Yésica Paredes. El único imputado es su pareja, Juan Torrejón Hualpa, acusado de haberla asesinado en la vivienda que compartían en Mayor Buratovich la noche del 5 de enero del 2021 mientras sus hijos dormían en la habitación contigua. “Esta persona se adueñó de su vida y me la arrebató”, dijo a FM De la Calle su mamá.

El fiscal Jorge Viego solicitó prisión perpetua para el acusado de homicidio doblemente calificado agravado por el vínculo y por mediar violencia de género. La defensora Julieta Stordeu pidió la pena mínima -de 10 a 25 años- argumentando que el acusado se encontraba en estado de emoción violenta.

El Tribunal Criminal N°1, integrado por los jueces Christian Alberto Yesari, Hugo Adrián De Rosa y Ricardo Nicolás Gutiérrez, comunicará la sentencia el próximo jueves 1 de septiembre.

Paredes tenía 21 años y dos hijos. Había llegado al partido de Villarino para trabajar en la cosecha de cebolla.

“El mató a mi hija y dice que ella lo atacó primero, imposible. Mi hija ahora ya no está y lo que más me duele es que mi hija me decía ‘voy a volver a verte a La Plata, a visitarte, no tengas pena’. Pido que se haga justicia por mi hija y por mis nietos que quedaron sin mamá y sin papá. Ellos tienen toda la vida por delante, ella también, tenía 21 años”, dijo a FM De la Calle Esperanza Valdivieso, la mamá de Yésica.

Agregó que “ella lo poco que tenía lo compartía con todos. Estaba estudiando, quería terminar su secundario para seguir la carrera de arquitecta. Me decía ‘mamá tengo esos sueños, voy a poner todo de mi parte’. Esta persona se adueñó de su vida y me la arrebató. Ella hoy no está pero sí está su mamá con toda la fuerza que ella me dio”.

Durante las declaraciones testimoniales de familiares y allegados se pudo comprobar que existieron al menos dos episodios de violencia anteriores al femicidio. El fiscal señaló que, según testigos, Yésica se encontraba amenazada, que hubo episodios de violencia sexual dentro de la relación matrimonial. También registraron violencia económica, Torrejón retaceaba el dinero para el cuidado de sus hijos, tampoco dejaba salir a la víctima de la casa.

Por su parte, la defensa no desconoce los hechos pero argumentó que Torrejón fue atacado previamente por la víctima y que se encontraba en un estado de emoción violenta.

Ambas estrategias fueron rebatidas por la fiscalía, la cual señaló que por un lado no existieron pericias sobre el estado emocional del acusado y, en segundo término, sí existieron análisis periciales en los que consta que las lesiones del imputado eran auto infringidas.

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