Un estudio financiado por el Estado analiza aplicar psilocibina para tratar la depresión

La psilocibina es una droga de origen natural que produce una variedad de hongos que crecen por todo el mundo. El médico clínico, Alín Stolkiner, investiga con el apoyo del Conicet los efectos de retiros de meditación en la reducción de la ansiedad y la depresión mediada por la sustancia en pacientes con diagnóstico de cáncer.

En diálogo con FM De la Calle, aseguró que hay más de 200 especies que la producen.

“Cuando entra a nuestro cuerpo es un compuesto que se metaboliza, se transforma en otro compuesto que se llama psilocina que es más activo aún”, explicó. Luego se unifica con receptores que están sobre las células -especialmente en las neuronas- produciendo efectos psicoactivos.

Stolkiner refirió que “está muy controlada, es ilegal para cualquier uso excepto para la investigación clínica” pero que aún teniendo esa finalidad hay burocracia e impedimentos para avanzar con la indagación en estudios clínicos.

El comité de ética que aprobó su investigación es el del Hospital Interdisciplinario Psicoasistencial José Tiburcio Borda. No descartan que se sume otro nosocomio.

La línea de su investigación -titulada “Los efectos de retiros de meditación en la reducción de la ansiedad y la depresión mediada por psilocibina en pacientes con diagnóstico de cáncer que pone en riesgo la vida”- es una continuación de una indagación que se realizó en Estados Unidos.

Se trata de un trabajo publicado en 2016 por Griffiths y profesionales de la Universidad John Hopkins, donde fue probado en pacientes que tenían un diagnóstico de cáncer que ponía en riesgo sus vidas y que tenían depresión asociada al diagnóstico, la cual pudieron tratar con psilocibina de forma efectiva. El efecto duró en el tiempo alrededor de 6 meses.

“Es un esquema de terapia que apunta a inducir un tipo de experiencia particular que cuando se induce esta experiencia la mayoría de estas personas y esto se mantiene en el tiempo con una sola dosis de psilocibina”.

En ese camino, relató que no buscan solo replicar los resultados sino mejorarlos. La materia viene siendo objeto de averiguaciones desde la década del ’70, por lo cual hay mucha evidencia que muestra su utilidad para dar tratamiento a la depresión en general y la resistente al tratamiento. También tiene resultados positivos para el trastorno obsesivo compulsivo.

Una experiencia mística

El médico explicó que hay publicaciones en prestigiosas revistas científicas como The New England Journal of Medicine en las que se comparó escitalopram (un antidepresivo de primera línea) con psilocibina. El dato surgió de un estudio a 60 persona que arrojó información que ubica a la droga proveniente de hongos en una posición incluso superior al fármaco.

“Esa experiencia, se menciona como mística porque se cumplen distintitos ítems en escalas que se le hacen al paciente después de que tomó psilocibina, y si se junta más del 60% del puntaje máximo en esos aspectos se habla de que la persona tuvo una experiencia mística completa”.

Las vivencias se documentan hace cientos de años en distintas tradiciones espirituales y religiosas pero se pueden inducir a cualquier persona. “Puede sentir que se disuelve la separación entre las cosas y una desaparición del yo y del flujo del tiempo”, añadió.

“Desde la neurociencia se trata de entender qué pasa en el cerebro cuando el paciente tiene esa experiencia mística”, relató, uno de los puntos que conocen es la disminución del flujo de sangre al cerebro.

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