Asamblea por casos de violencia de género en la UNS
Estudiantes y docentes de los departamentos de Humanidades y Ciencia de la Educación de la UNS realizan la convocatoria bajo el lema “Nos organizamos contra la violencia de género en lugares de estudio y trabajo”.
Se trata de una iniciativa originada por las denuncias hacia el ex titular de la Secretaría de Cultura de la universidad, Juan Sebastián Slagter, por violencia de género en el ámbito laboral. El funcionario solicitó una licencia un día antes de que se conociera el episodio públicamente.
“Pensamos en esta asamblea como instancia de auto-organización que podemos tener docentes, no docentes y estudiantes, necesitamos un lugar para poder decidir qué tipo de protocolos queremos, como queremos accionar en estos casos, teniendo en cuenta que la universidad tiene amplísimos marcos legales que amparan que estas cosas sigan sucediendo, que las personas que ejercen violencia de genero tengan un cierto margen de impunidad y pensamos que la única manera que tenemos para dar respuesta es organizada, porque lo vemos no solamente en la justicia administrativa sino federal”, dijo a FM De la Calle, Clara Aldea, alumna y secretaria de Derechos Humanos del Centro de Estudiantes de Humanidades.
La estudiante señaló que el docente “está en proceso de sumario abierto y se está empezando a pensar, por parte del colectivo de mujeres de la UNS, cómo implementar una sanción que sea ejemplar. Todavía no hay acuerdo entre las autoridades y las denunciantes sobre cuál debería ser la sanción”.
Agregó que “tiene que ver con los casos de violencia de género, por el caso de la trabajadora no docente de ATUNS que empiezan a mostrar los resultados de la organización de las mujeres de los últimos días”.
Señaló que “por un lado los protocolos existen y han sido conquista de mujeres que han estado presionando para que efectivamente hayan un marco común para los casos de violencia de género, pero tienen enormes fallas porque dejan márgenes para que las personas que ejercen violencia de género no tengan consecuencias inmediatas, no hay celeridad en el tratamiento de los casos y los protocolos son decididos entre cuatro paredes. La presentación estudiantil es minoritaria, la representación de no docentes también a la hora de decidir qué protocolo queremos”.