Crean un sistema que acelera el proceso de cicatrización
Una médica y un ingeniero produjeron un sistema de bajo costo que acelera el ciclo de cicatrización de heridas graves. Evita cirugías reconstructivas como colgajos y amputaciones y acortar los plazos de estadía hospitalaria.
Marcos Crozzolo y Miriam Rossello crearon el proyecto premiado por el Instituto Balseiro.
“Me dedico a reparar equipos electrónicos y por medio de un amigo me puse en contacto con Miriam Rossello, que tenía un equipo que aplica esta terapia que había dejado de funcionar. Miriam estaba interesada en poder hacerlo andar por las ventajas que tiene en la aceleración en la cicatrización, lo hice andar y le planteé la posibilidad de ver qué se podía hacer para fabricar en Argentina un producto similar”, dijo Crozzolo a FM De la Calle.
El proceso se denomina “Terapia de presión negativa de desarrollo abierto”. Según explicó el ingeniero se “hace vacío sobre una herida que previamente se trata para eliminar tejido muerto para que al aplicar un vacío todos los vasos sanguíneos aporten toda la sangre nueva a la herida y de esa forma el propio cuerpo sane más rápido”.
“La herida tiene que ser cubierta con unos parches adhesivos que se consiguen de ortopedia, y eso evita que entren bacterias, o que la misma contaminación del cuerpo del paciente prolifere”, agregó.
Entre las ventajas “estos apósitos no necesitan ser cambiados día a día, sino que al estar en un ambiente controlado, sellado, lo podes cambiar cada 3 o 4 días. El paciente sufre menos en las intervenciones”.
Crozzolo explicó que “Es una bomba de vacío portátil, que funciona a pilas y el paciente la tiene que llevar encima todo el tiempo. Pude ser un paciente ambulatorio o quedarse en el hospital. Este equipo apunta a que el paciente pueda irse a la casa si no requiere estar conectado a otros servicios”
Respecto a los materiales utilizados, contó que “estamos enfocados en que sean materiales descartables, al estar en contacto con tejido orgánico hay riesgo de contaminación pero para abaratar costos, porque un equipamiento médico tiene que cumplir con requerimientos de la ANMAT, es usar productos de quirófano, y proveer un kit para que el cirujano pueda trabajar sobre el paciente”.
“Son equipos que en Argentina no se fabrican, que son traídos de afuera. Estamos en una etapa temprana de desarrollo, tenemos un prototipo, un estimado de precios en los que podemos llegar a vender el producto, sabemos que es muy por debajo de los importados, pero tenemos que trabajar en homologaciones, certificaciones, eso le agrega un costo adicional. Eso es lo que continua en el año que empieza”.
Por último señaló que puede utilizarse en casos de pacientes particulares con procesos de diabetes avanzados “los pacientes que están descuidados en cuanto al tratamiento, llegan a casos donde tienen una ulcera en general en los pies, donde si no se cuidan terminan en una amputación. Eso trae aparejado costos de internación, de atención a los pacientes. Que si vos ves que hay una herida que está creciendo y podes aplicar este tratamiento, podes evitarle un montón de raumas y ahí es donde se aplica la ventaja de reducir las amputaciones”.