Femicidio en White: “Costa andaba divulgando que la iba a matar”
Susana Melo, de 53 años, fue asesinada este fin de semana. El principal y único acusado es Raúl Gregorio Costa, su pareja, quien confesó haberla matado, se negó a declarar y permanece detenido desde entonces.
En reiteradas oportunidades la familia de Susana denunció a Costa por violencia machista. La última fue en enero cuando producto de los golpes la víctima terminó internada. Ni la justicia ni la policía actuaron a tiempo. El sábado, luego de que una amiga alertara a la familia, encontraron su cuerpo sin vida en un camino vecinal.
“Ese día recibo un mensaje de la amiga de mi mamá en el cual me decía que Costa andaba divulgando que la iba a matar”, comentó Rosana, hija de la víctima, a FM De la Calle.
“Hace 6 años que estaba con él, tenía denuncias previas de mi parte, lo denuncié cuando mando a mi mamá al hospital. Mi mamá dijo que se cayó, cuando había sido que él la agredió, tenía tibia y peroné con los huesos triturados por dentro. Para nosotras le pasó la camioneta por encima”, expuso Rosana.
Comentó que acudió en aquella oportunidad a la Comisaría de la Mujer “el mismo día que la internaron”. “A la semana tenía que ir yo con una testigo que era amiga de mi mamá y la testigo no quiso ir porque mi mamá se lo pidió. Así que cuando fui me dijeron que si no se presentaba la testigo ni mi mamá quería hacer la denuncia, quedaba archivada porque no era fehaciente. Les dije lamentablemente si esto no se para esperemos no tener una desgracia, y a los dos meses la desgracia sucedió”.
Costa tiene otros antecedentes para con la familia Melo: “Tiene una denuncia porque manoseó a mi hermana más chica, que también quedó en la nada, se apareció en mi casa, estaba yo sola con mis hijos. Me fue a apretar con cinco personas más. Esa denuncia también está hecha. Tiene denuncias por violación y la justicia nunca hizo nada”.
“Conociéndola a ella, para nosotros estaba siendo amenazada, nosotros queríamos ayudarla y ella nos alejaba, para nosotros él la tenía amenazada con que nos iba a matar”, agregó.
Rosana dijo que su mamá “era una excelente persona, todos los que la conocieron saben la persona que era, muy laburadora, buena, ayudaba, te brindaba hasta lo que no tenía. El último tiempo por ahí pasaban días que no aparecía, le escribíamos y siempre decía que estaba bien, por ahí aparecía más de una vez con el ojo negro y decía que se había caído. Nosotros la queríamos sacar pero ella estaba siendo muy amenazada”.