Luna: el cambio de género no afectará su condena a prisión perpetua
El femicida de Micaela Ortega, Jonathan Luna, solicitó el cambio de género por autopercibirse mujer y fue trasladado del penal de Sierra Chica a un pabellón para personas transgénero en Florencio Varela. Fernanda Petersen, abogada de Mónica Cid, aclaró en FM De la Calle que no existe un pedido concreto de un cambio de calificación legal.
Ante la noticia, se abrió la incógnita acerca de si Luna podría pedir que se revise la condena por el femicidio de la niña de 12 años en 2016.
“Dentro de la causa no existe un pedido concreto de un cambio de calificación legal o algo que tenga que ver con la pena recaída, lo que sí se ha planteado en función del pedido que él manifiesta es el cambio de pabellón”, refirió la letrada, quien destacó que el reclamo incluía que se le brinde un teléfono celular.
Luna fue condenado a prisión perpetua por haber matado a Micaela Ortega (12) en un caso calificado como grooming seguido de femicidio.
La abogada señaló: “No creo que haya posibilidad de modificar el agravante de femicidio. Hay múltiples entrevistas con psicólogos, psiquiatras donde queda claro el perfil de personalidad, las características, los modus operandi de Luna”.
La familia de Ortega, particular damnificada en el expediente, se enteró de la novedad por trascendidos periodísticos y no por la justicia. “Más allá de los planteos y de que pueda tener obligación por Ley de Víctimas de notificación, creemos que esta ley tiene que ser analizada en un sentido amplio. Como víctima no puede enterarse por un medio de comunicación ni tampoco que hoy por hoy la carátula sea distinta mas allá de los planteos que pueda llegar a hacer la defensa”, especificó.
“Dentro de los penales, antes de la Ley de Identidad de Género, se trasladaba a una persona a un pabellón de mujeres o a una cárcel de mujeres, hoy por hoy se cuenta con estos pabellones para personas de diversidad sexual”, aclaró y puntualizó que la preocupación de Cid -respecto a un hipotético traslado de Luna a un penal de mujeres donde pueda acceder as nuevas víctimas- podría haberse evitado si el tribunal se comunicaba en tiempo y forma.
Petersen analizó que la causa de Luna no está agravada por cometerse mediando violencia de género pero sí por alevosía por cometer el crimen para ocultar otro delito.
“Él en sus entrevistas con técnicos manifestaba su odio hacia el género femenino. No hay ningún elemento que pueda demostrar que en ese momento existía esta cuestión respecto de su identidad”, puntualizó.
Hay una preocupación especial por el pedido del celular, ya que en 2020 cuando se encontraba en Sierra Chica, Luna se contactó con menores a través de perfiles falsos de redes sociales, volviendo a cometer grooming.