Megacausa Zona 5: el papel fundamental de la inteligencia y la propaganda
El alegato fiscal detalló el rol de los imputados que se desempeñaron en las áreas que desplegaban las acciones psicológicas como parte indispensable del plan represivo.
Carlos Alberto Taffarel fue jefe de la sección Actividades Sicológicas Secretas. “La acción psicológica tenía un papel fundamental. Siendo el Destacamento de Inteligencia 181 la única unidad técnica en la especialidad, la sección de Taffarel era el único elemento técnico para el desarrollo de todas las operaciones psicológicas”, explicó el fiscal Pablo Fermento.
“La actividad psicológica se encuentra contemplada en todos los trazados de la empresa de exterminio. Cuando repasamos la actuación de (Adel) Vilas citamos el pasaje en el que hablaba sobre una planificada acción de propaganda como una de las medidas centrales de su plan represivo”, dijo.
En el reglamento se detallan las tareas desarrolladas por el área al mando de Taffarel “que incluyen las elaboración de libretos de radio y TV, discursos, proclamas y material para producción. Esto no es otra cosa que la materia prima de la realidad ficticia que había que canalizar al público”.
“Habla también de la preparación de propaganda haciendo referencia a la radio y TV como transmisores. Queremos dejar claro que todos los aspectos técnicos para la ejecución de planes de operación psicológica correspondían a la sección que estaba al mando de Taffarel”, contó.
“Los oficiales por debajo de Taffarel participaban de los interrogatorios. Aguirre era uno de ellos”. A Víctor Raúl Aguirre, quien se desempeñó como auxiliar de la sección Actividades Sicológicas Secretas en el Destacamento de Inteligencia 181, se le imputan crímenes cometidos en perjuicio de 187 víctimas.
“Todo lo que ordenaba Taffarel era ejecutado por Aguirre. No solo fue traído por Vilas para que continúe la actividad criminal que desarrollaba en Tucumán. Sino que Aguirre era uno de oficiales que estuvieron a cargo de las actividades psicológicas ”, dijeron desde la fiscalía.
En tanto, Mario Horacio Torres era la cuarta jerarquía de la Zona 5. “El acusado actuó como presidente del Consejo de Guerra designando por (el comandante del V Cuerpo de Ejército Abel) Catuzzi”. Era quien formaba parte de los juicios militares contra detenidos ilegalmente y ordenaban, entre otras cosas, que continuaran detenidos en la Unidad Penal 4.
Por último, la Fiscalía también analizó el rol de Osvaldo Bernandino Páez, quien de manera personal y directa ordenó que se secuestre a más de 300 personas.