“Mientras tengas un sueño siempre te vas a mantener con vida”
El escritor Rubén Darío Polako, junto a su editora Florencia Rodríguez, presentaron en FM De la Calle “Más allá de las palabras”, una selección de poemas, relatos y cuentos. “Tener el libro fue la misma sensación que ser papá primerizo”, dijo el autor.
“Muchos años no fui yo, en aquellas épocas se hacía lo que decían los padres, yo quería escribir y papá no me dejó, tenía que trabajar pero eso me hizo cosechar muchos relatos de los distintos lugares de la Argentina. Desde los ocho años me gusta escribir”.
Después de dejar el servicio mecánico, el Polako luchó toda su vida contra el destino, que lo marcó muy fuertemente. Se llevó a uno de sus hijos en un accidente casero, también a uno de sus nietos, y lo golpeó de vuelta el año pasado al fallecer su hija mayor de covid. “El destino siempre quiso que yo no escribiera pero soy muy terco, lo que me pongo en la cabeza, lo hago”.
“Cuando era chico papá me regaló la primera máquina de escribir, era mi mundo, pero tenía que hacer la escuela también. Cuando repetí en tercer grado, me rompió la máquina y todos los escritos, no me interesaba, yo los tenía en la cabeza. Hoy día tengo muchísimo material”.
Hace 6 años el Polako compartió sus escritos y se armó un taller especial en el Hospital de Día. Comenzó con el acompañamiento de Melisa De Petris y un intercambio con varios poetas de la ciudad quienes fueron haciendo intervenciones en el 2021. Un año después estaba la propuesta de renovar el espacio porque el libro estaba esperando por ser, no lo habían podido concretar. Allí empezaron semanalmente los viernes a tener su espacio junto a Florencia Rodríguez.
“Intercambiamos lecturas y la curiosidad de buscar y estar en ese contacto constante con el exterior. Para el libro fuimos seleccionando la cantidad de relatos. Esto es solo un 10%. Empezamos por la poesía porque fue lo primero que nos encontró, él me fue orientando en el resto de sus textos y fuimos creando el viaje, vas conociendo el libro a medida que te zambullís en distintos paisajes y lugares”, comentó Flor.
En 2018 el Polako entró en coma, apenas se recuperó, quiso empezar a escribir. Finalmente fue seleccionado por el Fondo Municipal de las Artes. “El fondo tampoco alcanzaba para la publicación completamente, pero trabajamos a pulmón lo comunitario y llegamos a hacer 80 ejemplares”, comentó la editora.
En relación al armado y corrección, Carlos Mux tuvo un rol muy importante. La tapa es del color de la primera máquina del Polako y el diseño es el mismo que el de Alfonsina Storni. Trabajaron en conjunto con el taller “Prende” de Ferrowhite e hicieron las tapas entre todos, las mandaron a la imprenta y finalmente esperaron el libro completo.
“Entré como paciente en el Hospital de Día, hoy soy parte del equipo. Descubro ese don que tienen quienes están sufriendo y trato de sacarlo a través del arte”.
El Polako estuvo internado en el Hospital en el año 2004. “Un año fueron como 20 años afuera, la enfermera me agarró de punto, me ataba a la cama, me pegaba con una toalla mojada, voy a contar cómo es la historia de ese hospital, les guste o no les guste. Se usaba electroshock, esas cosas nunca se hablaron”.