Dos demonios sobrevuelan el Consejo Escolar
“Nunca Más… Para todos los sectores…”, reclamó la vicepresidenta PRO del Consejo Escolar, Adriana Perdriel, al cumplirse cuarenta años del último golpe de Estado cívico militar, haciendo tanto ruido como el silencio de la gestión municipal de Héctor Gay sobre la dolorosa efeméride. La docente subió su deseo a su cuenta de Facebook y linkeó un “listado completo de ataques y asesinatos de montoneros y erp”.
Tanto la acción o la omisión mencionadas contrastan con la contundencia del repudio al terrorismo de Estado demostrada por centenares de miles de ciudadanas y ciudadanos en las plazas del país el jueves pasado, en el aniversario del inicio formal del plan sistemático genocida para la eliminación de lxs opositorxs a la dictadura, cuya denuncia por parte de sobrevivientes, familiares y organismos de derechos humanos fuera ratificada por más de 150 sentencias judiciales.
Perdriel fue electa en octubre de 2015 y es una de lxs cuatro representantes del macrismo en el órgano educativo. El oficialismo local la propuso como candidata a presidenta del Consejo aunque perdió la elección a manos de la larraburista Susana Rodríguez.
En su curriculum virtual, Perdriel detalla que se desempeña en la Escuela Primaria Nº10 y hasta el año pasado lo hacía como directora de la EP Nº17 “Cnel. Leonardo Rosales”. También pasó por el Instituto Julio César Avanza como “profesora de EGB para I y II Ciclo” y “Docencia”. Entre sus “aptitudes” apunta: “negociación”, “inglés” y “oratoria”.
El reclamo de la consejera no sorprende en las filas de la Alianza Cambiemos donde militan varios funcionarios ligados a la dictadura y muchxs de sus dirigentes, a pesar del esfuerzo por contenerse o disimular, muestran la hilacha habitualmente. Desde “el curro de los derechos humanos” que prometió abolir el actual presidente durante su campaña hasta su más reciente nunca más a la difusa “violencia institucional“, pasando por el bache de Quilmes del cocinero Molina, el encubrimiento de la participación civil en el golpe denunciado por el SiPreBA, hasta el negacionismo del ministro porteño Darío Lopérfido.
El secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj milita por el encierro domiciliario de genocidas y, en sintonía con Perdriel, recibió en la mismísima ex ESMA al Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (Celtyv), organización de militares y familiares creada para pedir “memoria completa” y juicio y castigo para los “crímenes de la guerrilla”.