Pablo Fermento

Pablo Fermento: “Que no se haga un análisis probatorio mínimo nos parece totalmente arbitrario”

El fiscal auxiliar analizó el fallo de Casación que benefició a los exintegrantes de la Triple A, Juan Carlos Curzio y Héctor Ángel Forcelli. Ambos habían sido condenados a 10 años de prisión como miembros de la asociación ilícita que operó en los años previos a la última dictadura, ejecutando secuestros, amenazas y asesinatos con motivaciones políticas.

La clave del desacuerdo jurídico radica en cómo se interpreta el delito de asociación ilícita. Aunque se reconoció la existencia de la organización y sus crímenes, por el voto mayoritario de los jueces Ángela Ledesma y Guillermo Yacobucci, se consideró insuficiente la prueba de que Curzio y Forcelli hayan hecho un “aporte efectivo” a la actividad de la misma.

Manejaron ‘la fiambrera’, portaban armas, intimidaban, pero no encontramos un aporte a la organización, nos dijeron. Entonces no sabemos cuál es el aporte del que hablan”, afirmó Fermento.

Lo que genera mayor preocupación entre los actores judiciales es la utilización de argumentos provenientes de otro fallo, correspondiente al caso de la CNU (Concentración Nacional Universitaria) de Mar del Plata. Allí, el mismo tribunal había determinado que no todo miembro de la CNU debía ser considerado automáticamente parte de una asociación ilícita, dado que esa organización tenía antecedentes ideológicos y estructuras previas a los delitos imputados.

Sin embargo, en el caso de la Triple A en Bahía Blanca, el fiscal subrayó que no existía una estructura ideológica o política previa, sino que se trató de un grupo creado exclusivamente con fines delictivos.

“Estamos diciendo que traspolaron argumentos textuales de ese fallo a este, cuando la situación era totalmente diferente, porque si uno se para en lo que pasó, en la prueba, en lo que se reconstruyó en el juicio, vemos que a esta gente se la juntó en la UTN para llevar adelante toda una actividad de hostigamiento, de intimidación a los alumnos, de romper asambleas, de salir en los vehículos, colocar bombas, además de los 22 asesinatos. Luego, con la misma lógica, se los incorpora a la Universidad Nacional del Sur, siendo el rector interventor en ese momento Remus Tetu, uno de los jefes de la organización”, sentenció Fermento.

Uno de los aspectos más criticados del reciente fallo es la escasa fundamentación jurídica que sostiene la absolución. Mientras que el voto en disidencia del juez Alejandro Slokar desarrolla más de 60 páginas de análisis probatorio, los fundamentos de la mayoría ocupan apenas cuatro páginas, con tan solo tres párrafos dedicados a explicar por qué no se acredita la participación de Curzio y Forcelli en la asociación ilícita.

Fermento no dudó en calificar al fallo como arbitrario y carente de lógica jurídica: “No se explica el razonamiento que lleva a la conclusión. No hay una regla de inferencia”. Ante este escenario, la Fiscalía ya anticipó que se presentará un recurso extraordinario ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Noticias relacionadas