“Recibimos más de mil amenazas, ya perdí la cuenta”
Verónica Bajo, integrante de Acciones Feministas, conversó con ¿Quién te juna? a raíz de las amenazas recibidas luego de emprender una campaña para que el espectáculo de Yayo no se presente en Bahía Blanca debido a que reproduce violencia simbólica, tipificada en la ley 26.485 de Protección Integral de las Mujeres.
“Cuestionar el arte porque, como una actividad humana más, no está exenta de reproducir patrones racistas, antisemitas, misóginos, sexistas, y en ese sentido con la llegada de este personaje, sencillamente lo que hicimos es escribir una visibilización de la violencia simbólica que viene irradiando en sus espectáculos hace ya más de veinte años, escribimos unas líneas en la página”.
“A partir de ahí las Mujeres Autoconvocadas de Punta Alta tomaron esto, ellas agregaron algunas cosas, porque también Yayo se presentaba allí, formalizaron este pedido enviando una carta al municipio de Punta Alta y después ya es conocido que la productora de este espectáculo y el teatro Don Bosco, anunciaron que por razones de agenda se suspendían los shows”, relató Bajo.
Desde ese momento la agrupación comenzó a recibir amenazas en su página de Facebook: “Nos dijeron que íbamos a terminar como Ángeles Rawson. Más allá que un perfil sea falso o trolls, hay un ser humano atrás escribiendo estas cosas. Hay una persona que esta tipeando detrás de un teclado eso”.
Bajo aseguró que el director del Instituto Cultural, Ricardo Margo, “hizo unas lamentables declaraciones, vinculándonos a los grupos feministas y autogestivos como somos las Mujeres Autoconvocadas o Acciones Feministas, a la censura. Subirse a esta ola de agresiones, que censuramos, que somos extremistas, con el panorama que tenemos en Argentina de violencia hacia las mujeres, es lamentable”.
Desde la agrupación creen que el descargo de Baby Etchecopar en su programa de radio también tiene que ver con las amenazas recibidas: “Él enseguida salió a decir barbaridades en su programa en una radio, que tiene una audiencia muy grande. Entonces, a partir de ahí también se ha desatado esta ola de ataques”.
“La comedia también puede ser violenta, racista, antisemita. Yo siempre me hago una pregunta: ¿qué sucedería si un humorista dijera esto en relación a la colectividad judía? ¿Saldría Radagast rápidamente a decir “es comedia”? Bueno, habría que ver si no se cuidarían un poco más”, afirmó Verónica.