Burgos Melo: un asesinato laboral cerca del juicio
El caso del obrero Gabriel Burgos Melo, quien murió aplastado por el derrumbe de la zanja donde trabajaba en Soler al 100 a fines de 2016, quedó a la espera del juicio oral. Están imputados el titular de la empresa MAPSA, Ángel Pablo Matélica, el subdirector encargado de los controles, Nahuel Ostertag, y el inspector de EDES, Sergio Ferreti.
“El hecho está sumamente acreditado, Matélica y Ferreti tenían la tarea de supervisión y control de la obra, no cumplieron ningún tipo de medida de seguridad durante los 15 días que estuvieron haciendo un zanjeo que iba desde la Plaza Rivadavia, pasaba por Alsina, doblaba en Soler y terminaba en Belgrano”, dijo a FM De la Calle Cristian Chazarreta, abogado de la familia de Burgos Melo.
Agregó que se trató de “un hecho sumamente previsible, se podía evitar habiendo cumplido las medidas que la Ley de Seguridad e Higiene determina: una excavación de más de 1.20 metros, un licenciado en Seguridad e Higiene que a primera hora estuviera ahí, un estudio de suelo. Es tanto dinero como pérdida de tiempo para los empleadores y, lamentablemente, en el rubro de la construcción el tiempo apremia y los trabajadores lo hacen en situaciones desventajosas”.
Los riesgos fueron permanentes. El abogado destacó que la norma “no se respetó ningún día previo, nunca se aplicó ninguna medida de seguridad, en la obra sobre calle Soler se venían desmoronando unas paredes conforme declaró uno de los testigos, había llovido. Hicieron caso omiso los encargados y los trabajadores no se pueden poner quisquillosos porque si no son despedidos y se busca a otra cuadrilla”.
“En el último tramo de la excavación se produce el colapso de una de las paredes, Burgos Melo fallece y 3 operarios estuvieron durante varias horas atrapados en la zanja, son personas que cuentan con graves secuelas físicas y psicológicas”.
“El domingo no deberían haber trabajado, deberían haber terminado la tarea un jueves o viernes. Matélica y Ferreti lo disponen porque cambian la metodología de trabajo por un pedido puntual de un comerciante, los hacen trabajar un domingo y, completando el último tramo de la excavación, se produce el colapso de una de las paredes, Burgos Melo fallece y 3 operarios estuvieron durante varias horas atrapados en la zanja, son personas que cuentan con graves secuelas físicas y psicológicas”.
En el derrumbe también quedaron atrapados otros tres obreros Hernán Olivares, José de la Iglesia y Juan González, “la imputación es por el homicidio culposo de Burgos Melo y las lesiones graves y gravísimas de los 3 obreros. Las penas van de 2 a 6 años y será agravado el máximo proporcionalmente en las lesiones. Esperamos, la familia espera una condena ejemplar, no sola por la memoria de Gabriel. La causa penal con una pena concreta va a generar una actitud disuasiva en quienes controlen y llevan a cabo estas obras”.
Chazarreta comentó que en la actualidad los imputados “no tienen ningún tipo de restricción” en lo laboral pero “además de pena de privación de la libertad puede haber alguna inhabilitación. Hasta que la sentencia no este firme no tiene implicancia”.
Por último, el letrado dijo que “la estrategia de la defensa fue determinar que ese domingo no había nadie fiscalizando, es un delito que se cumple por omisión, más complejo de probar. En la causa de indemnización para las partes lo que resulta inmoral es que le echan la culpa al fallecido, es doloroso hasta para la familia. La prueba es contundente y no hay por dónde agarrarse”.