“La economía viene hace dos años creciendo, sin embargo, no se logra reducir la pobreza”

Andrés Wainer, investigador del área de Economía y Tecnología de la FLACSO y del Conicet, dijo a FM De la Calle que “hay un fenómeno lamentable que antes no sucedía en Argentina que es que hay empleo, se crean puestos de trabajo, pero la pobreza no desciende”.

El último informe del INDEC referido a la pobreza analizó el segundo semestre del 2022 y arrojó que hay 11,5 millones de personas en situación de pobreza en nuestro país. El aumento ubicó al 39,9% de la población económicamente activa por debajo de esa línea mientras que 2,4 millones de personas son indigentes.

“Esto tiene que ver con un problema de ingresos, con que los ingresos no están pudiendo superar los niveles de inflación y también con la calidad de esos empleos que en muchos casos son lo que llamamos empleo precario”, refirió y añadió que “la economía viene hace dos años creciendo, sin embargo, no se logra reducir la pobreza”.

Se trata de un fenómeno relativamente novedoso en el cual “una economía que ha crecido, que ha creado empleo o ha recuperado empleo, genera o no logra sacar a la gente de la pobreza”.

En 2022 el empleo fue más alto que en 2019 y hubo 22 mil puestos de trabajo más que hubo en 2015, según el especialista “se recuperó rápido lo perdido en pandemia y durante la crisis del gobierno de -Mauricio- Macri”.

El problema de los ingresos está directamente relacionado con la inflación y a la riqueza que “está mal distribuida, se beneficia un sector minoritario de la sociedad, sectores que tienen capacidad de formar precios. No tienen ingresos fijos, son los asalariados, los jubilados, que no podemos decir cuánto cobrar. Se ve en los sectores más concentrados pero también se ve en otras capas porque tenemos fenómenos como esto del nivel de pobreza altísimo”.

“Tenemos una fragmentación social cada vez más marcada, más latinoamericanizada, lo solíamos ver en otros países de América Latina y no tanto en la Argentina. (…) Dentro de los propios trabajadores también porque una cosa son los que tienen trabajo registrado en condiciones más o menos buenas o con sindicatos fuertes que pueden pelearle y ganarle a la inflación, pero también está el resto que no tiene esa posibilidad”.

En la provincia de Buenos Aires, analizó Wainer, pese a la suba de los salarios que permitió una leve recuperación en 2021 de las pérdidas durante la pandemia, volvieron a recaer en 2022 debido al factor inflacionario.

“Tenemos una economía que crece y genera algo de empleo pero con salarios muy malos que no alcanzan. Esto se ve agravado, además del aumento de precio y la inflación, por qué precios aumentan. Si vemos los últimos meses los que más vienen aumentando son los alimentos, que tienen un peso central para definir justamente lo que es la línea de pobreza y la línea de indigencia”, aseveró el investigador.

En este sentido observó que esos montos aumentaron por encima del IPC. Además señaló que hay muchos factores que desembocan en esta situación, uno de ellos es principalmente la sequía.

Con la carne ocurrió lo contrario, ya que la sequía generó que se liquide el ganado y eso causó una baja en los valores. “Por un lado hay menos y por el otro, para recuperar el stock, se necesita retener”.

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