Subsecretaría de Niñez: “Lo más triste de todo esto es que no tenemos una fecha de cobro”

Dos trabajadoras contratadas por la Subsecretaría de Niñez y Adolescencia dieron sus testimonios a FM De la Calle sobre la situación de precarización laboral que padecen en diversas dependencias municipales. “Estamos en la misma todas, renuevan cada 4 meses si es que renuevan, si no lo hacen no podés ir a quejarte a ningún lado”, dijo una de ellas.

El Frente de Todos presentó en la última sesión del Concejo Deliberante un pedido de informes sobre la problemática, aunque no obtuvo el acompañamiento del oficialismo.

La concejala Lucía Martínez Zara afirmó que se acercaron trabajadores y trabajadoras de ese área solicitando una reunión con integrantes de su bloque, los cuales fueron recibidos. Sostuvo que “hay grandes brechas entre aquellos que están en la planta y aquellos que se encuentran bajo esta modalidad contractual”.

Una de las entrevistadas -quienes no serán identificadas por los antecedentes de represalias contra quienes reclamaron por sus condiciones laborales- se desempeña desde hace 5 años como cuidadora en un centro de día al cual asisten alrededor de 30 chicos y chicas de entre 2 a 6 años. Desde que comenzó y hasta hoy se encuentra bajo modalidad contractual con una renovación cada 4 meses, es contratada co-proveedora de un servicio a la Municipalidad.

“Lo más triste de todo esto es que no tenemos una fecha de cobro, hoy por hoy todavía no cobré, siempre estamos cobrando entre el 20 y 25 de cada mes, podemos cobrar cualquier día. No puedo pagar una cuenta al día porque el cobro es al azar”.

Recibieron hace poco un aumento del 18% aunque las actualizaciones suelen ocurrir cada 6 u 8 meses. “Reflejado en la inflación, no es nada”, comentaron.

“El sindicato en este caso no nos respalda porque somos contratados, nos desvincula, pero hemos hecho petitorios para la Secretaría de Niñez y nunca tuvimos respuesta, si la hubo, fue negativa. Nunca nos dieron la posibilidad de una reunión ni nos dieron una expectativa a futuro en una mejora de lo que es la condición laboral, lo que estamos viendo es que la condición va a ser así hasta jubilarnos”.

Dejar el trabajo no es una opción ya que señalaron sentir vocación por la labor que llevan adelante y que implica el cuidado, enseñanza y vínculo con niños y niñas en situaciones de vulnerabilidad. “Somos trabajadores para la gente del barrio, trabajamos para la comunidad”, añadieron.

Otra de las trabajadoras indicó que su tarea es en hogares convivenciales. En la actualidad lleva a niños y niñas a terapia, les hace la cena, el almuerzo, la merienda y les acompaña a diversas actividades, incluso hacer trabajos de cuidado e higiene.

“Involucra mucho los sentimientos, son chicos con una vida muy fea, con tan pocos años de vida la han pasado muy mal y no podés no involucrarte con su historia, abrazarlos y decirles que todo va a estar bien aunque no sepas si todo va a estar bien”.

En su cotidianeidad la modalidad contractual conlleva pesadez ya que al acercarse la fecha de renovación (o no), “no sabés si vas a seguir trabajando, no te podés meter en una cuenta, no podés sacar un televisor en 6 cuotas porque no sabés qué va a pasar”.

Finalmente, plantearon que el no tener una fecha de cobro es una preocupación compartida entre quienes se encuentran en esta situación, además de tener que abonar el monotributo y los gastos de pagarle a alguien que se encargue de cuestiones contables.

Foto cabecera: el intendente Héctor Gay junto a la secretaria de Políticas Sociales, Vanina González, y la subsecretaria de Niñez Juliana Cerritelli.

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