¡Con Norita ahora y siempre!
“¡Venceremos! ¡Venceremos! ¡Ven-ce-re-mos!”, gritamos tantas veces con ella en esos encuentros de lágrimas y risas, de indignación y esperanza en los cuales ejercía su pedagogía solidaria con todas las luchas. “Soy una protestona porque, sencillamente, quiero cambiar este mundo injusto”.
Norita tuvo la más linda cualidad que el Che encontraba entre las revolucionarias. Supo ser capaz de sentir en lo más hondo cualquier injusticia cometida contra cualquiera en cualquier parte del mundo.
“Lucho para que se haga justicia y sean condenados cada uno de los genocidas. Lucho por la felicidad de los pueblos y para que se respeten todos los derechos. Lucho por la soberanía y contra el saqueo de nuestras riquezas y nuestras tierras. Lucho por la liberación de las mujeres y contra todas las opresiones de género y raciales. Lucho contra la explotación del ser humano. En definitiva, lucho contra este sistema: soy anticapitalista, porque el capitalismo es sinónimo de injusticia y desigualdad, de hambre y de egoísmo, siempre hace más ricos a los ricos y más pobres a los pobres. Por eso me considero socialista, y un poquito anarquista también. Lucho por una democracia participativa, donde no haya opresores ni oprimidos”.
Su familia comunicó su partida a las 18:41 de este jueves 30 de mayo. Tenía 94 años. Había sido intervenida quirúrgicamente el 17 de mayo en el Hospital de Morón por una hernia que se sumó a otras patologías que agravaron el cuadro.
Referente destacada por su lucha incansable en defensa de la vida y los Derechos Humanos, se unió a las Madres de Plaza de Mayo a raíz del secuestro de su hijo, Gustavo Cortiñas, ocurrido el 15 de abril de 1977.
Subrayaron que “su especial sensibilidad y su ideario indiscutido en defensa de las y los que menos tienen hizo que se ganara el respeto y cariño incondicional de los pueblos. En tal sentido, queremos transmitirles que Nora estuvo acompañada y sostenida por el amor de su familia hasta el último momento y agradecemos todas las expresiones de reconocimiento y afecto que ella recibió a lo largo de su vida, y que a nosotros nos abrazaron amorosamente en estos días tan difíciles”.
“Profundamente preocupada en estos tiempos por la grave situación que atraviesa nuestro país y dispuesta siempre a estar presente allí donde hubiera una injusticia, Norita luchó hasta el último momento por la construcción de una sociedad más justa”, afirmaron.
Está en nosotres.