Elecciones UNS: los proyectos de universidad de cada lista en FM De la Calle
La candidata a vicerrectora por el oficialismo, Andrea Castellanos (Acción UNS) y los candidatos a rectores Pedro Silberman (La Red) y Gastón Milanesi (Lista Blanca) expusieron su modelo de universidad y los lineamientos generales de sus propuestas de cara al proceso electoral que iniciará el próximo 9 de noviembre.
La fórmulas se completan por Daniel Vega (Física), quien va por la reelección y la doctora Alejandra Pupio -Humanidades- y René Albouy -decano de Geología- y como vices de las ofertas opositoras.
Tras los comicios se conformará la Asamblea Legislativa que el 7 de diciembre definirá al binomio que conducirá los destinos de la casa de altos estudios desde 2023 hasta 2028.
El 9 de noviembre se votan, además, representantes del alumnado para el Consejo Superior Universitario y los Consejos Departamentales.
¿Cuál es el proyecto de cada lista?
Castellano (Acción UNS) marcó al aire de FM De la Calle que proponen “continuar muchas de las líneas que ya se vienen trabajando desde 2019 e impulsar nuevos proyectos, queremos profundizar todo el proceso de digitalización de la UNS en cuanto a la gestión administrativa, de compra, de todos los procesos”.
“Hemos pensado a la universidad con aulas híbridas, que permiten dictar cursos con modalidad a distancia, o combinando alumnos de manera presencial con alumnos que no estén aquí, nos va a permitir llegar con nuevas ofertas educativas sobre todo de posgrado, nos va a permitir flexibilizar el horario para estudiantes que trabajan o tienen que realizar tareas de cuidado”, agregó.
“Queremos trabajar en una modificación profunda de los planes de estudio, para acortarlos, hacerlos más flexibles, para ajustar los contenidos de los programas de cada programa curricular al tiempo que los estudiantes tienen. Apoyándonos fundamentalmente en las nuevas tecnologías”, puntualizó al aire de En Eso Estamos.
Por su parte, Pedro Silberman, de La Red, expresó que “priorizamos problemas que tienen que ver con la introducción y el acceso de los estudiantes a la universidad o aspirantes”.
Mientras que “el segundo problema es el 52% de deserción durante el primer año, en el último año hubo casi 500 estudiantes que se cambiaron de universidad, de los cuales el 70% tenía un cuarto de carrera ya realizado. Tenemos una serie de dificultades no solo para ingresar y sostener sino para egresar estudiantes”.
“Nuestro principio fundamental es que el conocimiento y la universidad es un derecho universal, creo que la universidad tiene que poner el eje para resolver esa dificultad. Después tenemos pensado un modelo de universidad en que la gestión se ocupe de los trabajadores y trabajadoras de la universidad, no solo cuidarlos en este proceso post pandémico sino también cuidarlos en sus trabajo y promoverlos tratar de que mejoren su desempeño”, añadió.
En tercer lugar, Milanesi de la Lista Blanca, refirió que “en términos generales nosotros apuntamos a una universidad contextualizada en el mundo en base a saberes especializados apoyados en un concepto humanista para atender las necesidades de nuestro país, porque no se la puede desmembrar y descontextualizar de la realidad que se está viviendo”.
¿Qué clase de profesional se quiere formar en cada uno de los proyectos?
En este tópico, desde Acción UNS, remarcaron que “lo que hay que tener presente es la velocidad del cambio tecnológico, a lo que apuntamos es que tenemos que pensar un diseño curricular que apunte más a desarrollar la capacidad analítica en los estudiantes y a generar perfiles que sean flexibles para vincularse con otras disciplinas, que sepan y desarrollen la capacidad de resolver problemas”.
“Los planes tienen que apuntar más que nada a desarrollar estas habilidades y no ir a buscar el detalle o la especialidad como pasa en las carreras ahora” dijo y analizó que “tenemos un egreso promedio de 26 o 27 años, eso es demasiado cuando miras el mercado laboral ahora”.
Desde La Red, Silberman planteó “que tengamos egresados y egresadas que den respuestas a los problemas de la sociedad tiene que ver con una agenda propia de la universidad, por ejemplo, en la temática de extensión”.
Esto sucede porque estos proyectos “vienen financiados con un eje particular a nivel general, nacional. Nosotros tenemos que tener una agenda propia de la extensión que queremos porque la extensión es la que tiene que traer los problemas de las personas y tiene que insertarse en las currículas de las carreras”.
En este camino, Milanesi opinó que “tengo que formar un alumno con saberes especializados globales, tiene que tener una mirada para atender los problemas de Argentina, es decir, nuestros conocimientos que son homogéneos a la hora de formar a un alumno”.
“La educación pública es una inversión que hace la Argentina en pos del crecimiento de nuestro país. Un país crece por dos elementos, hay más población y tiene más calidad de producción y la mayor calidad de producción hoy es el intangible del conocimiento”, observó.
Además, precisó que “nuestros alumnos aparte de los saberes tradicionales, tienen que manejar hoy idioma, tecnología, datos, básicamente. También tiene que tener competencias blandas, trabajo en equipo, liderazgo”, entre otras.
¿Cómo influencia el sector privado en el financiamiento y la definición de las líneas de investigación?
“Nosotros no tenemos un vínculo o una dependencia en cuanto al financiamiento que pueda proveer el sector privado, nuestros fondos provienen el 100% de programas que obviamente vienen del Estado, tenemos vínculo con los gobiernos municipales, provinciales y nacionales, pero no en cuanto a condicionamientos de las líneas de trabajo que podamos desarrollar, te diría que estamos tratando de buscar más vinculado sobre todo con el sector productivo”, marcó la doctora en Economía.
Sobre este aspecto, Silberman explicó que la universidad “tiene que enfrentarse, pararse frente a los sectores privados y corporativos de una manera consistente y corriente, me parece que si la agenda de la universidad la van a marcar las corporaciones va a ser muy difícil que podamos lograr una diferencia en favor de las personas y la comunidad”.
“Tiene que tener una autonomía y tiene que tener alianzas estratégicas con el sector productivo de la ciudad. Hay que asociarse, generar posibilidades, recursos, financieros pero también intelectuales. Siempre con una perspectiva hacia adelante de los próximos años porque sabemos que el desarrollo de la ciudad o del país es muy rápido y los procesos de la universidad son lentos”, añadió en este sentido.
“Filosóficamente no debería tener ninguna. El sector privado debe participar sirviéndose de la universidad en actividad de vinculación, de extensión y de transferencia tecnológica, no definiendo el perfil del egresado”, expresó el candidato a rector por la Lista Blanca.
¿Qué aportes podría hacer la universidad respecto al debate sobre los problemas estructurales de la ciudad y la región?
“La universidad tiene que intervenir y tiene que opinar respecto de todos los temas importantes, la Uni tiene equipos de gente muy reconocida en el tratamiento del tema y en los diagnósticos, yo creo que el problema lo tenemos no en la falta de diagnóstico y propuestas sino en el recorrido que hay que hacer para que estas propuestas sean tomadas por las personas que tienen capacidad de decisión y de formular políticas públicas”, dijo Castellano a FM De la Calle.
“Claramente el aporte de la universidad es por lo menos de dos tipos, uno es generar los escenarios posibles, es una institución que tiene una mirada general de mucha consideración, tiene que ser el centro de convocatoria para ese tipo de discusiones”, analizan desde La Red.
Y que, “la segunda, nuestro objeto fundamental es la producción, yo creo que hay que trabajar en esa dirección, generar un incentivo, acompañar financieramente a los grupos de investigación, de extensión y docencia para que puedan ir generando alternativas o propuestas o colaboraciones a distintos problemas como el narcotráfico, el agua, salud”.
“La UNS puede hablar de todos los temas porque casi todas las áreas del conocimiento están cubiertas. Ahora de qué manera vamos a aplicar ese concepto, la universidad básicamente tiene varias maneras de relacionarse una de ellas es la vinculación cuando se pide la mirada de los expertos y eso está desprovisto de cualquier interés o sesgo, de esa manera la universidad estaría aportando su grano de arena de la sociedad”, respondió Milanesi.
¿Cuáles son las principales diferencias como proyecto político de su lista en función de las demás?
“Particularmente tenemos una tradición de investigación que nos distingue de los otros establecimientos universitarios, yo creo que las otras propuestas no han puesto el énfasis en la investigación como sí lo hace la nuestra”, sostuvo la candidata a vicerrectora de Acción UNS.
“Queremos docentes que hagan posgrados y tengan dedicación, porque no caben dudas de que el docente que investiga es un mejor docente”, afirmó.
“Nos identificamos también por tener una dependencia partidaria externa, más allá de que nuestra agrupación contiene docentes que provienen de distinta ideología, nosotros consideramos que la universidad debe tener sus objetivos propios, definidos internamente y eso en defensa de la autonomía”, detalló.
“La mirada es lo que nos diferencia, obviamente que coincidimos en todos los procesos o los planes de expansión y crecimiento, seguramente vamos a coincidir”, aseguró Silberman.
La diferencia es que buscan “mejorar el acceso a grupos y sectores que hoy no pueden ingresar y los que ingresan no se pueden sostener. Y docentes, investigadores, investigadoras, extensionistas, no docentes que tienen dificultades de salud, de salud mental, consumos problemáticos”.
Por su parte, Milanesi dijo que “en este caso con una fuerte mirada en lo que respecta a dar pasos hacia adelante en lo que demanda el siglo 21 respecto a las universidades, ajustar algunos procesos, hacer un cambio de estructura, alguna lógicas en el proceso de aprendizaje de cara a nuevos alumnos generacionalmente muy distintos a nosotros y a un alumno de hace 20 años atrás, y en la dinámica del contexto”.