Gabriela Bustos Arnst fue condenada por falsificación de documento público y fraude a la administración pública y uso de instrumento público falsificado y fraude a la administración pública en un juicio refrendado por el juez José Luis Ares. La pena fue de dos años de prisión en suspenso, 15 mil pesos de multa, inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos y 200 horas de trabajo comunitario. Fue absuelta por uso de documento público adulterado, delito por el cual serán investigados su padre, su madre y su hermana.

Se trata de la utilización de pasajes del Ministerio de Salud ortorgados al Hospital Penna para presentar ante la empresa Transportes Plaza S.A.C. entre los días 11 de enero y 1 de diciembre de 2011. Para ello, se falsificó la firma al director César Comezaña.

“Con dicho accionar y ardid desplegado, se provocó fraude engañando a la Administración Pública, quien, como consecuencia de ello, resultó perjudicada patrimonialmente por el pago efectuado de los pasajes emitidos a personas no autorizadas”, dijo el juez Ares.

El fiscal Gustavo Zorzano, el defensor particular Gustavo Giorgiani y la propia Bustos Arnst, acordaron el juicio abreviado. El Ministerio Público calificó el ilícito como fraude en perjuicio de la administración pública, falsificación y uso de documentos públicos adulterados y solicitó la imposición de la pena de tres años de prisión de ejecución condicional con la obligación de cumplir con las siguientes reglas de conducta por el plazo de tres años: fijar residencia, someterse al control del Patronato de Liberados y realizar trabajos no remunerados en favor del estado o de institución de bien público, fuera de los horarios habituales de trabajo, durante el tiempo que dure la ejecución de las reglas de conducta establecidas, hasta alcanzar la cantidad de trescientas horas (a razón de cien horas por año), multa de veinte mil ($20.000) e inhabilitación especial perpetua para desempeñar cargos públicos. La defensa prestó conformidad a la calificación y pena junto a su asistida”.

El juez correccional absolvió a la imputada respecto a varios hechos por no haber sido probados y en otros supuestos aplicó el criterio unánime en la doctrina y la jurisprudencia de que no corresponde condenar por el uso del documento falsificado al autor o autora de la falsificación (el uso queda absorbido por la falsificación). Por ello, redujo la pena pactada por las partes y ordenó investigar a familiares de Bustos.

Nuevamente la empresa Central Piedra Buena S.A. fue infraccionada por el Comité Técnico Ejecutivo por la emisión de ruidos molestos. Se recibieron 17 denuncias. Así lo informó hoy la Secretaría de Gestión Ambiental. Otras dos sanciones por el mismo motivo se habían registrado la primera semana de abril.

El hecho más reciente se produjo el viernes 3 de junio a las 20:01 “como consecuencia de la salida de servicio de la unidad 29, provocando la apertura de las válvulas de seguridad de la caldera y emitiendo a la atmósfera vapor de agua”.

“La emisión fue registrada por la estación de monitoreo acústico continuo del CTE y constatada por los inspectores. Luego de analizados los registros de niveles sonoros y realizados los cálculos correspondientes se determinó que el mismo superó los límites legales para emisión sonora en horario de descanso”, afirmaron desde la oficina ambiental.

El acta de infracción será enviada, junto a un informe de lo sucedido, al Organismo Provincial de Desarrollo Sostenible (OPDS) donde deberían estar en análisis las labradas por Rosana Cappa y Matías Espósito los días 6 y 8 de abril.

Entre las 13:19 y las 13:32 del 8 de abril los ruidos fueron consecuencia de la salida de servicio de la unidad 30: “Se abrieron las válvulas de seguridad de la caldera y se emitió la atmósfera vapor de agua. El ruido fue constatado por los inspectores del CTE superando los límites legales para emisión sonora en horario diurno por lo cual se infraccionó a la empresa. Se recibieron 38 denuncias vecinales y, según informó el municipio, personal del CTE se comunicó con cada unx de lxs vecinxs para comunicarles las actuaciones que se estaban llevando a cabo”.

Según informamos oportunamente, el miércoles 6 de aquel mes, Central Piedra Buena S.A. violó la misma normativa cuando aproximadamente a las 15:09 salió de servicio de la unidad 29 motivando la apertura de las válvulas de seguridad de la caldera y emitiendo a la atmósfera vapor de agua. En dicha ocasión se recibió solo una denuncia.

El OPDS fue duramente cuestionado por el juez correccional José Luis Ares por el “sospechoso”, “sistemático” y “burdo accionar dilatorio” de sus funcionarios en causas de contaminación ambiental. Además dio intervención al Ministerio Público Fiscal ante la posible comisión de delitos de acción pública, tales como abuso de autoridad, omisión o retardo de actos del oficio, violación de los deberes de funcionario público, entre otros, por parte de integrantes del organismo provincial que en Bahía Blanca tiene sede en la mismísima Unión Industrial.

El intendente Héctor Gay se comprometió a gestionar el traslado de la delegación a dependencias de la Secretaría de Gestión Ambiental aunque, por el momento, fue solo otro anuncio.

La Asociación Sindical de Profesionales de la Salud provincial, CICOP, alcanzó un acuerdo “integral” con el gobierno bonaerense tras varias semanas de paros y protestas que incluye la recomposición salarial, mejora en las condiciones laborales y avances en la situación previsional.

El presidente del gremio, Fernando Corsiglia, dijo a FM De la Calle que en cuanto a lo salarial se plantó “un esquema a ocho meses con un 25 por ciento de aumento promedio de bolsillo en agosto. En lo que hace a condiciones de trabajo tiene que ver con compromisos que realizó el Ministerio de Salud en relación a cargos, se compromete a 300 cargos y llevar a adelante el proceso de una alta por cada baja que se produzca. Se comprometió a realizar refacciones en 21 establecimientos por un valor de 450 millones de pesos y un aumento de 120 por ciento al presupuesto para insumos en relación al 2015”.

En el aspecto previsional se dará “continuidad a las jubilaciones que estaban en espera, acordamos que los que tienen 60 años de edad o más y 35 años de servicio o más puedan jubilarse, cosa que hasta ahora estaba detenida, sin pagar ningún cargo adicional. Se jubilarían por el viejo régimen. Tenemos 120 días de plazo para discutir acerca de la implementación del decreto actual en relación al cambio jubilatorio”.

En cuanto a la evaluación del prolongado conflicto con el gobierno, Corsiglia aseguró que lograron “instalar en la agenda mediática la cuestión de la salud pública y al mismo tiempo quedó abierta la discusión para todos los problemas que seguimos teniendo. Desde el punto de vista del gremio fue positivo y para la salud pública es un pasito para intentar mejorar”.

A 40 años del secuestro y desaparición de Raymundo Gleyzer

“Nosotros no hacemos films para morir, sino para vivir, para vivir mejor. Y si se nos va la vida en ello, vendrán otros que continuarán... “

Raymundo Gleyzer, 1974

I

(Por Luis Ponte) “Raymundo Gleyzer ha desaparecido. La historia de siempre. Lo arrancaron de su casa, en Buenos Aires, y no se sabe más. Había hecho películas imperdonables”.

Así arranca “Se los traga la tierra”, de Eduardo Galeano, escrito en junio del ’76, días después del secuestro de su amigo el cineasta argentino que había nacido en Buenos Aires 35 años antes.

Sus padres ruso-ucranianos, Jacobo y Sara Aijen, fueron los fundadores del IFT, el teatro popular judío, en el barrio del Once.  Allí, Raymundo comenzó a entender la idea del arte como manifiesto de lo político. Militante del Partido Comunista, lo abandonó para sumarse al Partido Revolucionario de los Trabajadores, brazo político del Ejército Revolucionario del Pueblo.

En 1964 se inscribió en la carrera de cine en la Universidad Nacional de La Plata. Ese mismo año, con la filmación de “La Tierra Quema”, un documental sobre los campesinos del Nordeste de Brasil, comenzó a forjar su estilo de trabajo, su forma de entender el cine. Entre el registro de las actividades partidarias y  su filmografía artística con su impronta militante.

Fue también camarógrafo de los noticieros de Canal 7 y Canal 13 -en éste, junto a los debutantes  Mónica Cahen Danvers y Andrés Percivale- y de los primeros reporteros argentinos que filmó en las Islas Malvinas. En 1974, fue uno de los cuatro cámaras que registraron “Adiós Sui Generis”, la mítica despedida del dúo de rock argentino formado por Charly García y Nito Mestre.

En 1971, filmó “México, la revolución congelada”, donde aborda el inicio de la lucha campesina que lideraron Francisco Villa y Emiliano Zapata, en el inicio del siglo XX, y que concluyó con el surgimiento del PRI en la nación azteca. Para este proyecto consiguió permiso y apoyo para la filmación – con helicóptero personal y todo- del por entonces candidato a presidente Luis Echeverría, que estaba en campaña política.

Cuando éste asumió la presidencia, advirtió al estrenarse el filme que no era el elogio a la “revolución hecha institución” que esperaba, sino una feroz crítica a un ideal traicionado. Se enfureció y mediante su embajador en Buenos Aires exigió y consiguió que el gobierno argentino prohibiera el documental, que sólo duró un día en cartelera, en tanto en México su prohibición hizo que el filme recién se exhibiera en 2007. Ante su reclamo, en la embajada mejicana en Argentina, a Gleyzer le reconocieron “todo lo que se dice en la película es verídico y cierto. Lo que pasa es que hace que México se vea mal…”

II

La gran convulsión social que América latina vivía desde mediados de los ’60 con luchas obreras y campesinas, dio origen en la región al surgimiento de un movimiento cinematográfico que intentó retratarlas.

En Argentina, esa tendencia se expresó en dos corrientes: por un lado, el grupo Cine de Liberación, que proponía una visión desde el peronismo y que tuvo en “La Hora de Hornos”, de Fernando Pino Solanas y Octavio Getino, realizada en 1968, su obra más representativa. Por el otro, la iniciativa colectiva del Cine de la Base, de la cual Gleyzer fue uno de los fundadores, partía desde elaboraciones sustentadas en concepciones de la izquierda revolucionaria.

En 1973, Gleyzer materializa “Los Traidores”, acaso, la obra cumbre de su intensa trayectoria. La película narra la historia de Barrera, un sindicalista que pasa de defender los intereses de sus representados a transformarse en un ariete de la patronal. Para muchos, una parábola sobre José Ignacio Rucci. Sorprende el filme por su ritmo sostenido de narración, por el manejo de cámaras, para la época en que fue realizada; por entrar y salir de la ficción y el documental; con hallazgos para la época, como la escena donde Barrera sueña su propio entierro; y sobre todo porque la vigencia de su guión, nos hace dudar si fue escrito hace cuatro décadas o cuatro días atrás…

 

III

 

La tensión entre el contenido de sus obras y la situación política imperante en nuestro país durante la mayor parte de la década en la que Gleyzer produjo casi toda su filmografía (1964 a 1974) lo obligó a ingeniárselas por fuera del sistema para filmar, producir, escribir, elegir actores, buscar locaciones y también proyectar y difundir sus trabajos. En ese contexto produjo varios mediometrajes que daban cuenta de las luchas sociales como “Swift”, “Ni olvido ni perdón”, y la “Masacre de Trelew”, en la cual son entrevistados los líderes de Montoneros, FAR y ERP.

Muchas veces el grupo, proyectaba las películas en salas improvisadas de barrios obreros o fábricas, con un auto afuera preparado para cargar el pesado proyector y salir disparados en caso de que vinieran las fuerzas de seguridad. Tampoco le era fácil la realización. Como había una sola empresa que revelaba los celuloides en Argentina, el sólo hecho de llevarlos implicaba que las autoridades se enteraran de sus contenidos. Para eso Gleyzer había hecho amistad con unos pilotos de Aerolíneas Argentinas, que le llevaban las valijas de forma oculta a Nueva York en donde un empresario americano amigo se las revelaba y devolvía para el viaje de vuelta.

Las páginas del libro de su vida pasaban a un ritmo vertiginoso. El que imponían su impronta de rebeldía, la militancia y su pasión por filmar. Pero su prematura última hoja ya estaba a punto de ser arrancada. La actividad de Cine de la Base determinó que el grupo fuera puesto en la mira de la banda de asesinos parapoliciales, la Tripe A.

En 1976, ya en plena dictadura, Gleyzer viajó a Nueva York por motivos de trabajo. Tenía un contrato para la UNESCO por dos años para filmar documentales en Africa. Pero, aún sabiendo que estaba en la mira de los represores,  retornó a Argentina. El 27 de mayo de 1976, fue secuestrado y trasladado al centro clandestino de detención conocido como El Vesubio, en el que ya estaba también Haroldo Conti, y donde se lo vió por última vez.

Tras su desaparición, sus compañeros partieron al exilio para denunciar la situación de represión que se vivía en Argentina, y en 1979 filmaron desde Perú “La Triple A son las tres armas”.

IV

 

Y como una alegoría a su vida, la misma brutalidad de sus secuestradores y asesinos, es la que salva el legado artístico de Gleyzer. Tantos años corrido él y su obra para protejerla, la realidad le dicta a la ficción su último guión. En la audiencia realizada en agosto de 2010, por los crímenes de lesa humanidad cometidos en el centro clandestino de detención El Vesubio, su compañera Juana Sapire, declara: “A Raymundo lo secuestraron de su departamento en la calle Federico Lacroze. Se llevaron todo. Arrasaron. Hasta la cucharita de la azucarera se llevaron. Todo se afanaron.  Como eran incultos e ignorantes se robaron el televisor, pero la obra de Raymundo no la tocaron…”

V

Buenos Aires, junio de 1976: se los traga la tierra*

Raymundo Gleyzer ha desaparecido. La historia de siempre. Lo arrancaron de su casa, en Buenos Aires, y no se sabe más. Había hecho películas imperdonables.

Yo lo había visto por última vez en febrero. Fuimos a cenar con nuestros hijos, cerca del mar. En la trasnochada, me habló del padre.

La familia de Raymundo venía de un pueblecito de la frontera entre Polonia y Rusia. Allá cada casa tenía dos banderas diferentes para izar y dos retratos para colgar, según marchaban las cosas. Cuando se iban los soldados rusos, llegaban los polacos, y así. Era una zona de continua guerra, infinito invierno y hambre sin fin. Sobrevivían los duros y los pícaros, y en las casas se escondían los pedazos de pan bajo los tablones del piso.

La primera guerra mundial no fue novedad para nadie en aquella comarca sufrida, pero empeoró lo peor. Los que no morían empezaban el día con las piernas flojas y un nudo en el estómago.

En 1918, llegó a la región un cargamento de zapatos. La Sociedad de Damas de Beneficencia había enviado zapatos desde los Estados Unidos. Vinieron los hambrientos de todas las aldeas y disputaron los zapatos a dentelladas. Veían zapatos por primera vez. Nunca nadie había usado zapatos en aquellas comarcas. Los más fuertes se marchaban bailando de alegría con la caja de zapatos nuevos bajo el brazo.

El padre de Raymundo llegó a su casa, se desató los trapos que le envolvían los pies, abrió la caja y se probó el zapato izquierdo. El pie protestó, pero entró. El que no entró fue el pie derecho. Lo empujaban entre todos, pero no había caso. Entonces la madre advirtió que los dos zapatos tenían la punta torcida para el mismo lado. Él volvió corriendo al centro de distribución. Ya no quedaba nadie.

Y empezó la persecución del zapato derecho.

Durante meses caminó el padre de Raymundo, de aldea en aldea, averiguando.

Después de mucho andar y preguntar, encontró lo que buscaba. En un lejano pueblito, más allá de las colinas, estaba el hombre que calzaba el mismo número y que se había llevado los dos zapatos derechos. Los tenía, brillantes, sobre una repisa. Eran el único adorno de la casa.

El padre de Raymundo ofreció el zapato izquierdo.

-Ah, no -dijo el hombre-. Si los americanos los mandaron así, así debe ser. Ellos saben lo que hacen…

*Eduardo Galeano

“Soy Mónica Cid, la mamá de Micaela Ortega. A Mica la mataron por su condición de ser mujer. A Mica la mataron porque no se pudo defender. Hoy no es la marcha de Mica, es la marcha de todas. Y vamos a pedir que se haga justicia por todas esas mujeres que son víctimas. Víctimas de la mano de un hombre o de la mano de un ser aberrante. Me conmueve mucho ver a muchos hombres acá porque esta lucha tiene que ser de todos”.

La mujer abrió la histórica jornada del segundo #NiUnaMenos bahiense, parada en una tarima frente a la Municipalidad, con frente alta y puño apretado. Mica sonreía en su remera que anunciaba “otro ángel” en el cielo y el recuerdo eterno. Atrás, acompañaban familiares de Ivonne Gallardo, de Leticia Cayuli, de Kathy.

“Como saben, el caso de Katherine Moscoso todavía sigue impune, hace un año y once días que venimos luchando, mi familia y compañeros de Justicia por Kathy seguimos reclamando justicia y verdad. Seguimos viviendo con asesinos en Monte Hermoso, seguimos con impunidad. Siguen mujeres asesinadas. Las matan por ser mujer. Queremos justicia por Micaela. Por ella. Pero a diferencia de Mica, que sabemos quién es su asesino y tiene que pagar por lo que hizo, por Katherine todavía no. Hay mucha mugre bajo la alfombra de Monte Hermoso”, dijo la prima Wanda Banegas.

wanda monica efemedelacalleCuatro mil. Cinco mil. Siete mil. Diez mil. Más que el año pasado. Menos. Las que sean que entren en más de cuatro cuadras hasta las manos. Así fue el reclamo por “ni una muerta más” y contra la violencia machista en Bahía Blanca con la consigna “El Estado es responsable”.

Daniela Epuñan, leyó un comunicado de las Mujeres Originarias por el Buen Vivir: “Mari mari pu peñi, mari mari pu lamgen. Con la Conquista del Desierto las mujeres originarias pasamos una situación de esclavitud que a lo largo de la historia de este país se fue sosteniendo y perpetuando. Esa conquista significó la esclavitud física, sexual y doméstica de las mujeres. Estas violaciones sistemáticas fueron impulsadas por el sistema colonizador y mantenida por el Estado argentino. En la actualidad los pueblos originarios vivimos un genocidio por omisión ya que se intenta invisibilizar la realidad que vivimos hoy en las ciudades y zonas rurales”.

“Utilizamos el término feminicidio porque entendemos que es una planificación intrínsecamente vinculada con las corporaciones, los asesinatos no han terminado”, dijo. Y habló de sus cuerpos-territorio enfermados y asesinados por las corporaciones el extractivismo. De Diana Itatí Piñeiro, guaraní de 17, en Puerto Esperanza, Misiones. De Juana Gómez, qom de 15, que no volvió de un festival: “Fue abusada sexualmente y brutalmente asesinada, dos días después la encontraron semidesnuda colgada de un árbol. Fueron dos hombres que creyeron como tantos otros que pueden dominar por su género”.

ni una menos efemedelacalle 2Las organizaciones que realizaron la convocatoria local destacaron el aumento de los femicidios desde el primer #NiUnaMenos. “Muchos de ellos continúan impunes, como es el caso del crimen de Katherine Moscoso. Hace pocos días, se cumplió un año de su asesinato y la principal línea de investigación en este caso toca a allegados al ex intendente K de Monte Hermoso, Marcos Fernández. En Pehuén Co, desapareció Andrea Esnaola, quien prácticamente dejó de ser buscada. Luciana Moretti fue descuartizada e incinerada, sin embargo la justicia decidió darle a Cuchán, su femicida, la libertad”.

“Se cumple una semana desde que se encontró el cuerpo de Micaela Ortega. Los gobiernos municipal y provincial fracasaron estrepitosamente en encontrarla y demostraron permanentemente que intervinieron sobre la base de responsabilizar a la propia Mica y su entorno familiar, reproduciendo e instalando prejuicios aberrantes, incluso en declaraciones a través de los medios, lo cual explica las enormes irregularidades de todo el proceso de investigación”, opinaron.

furh aborto efemedelacalleEn el documento consensuado plantearon que “en todos estos hechos, confluyen todo tipo de violencias hacia las mujeres y las niñas: institucional, simbólica, mediática. Las trabas y las desviaciones del foco de atención hacia la culpabilización de las víctimas y su entorno son moneda corriente, y las legitiman los propios funcionarios públicos, los medios de comunicación, y la sociedad en general. Son muestra más que suficiente de este sistema patriarcal que se pone de manifiesto y continúa instalado como reproductor de un régimen social que está putrefacto”.

Explicaron que el Estado es responsable porque “cuando hablamos de femicidios, no se trata de un conflicto privado entre dos personas, ni tampoco de un crimen pasional, está basado en una desigualdad sistemática en la que el Estado tiene responsabilidades, no sólo para penalizar al femicida, sino fundamentalmente para evitar los femicidios”. Y es poco lo que se hace para cambiar esta realidad: por ejemplo, los fondos del Consejo Nacional de las Mujeres, responsable de implementar la ley de protección integral contra la violencia de género, representa “tan sólo el 0,0055 por ciento del total del presupuesto nacional, lo que equivale a 4,50 pesos por mujer para prevenir la violencia machista”. En la ciudad “el presupuesto otorgado a política de género es nulo”.

moretti efemedelacalleEl texto fue firmado por: Suteba, CEHUM, Colectiva Feminista, CTA, Kumelen Newen Mapu, Comunismo Revolucionario PMLM, Acciones Feministas, Socorristas en Red, Desbandadas, ATE, Mujeres Originarias por el Buen Vivir, Plenario de Trabajadoras-PO, Partido Solidario, Cardumen, Puño y Letra UNS, Artistas por la no Violencia, Watu Corriente Comunista, Colectivo Pueblo en Lucha, FM De la Calle, Pan y Rosas- PTS- Tesis XI, Subcomisión de Mujeres del Sindicato Químico y Petroquímico, Asociación Judicial Bonaerense, G83 en solidaridad + igualdad, Biocentro, CEIA avanza.

Las demandas: basta de violencia hacia las mujeres y de vaciamiento de políticas de protección a la mujer; por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito; basta de impunidad, que aparezcan con vida ya Andrea Esnaola, María Cash, Marita Verón y todas las mujeres víctimas de las redes de trata; por el respeto de la cosmovisión y filosofía de vida de los pueblos originarios; por los derechos de las mujeres trabajadoras. Basta de femicidios. “Ni una menos! Ni una muerta más… Nos queremos vivas!”.

El documento completo y galería de imágenes de FM De la Calle AQUÍ.

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(Por Alfredo Grande) Varias veces he insistido en la extrema disociación entre democracia y estado benefactor. O sea: el terrorismo de estado anula la democracia, aún la más superficial. Pero la democracia no anula todas las formas de estado terrorista. Creo que es necesario definir el concepto de Terror. León Rozitchner escribió mucho sobre como el terror construye subjetividad. He tomado mucho de sus ideas e intento amplificarlas en lo que he bautizado como “psicoanálisis implicado”.

Mi primer libro publicado por la Agencia de noticias Pelota de Trapo se llama: “Crónicas de Trapo desde el psicoanálisis implicado”. Lo he definido como un “analizador del fundamento represor de la cultura”. La cultura represora tiene su máxima expresión en el terrorismo de estado, pero tiene múltiples expresiones en las democracias superficiales. Desde la masacre de Budge hasta los tarifazos.

Sobran los ejemplos y no hay organismo de derechos humanos que no haya denunciado y combatido estas formas del fascismo camuflado. Democracia o dictadura es una fórmula encubridora. Puede haber democracia y dictadura. Después de todo, hasta un asesino serial puede ser tierno con su familia. Pero creo que los globos de la democracia han impactado demasiado como un bien en sí mismo. Es decir: a un dispositivo lo hemos clonado en un valor. Y la democracia no es un valor. No es el bien y mucho el menos malo. El posibilismo, la resignación, el minimalismo fundamentalista de los demócratas, los meritócratas, los burócratas, tiene como uno de sus orígenes la idealización del voto y la entelequia de la voluntad y el poder popular.

“En la cultura represora
siempre el remedio
es peor que la enfermedad.”
(Aforismo implicado A. G.)

Para ilustrar: desde la conadep, el juicio a las juntas, los juicios de lesa humanidad lo que está en el banquillo de los acusados son personas. O sea: conductas concretas tipificadas como delitos. Menos el de genocidio. Creo que la única excepción es un fallo no fallado del juez Rozanski. Lo que nunca se juzgó políticamente es a las fuerzas armadas para asesinar. Si los bancos salieron airosos de todas las crisis, las fuerzas armadas, como institución, también.

Se han abierto delivery del ejército, marina y aeronáutica. Gendarmería, policías municipales, barras bravas, las “batatas” del sindicalismo ocre, etc. El monopolio de la fuerza pública tiene muchas sucursales, pero la casa central sigue siendo el Estado Represor y Democrático. Como éramos pocos, parió la abuela fascista. El decreto 721/2016 publicado en el boletín oficial por el gobierno nacional deroga el decreto 436/84 firmado por el ex presidente Raúl Alfonsín que determinaba un control civil sobre las Fuerzas Armadas para la democracia. Control relativo pero control.

Gradualmente, o de golpe, las fuerzas armadas volverán a ser el brutal ejército de ocupación que, desde Roca al menos, siempre fueron. Y serán. Pronto le pedirán perdón por los juicios de lesa humanidad. Y habrá una estatua a Videla. Ya empezó Prat Gay pidiendo perdón por el sufrimiento de los capitales españoles. No sabía que los capitales sufren. Ese perdón es una forma nada larvada de traición a nuestra patria. Es el mismo espíritu que ordenó amputar nada menos que nuestro himno nacional.

Para mayor penuria, el abrazo de Hebe de Bonafini con el General Milani anticiparon estos males. Hebe, la gran luchadora contra la dictadura militar, indultó a las Fuerzas Armadas al abrazarse con su jefe mayor. La agrupación HIJOS de La Plata fue duramente cuestionada al quemar dos muñecos que simbolizaban ese abrazo siniestro. Hasta remover esa yerba mala de nuestra democracia, mucha sangre será nuevamente derramada. Ya lo está siendo porque desocupación, tarifazos, inflación, amenazas laborales, es anticipar la muerte. Es la muerte en vida. Mantengo una profunda convicción: a las fuerzas armadas el pueblo no las abraza.

Desde la Colectiva Feminista de Bahía Blanca convocaron a “encontrarnos para gritar y denunciar que no queremos Ni Una Menos”. Desde las 16:30 sonarán en la Plaza Rivadavia las cuerdas de candombe llamando a la movilización que comenzará a las 17.

“Un año pasó de la histórica jornada del 3 de Junio de 2015, donde centenares de miles, en todo el país, expresamos en las calles el grito profundo de #NiUnaMenos. Sin embargo los casos de femicidios no cesan y por el contrario, aumentan. En todos estos hechos, confluyen todo tipo de violencias hacia las mujeres y las niñas: institucional, simbólica, mediática. Las trabas y las desviaciones del foco de atención hacia la culpabilización de las víctimas y su entorno son moneda corriente, y las legitiman los propios funcionarios públicos, los medios de comunicación, y la sociedad en general”, aseguraron desde la Colectiva.

Agregaron que “son muestra más que suficiente de este sistema patriarcal que se pone de manifiesto y continúa instalado como reproductor de un régimen social que está putrefacto. El Estado tiene responsabilidades fundamentalmente para evitar la situación en la que miles de mujeres nos encontramos hoy; aún seguimos esperando que las promesas se materialicen”.

Por todo esto volvemos a decir:
Basta de violencia hacia las mujeres
Basta de vaciamiento de políticas de protección a la mujer
Por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito
Basta de impunidad! Que aparezcan con vida ya Andrea Esnaola, Maria Cash, Marita Verón y todas las mujeres víctimas de las redes de trata
Por el respeto de la cosmovisión y filosofía de vida de los pueblos originarios
Bastaa de feminicidios
Por los derechos de las mujeres trabajadoras
EL ESTADO ES RESPONSABLE
NI UNA MENOS, NI UNA MUERTA MAS, VIVAS NOS QUEREMOS

niunamenos

(Por Francisco Tavaglione) La violencia de género es la cosa más instituida y quizá una de las más arraigadas y antiguas de nuestra cultura. Ya en la biblia, en la que todavía se basan muchos valores actuales, la mujer es concebida como inferior al varón, condenada por haber comido de la manzana a parir con dolor y a someterse al hombre (Genesis. 3; 16-17), y a él, por haberla escuchado a ella, lo condena a tantos sufrimientos más.

El paso del tiempo conoció a muchas revolucionarias, pero casi todas las obras de aquellas libertadoras fueron absorbidas por el contexto, tras lo que sus grandes cambios, fueron asimilados por la moral, el machismo y las “buenas costumbres” patriarcales  (no todas, claro está, y por suerte).

En consecuencia, entre diez mil y dos mil años después de que empezara a forjarse nuestra cultura, la mujer sigue ocupando un mismo lugar en la estructura social, a pesar de todas las luchas y los movimientos que hombres y mujeres ponemos en acción para cambiar esta situación. Aunque hoy la sociedad (aparentemente) intenta tomar conciencia de la injusticia en que tuvo relegada a la mujer, sin embargo el resabio sigue presente en nuestra cultura, y se deja ver en todas las opiniones de aquellos que justifican un feminicidio, en base a las actividades o los gustos de la víctima. Sigue presente en los medios de comunicación, en todos aquellos periodistas aberrantes y blasfemos que ante un asesinato, preguntan a los familiares si tenía novio, si aquel día se había ido enojada, o si se drogaba.

Ante esta situación, me llama muchísimo la atención dos cosas.

En primer lugar, el hecho de que se le dé más importancia, y más vuelta, y más trascendencia, a cómo iba vestida, qué costumbres tenía, de dónde y hacia dónde iba, etc., que el hecho mismo de que la hayan secuestrado, violado y torturado. Es como si la sociedad dijera: que la maten no es lo curioso, eso pasó siempre, lo curioso es lo que ella estaba haciendo antes –para que- la maten.

Eso da asco, y asco deberían sentir los periodistas, y los medios de comunicación que transmiten esos valores, porque todos lo sabemos, la pantalla genera cultura, y los valores que transmiten son, precisamente, los mismos que respiramos hace diez mil años con respecto a la mujer. En este sentido, los medios se oponen a una evolución, a un cambio de perspectiva, perpetuando los valores de antaño que casi nadie se hace cargo de todavía sostener.

En segundo lugar me llama la atención que la prensa, sabiéndose que es una industria de opinión, costumbres, tendencias y cultura, sin embargo siga transmitiendo los feminicidios como si se tratara de un apasionante e intrigante caso de Sherlock Holmes o su maestro Dupín. Periodistas ávidos por resolver el misterio, aparentan estar investigando a fondo el caso; reconstruyen con imágenes y escenas virtuales la escena del crimen, y de ser posible lo relacionan con asesinatos anteriores que en su momento despertaron la atención de la gente –entiéndase: dieron rating-. Entonces, ¿cómo puede ser, que sabiendo que la prensa produce tendencias, sigan profesando con tanto gusto, con tanto agrado, un asesinato, un secuestro, una violación?  ¿No constituye el machacar y machacar un feminicidio, una legitimación del crimen? No es la noticia en sí lo que legitima el feminicidio, es el modo en que lo hacen, siempre igual, siempre dándole importancia a los mismos puntos: tras un asesinato, se busca una responsabilidad en la víctima. Si todos aceptamos la corrupción y esta circula en la tele con mayor comodidad que la justicia –y esto no es casualidad: es, precisamente, una movida política para legitimar la corrupción-, ¿por qué no sucedería lo mismo con los feminicidios? Si los suicidios no se transmiten porque genera “imitación”, ¿cómo es posible que no rija la misma prohibición para los feminicidios?

Implícitamente la televisión nos pone en contra de la mujer. Nos dice que la mataron, pero lleva nuestra atención a otro hecho, al hecho de que algo de responsabilidad debe haber tenido para que la maten, o la violen, y si en ella no se encuentra responsabilidad, entonces algún familiar o amigo, o las drogas. La televisión legitima una y otra vez el feminicidio, y solamente nos hace prestarle atención a cuestiones que no tienen nada que ver con el tema, un tema tan amplio como su historia: el machismo.

Nos va a costar muchísimo más trabajo, y más tiempo, y más víctimas, cambiar nuestra perspectiva si no somos conscientes de la información y la prensa que consumimos, que nos forma la opinión y, lo que es peor, educa a nuestros chicos.

La sociedad no puede seguir presumiendo que evolucionó en un tema tan sensible, si ante la aparición de un cuerpo ultrajado y sin vida, se sigue preguntando por qué había ido a comer un helado antes de que la maten.

(Imagen realizada por Francisco Tavaglione)

La responsabilidad de funcionarios municipales, medios de comunicación e integrantes de las fuerzas de seguridad y el Poder Judicial en el femicidio de Micaela Ortega (12) fue motivo de manifestaciones en la sesión del Concejo Deliberante de este jueves. Hoy a las 17 en Plaza Rivadavia se realizará la movilización por #NiUnaMenos.

Desde Integración Ciudadana, Miriam Iantosca dijo: “Ya va a volver. Es una travesura. Se fue por sus propios medios. Mientras que pasaban los días fueron las palabras que escuchó su familia, su madre, cuando se encontró con funcionarios que no le creyeron. Y eso es lo que manifestó su madre cuando nos visitó aquí en el Concejo. Fue la culpa de Micaela que aumentaron los robos en la ciudad. Fue la culpa de la familia. ¿Fue la culpa de la escuela? ¿Fue la culpa de las redes sociales? ¿Lo que usaba o dejaba de usar? Cuántos dichos, por favor. Cuántas frases y actitudes machistas. Violación de la privacidad de la familia y de los derechos humanos de la menor”.

“También se escuchó: es difícil buscar a alguien que no quiere ser encontrado. Lo dijo la persona encargada y responsable de la seguridad de la ciudad. Aunque gracias a dios esas palabras no desalentaron el esfuerzo de muchos que siguieron buscándola, investigando y acompañándola. Y quiero creer que no es verdad que se mostraron y divulgaron algunas de las comunicaciones de la menor. Cuánto para revisar que tenemos”, concluyó.

“El femicidio constituye un fenómeno global que ha alcanzado proporciones alarmantes en el mundo, sus víctimas son mujeres en diversa etapa de desarrollo, condiciones y situaciones de vida”, leyó la concejala del Frente para la Victoria Paola Ariente. “Los Estados deben contar con sistemas de justicia adecuados que aseguren a las mujeres víctimas de la violencia el acceso a los mecanismos de justicia penal y restaurativa. Investigar y analizar una muerte violenta desde la perspectiva de género permite evitar juicios de valor sobre las conductas o el comportamiento anterior de la víctima y romper con la carga cultural  y social que responsabiliza a la víctima de lo que pasó”.

“Las personas intervinientes en las diferentes etapas de la investigación deben prestar atención a los prejuicios obvios acerca de los roles que supuestamente deben cumplir las mujeres y las niñas en las sociedades, ya que por su aparente carácter incuestionable no suele ser evidente ni para la justicia ni para la sociedad. Por eso, y en vísperas de una marcha, es que necesitamos que se haga cada vez más fuerte y más colectivo el grito de ‘ni una menos'”.

La concejala de Compromiso Bahía, Vanina González, manifestó que “Bahía está de duelo” y que la sociedad tiene que replantearse lo que se hizo. “Micaela marcó un antes y un después en Bahía Blanca, necesitamos un trabajo conjunto, pero un trabajo serio y comprometido para prevenir estos casos. (…) Puede ser uno de nuestros hijos, tenemos que cambiar la mentalidad, no se trata de juzgar a un adolescente, no se trata de detenerse a ver cómo se vestía o en las fotos que se sacaba”.

Martín Salaberry (FULT) recordó que “se escuchó por los medios plantear que en virtud de la carta que había dejado Micaela podría haber sido una travesura de una persona menor y que podría haber regresado al otro día” y afirmó que “el Estado no puede dudar cuando hay una persona que es desaparecida”.

“Hay que ir más a fondo y encontrar los responsables desde el Estado de esta salida transitoria que fue violentada, que venía desde el año 2014 en la provincia de Río Negro, de una persona a la cual se le da la salida transitoria pero que nunca vuelve al lugar donde debió haber estado que es la unidad penitenciaria de Gral. Roca”, dijo.

“Este es un momento de silencio y acompañamiento a los padres, familiares y amigos, entendemos que de acá a un tiempo se tendrán que hacer los análisis y evaluaciones correspondientes, seguramente el señor intendente cite al Consejo de Seguridad para realizarlos”, expresó Sergio Massarella (FpV).

La oficialista Soledad Martínez opinó que “no podemos permitir como sociedad más femicidios y violencia de género en todas sus formas, la expresión ‘ni una menos’ nos compromete a pensar y abogar por una sociedad más justa, debemos construir un mundo basado en la igualdad de derechos y oportunidades”.

En línea con la lucha contra los “enemigos” que integran “grupos perfectamente organizados que no tienen patria ni bandera, pero que sí quieren subvertir valores y adueñarse fundamentalmente de nuestros ideales y de nuestra juventud”, declarada por el intendente Héctor Gay en su arenga del 25 de mayo, el municipio convocó a un espía del servicio de inteligencia de la dictadura como jurado de un concurso fotográfico.

Se trata del ex “agente de reunión” del Destacamento de Inteligencia 181 del Ejército, Gustavo Jorge Lobos, quien “debido a su trayectoria y prestigio”, brindó “su colaboración de manera gratuita” en la iniciativa “Retratando mi ciudad“, avalada por el Instituto Cultural a cargo de Ricardo Margo. El funcionario ya le había abierto las puertas del palacio comunal para que el ex espía organizara la muestra “30 años 30 fotos”, una retrospectiva de su maestro Pedro Luis Raota.

El Destacamento de Inteligencia, en el marco de la “lucha contra la subversión“, reglamentariamente realizaba tareas de reunión de información, contrainteligencia, sabotaje, subversión, y actividades psicológicas secretas respondiendo órdenes del Departamento II Inteligencia del Comando del V Cuerpo de Ejército. Varios de los jefes del ex fotógrafo de La Nueva Provincia fueron condenados a prisión perpetua por su participación en crímenes de lesa humanidad.

La pertenencia de Lobos al sistema central del genocidio quedó en evidencia con la publicación de la “Nómina del Personal Civil de Inteligencia que revistó en el período 1976/1983” publicada por el Archivo Nacional de la Memoria en 2010. El docente de la diplomatura de Arte Fotográfico de la Universidad Salesiana compartía el prontuario con los ex Triple A Miguel Ángel y Héctor Oscar Chisu, el ex presidente de la Cámara Federal de Apelaciones Néstor Luis Montezanti, el todavía juez de faltas Ricardo Antonio Germani y el “periodista” del diario de Vicente Massot, Jorge Soldini.

lobos muni efemedelacalleRespecto a la existencia de civiles de Inteligencia en el staff de La Nueva Provincia, el fiscal Miguel Ángel Palazzani dijo meses atrás a FM De la Calle que “es simbólico por lo que significa un fotógrafo como PCI, la posibilidad que da ese disfraz de trabajador de prensa pero cumpliendo otro rol claramente criminal porque estaba colaborando con el secuestro y las muertes posteriores”. La investigación de la Unidad Fiscal de Lesa Humanidad probó que LNP y los servicios de inteligencia de las fuerzas armadas mantenían “una relación fluida y justamente hacían operación psicológica e inteligencia, incluso más, los reglamentos marcan esa relación”.

“Dice que el oficial de inteligencia y el oficial de operaciones psicológicas forman un equipo. Y que por momentos incluso en la sala de torturas, para dejar los eufemismos de lado, el oficial de inteligencia requerirá de la acción psicológica para que le indique qué interrogar. Porque el que hizo acción psicológica sabe en otro plano dónde estaba situada la víctima, en qué lugar -la universidad, el gremio, el barrio, la parroquia- las personas de acción psicológica tenían por lo menos que abastecer a la inteligencia de ese tipo de información para saber qué preguntar”, explicó Palazzani.

El verdadero corazón del plan de exterminio fue el Batallón 601 ubicado en la esquina porteña de Callao y Viamonte. Como señaló el abogado y ex preso político Jorge Pedraza, de “la totalidad del Personal Civil de Inteligencia que revistaba en el organismo, unos 800 lo hacían como Agentes de Reunión (como Lobos o Germani) y Agentes de Producción, que eran quienes se infiltraban en sindicatos, universidades, y organizaciones políticas y sociales para recabar información (buchones)”.

“Los encargados de analizar y clasificar estos informes eran los Agentes de Apoyo y Procesamiento, 475 en total, repartidos en distintas especialidades: agentes, asesores generales, asesores informáticos y asesores universitarios (como Montezanti). Estos últimos eran en su mayoría docentes que monitoreaban los contenidos académicos en busca de posibles ‘mensajes subversivos’ camuflados. Se los consultaba además sobre las distintas actividades estudiantiles que se desarrollaban en sus universidades.

“La información clasificada era la base sobre la cual se definían los ‘blancos’ para los Grupos de Tareas. Por último estaban los Agentes de Seguridad, el grupo más numeroso con alrededor de 900 hombres, que podían ser eventualmente utilizados en los operativos”.

“Nuestra idea era plasmar en fotografías cómo los jóvenes ven los distintos paisajes urbanos y naturales de la ciudad. Próximamente vamos a repetir el concurso”, dijo la directora de Juventud pro, Florencia Bustelo. Tiempo de “argentinos que queremos restaurar valores”, “argentinos de bien”, diría el intendente.

No sean tibios. Digan whisky!

lobos

(Por Helen Turpaud Barnes) Hagamos por un momento un ejercicio mental. Pensá en todas las veces que –si te identificás como mujer- un varón “te tiró onda” y vos lo rechazaste, o bien en las veces que decidiste cortar con un hombre, o cuando pretendiste sentar posición sobre cómo y cuándo tener relaciones sexuales o no con un hombre.
O pensá en las veces en que le cuestionaste a un familiar o compañero de trabajo un comentario machista o le tuviste que poner los puntos por ocupar tu espacio personal a un varón en un transporte o la cola del supermercado. Pensá en todas las veces en que te enfrentaste a ALGO que dijera un varón sobre las mujeres. Recordá si se puso a pensar y te reconoció algo de razón. O si no hizo nada de eso. Pensá en cómo reaccionó, recordá si se empezó a reír de vos, si te insultó, si dijo que él sí estaba a favor de la igualdad entre varones y mujeres (mientras desautorizaba tu palabra como mujer). Recordá si te empezó a sobrar, si buscó una carcajada cómplice entre sus amigos, si te “ensució” en las redes sociales, si te la siguió, si se hizo el que no entendía, si te hostigó, si se victimizó, si te siguió camino a tu casa, si te mandó al frente, si siempre hace chistes sobre vos aun cuando sigas siendo su amiga, novia, hermana o colega. Recordá si se enojó, si te pasó factura, si te tiró el cuerpo encima, si te golpeó, si se hizo el ofendido o el resentido de ahí en más por toda la eternidad, si te castigó con el silencio, si se muestra siempre incómodo con vos, si dice que sos una amargada. O si simplemente siguió tratándote como siempre o incluso empezó a plantearse su lugar como varón.
Todas las personas tenemos una cuota de narcisismo, no siempre aceptamos tranquilamente cuando nos dicen que no a algo. Pero hay subjetividades en que esta cuota de narcisismo se fomenta con creces. La subjetividad masculina es particularmente sensible a que se le diga que no. En cambio, a las subjetividades femeninas se nos forma en el desapego, la abnegación, la renuncia, la culpa por no satisfacer al otrO. AMBAS subjetividades son un problema y deben ser puestas en cuestión.
A partir del descubrimiento del cuerpo de Micaela Ortega el pasado fin de semana cientas de personas salieron a la calle en Bahía Blanca. Sin tener aún demasiados datos, aparentemente una de las “razones” aducidas por el femicida confeso para asesinar a la niña fue que esta no habría querido “tener relaciones sexuales” con él. Las reacciones de la opinión pública repiten a menudo un mismo patrón: la tendencia a llamar al femicida “monstruo”, “enfermo”, “inhumano”. El femicida es nombrado desde la subjetividad “indignada” en términos que lo destierran del terreno de lo humano. El femicida para muchos/as excede los límites de lo comprensible en nuestra sociedad, aparentemente tan ajena a su existencia.
Cuando a principios de 2007 una compañera feminista me dijo “el violador no es un enfermo, sabe muy bien lo que hace” me sonó casi a justificación de la violencia machista. Yo frente a esos hechos en cambio me “escandalizaba”. El escándalo es la reacción de la pretendida supremacía moral: me “horrorizo” ante lo que es demasiado malo para mí, que soy buena, que no tengo ninguna responsabilidad en lo que pasa.
Sin embargo, esa compañera feminista tenía razón, y ahora me toca intentar explicar eso que en su momento me pareció increíble: el violador, el femicida, el golpeador, no son enfermos, no son monstruos, no son inhumanos. Son más bien SANOS HIJOS DEL PATRIARCADO: son los elegidos por la sociedad patriarcal para ejercer el terrorismo machista que “hace falta” para controlar a las mujeres. Los femicidas son simplemente las fuerzas armadas de un sistema que intenta en primer lugar doblegar a las mujeres “por las buenas”, pero que cada dos por tres debe hacer un despliegue de poder asesino para “mostrar quién manda” (cada vez más seguido, porque se está notando que ya no nos creemos las “buenas” intenciones de los “protectores”, los “caballeros”, los “proveedores”, los “progres que se unen a la causa” solo en la superficie). El femicidio es simplemente un modo más de la pedagogía machista.
Y no es que todo femicida sea consciente de su rol “pedagógico”. Pero si hoy te da terror lo que le pueda pasar a tu hija o amiga o alumna, es porque el mensaje del femicida llegó. Un método educativo de una eficacia envidiable. Por eso hay que luchar por otro mensaje. El mensaje de la rebeldía, la justicia, la autonomía de niñas y mujeres.
Un femicida no “nace” así: es un producto social. No es un enfermo. Son muy pocos los casos en que coincide la conducta femicida con la patología mental. La antropóloga argentina Rita Segato hizo un trabajo de investigación con agresores sexuales de una población carcelaria brasileña. (El trabajo se titula “La estructura de género y el mandato de violación” y se encuentra en el libro Las estructuras elementales de la violencia.) Su estudio apuntaba a verificar si había alguna condición patológica común a los abusadores sexuales, fueran o no además femicidas. El resultado fue negativo. Sin embargo, encontró con que sí había otro elemento en común: la concepción sobre las mujeres que tenían. En todos los casos, los violadores pensaban que las mujeres eran sujetos que ellos tenían derecho a considerar de su propiedad, que debían someterse a sus designios, y que debían “castigar” si no lo hacían. Y, oh, casualidad, esta es una concepción extendida en la gran mayoría de la población sin solución de continuidad entre el o la machista que conocemos de todos los días y el femicida (quizás conozcamos a ambos). Y el cuerpo femicida por excelencia es el cuerpo del varón: la gran mayoría de las mujeres asesinadas mueren a manos de varones, lo mismo que la gran mayoría de los hombres asesinados.
El femicida (así como el violador) es un sujeto profundamente moral. Digo esto en el sentido de que su función social es la de “enseñar”, “disciplinar” y “servir de ejemplo” para las demás mujeres, para que “aprendan” a vestirse “modestamente”, para que la única capacidad en el planeta que reconozcan sea la fuerza física (así ellas se olvidan de todas sus propias capacidades), para que subordinen su sexualidad a la del macho.
¿Y cómo “se hace” un femicida? Un femicida “se hace” gracias a muchas instituciones que hoy siguen sin ser mayormente cuestionadas. La familia les enseña a los varones que estos deben creerse fuertes, campeones, importantes, racionales, invulnerables, “ganadores”. La familia machista educa “machos” (descarados o camuflados), no varones de masculinidades deconstruidas. La escuela reproduce esto. Las/los docentes hablan de los cuerpos de las chicas en los colegios como algo que deben “patrullar” porque “ya sabemos lo que pasa”. Un sobreentendido que ubica a las/los docentes misóginas/os en el lugar del “sentido común”: se autoadscriben un saber ancestral de lo “inevitable” que ¡quiénes somos las docentes feministas para venir a cuestionar! Y si la escuela no logra “disciplinar” a las chicas que desean libertad, ya vendrá un violador o un femicida a disciplinarla para que los sectores educativos conservadores tengan el secreto placer de poder decir “¿viste?, no justifico, pero así terminan” y recordárselo pedagógicamente a las chicas cada vez que renuevan un código de vestimenta sexista por enésima vez. Una teleología escolar machista.
Los medios de comunicación, lo sabemos, refuerzan todo esto sin dudar: hipersexualización de las niñas, exposición de los cuerpos de las mujeres como adorno u objeto a comentar, ridiculización o farandulización de las trans, etc. El hallazgo del cuerpo de Micaela antecede amargamente por pocos días al momento en que Tinelli vuelve con su programa a la televisión argentina.
Un femicida no viene de Saturno ni es un niño feral: aprende lo mismo que el resto de los seres humanos. Pero tiene una misión un poco más arriesgada: matar niñas y mujeres de vez en cuando. Hacen el trabajo sucio que resulta “lamentable” pero aleccionador para la misoginia social que ostenta la gran mayoría de la gente. Son los señores de “seguridad” que llaman en un casino cuando las mujeres ya no queremos hacerle caso al circunspecto mafioso de guantes blancos quien a veces hasta nos “trata bien”. Los femicidas cumplen una función sagrada frente a nosotras las brujas profanas: son los verdugos de una Inquisición de machos que nos dice que nos quiere “proteger” del mal (que son ellos mismos). Y para la “disciplina cotidiana” ya están el resto de los varones y mujeres machistas de todos los días.
Entonces, ¿recordaste la reacción de los varones a quienes rechazaste, cuestionaste o remplazaste en algo? ¿Conocés las risotadas, los chistes, los silencios, las calumnias, el hostigamiento, la invisibilización, el resentimiento o los golpes de quienes se “ofendieron”? ¿Ya conocés sus “castigos”? Y por otra parte, ¿conocés a los que NO reaccionan así, a quienes se cuestionan sus privilegios, a quienes no vienen a explicarte cómo es el mundo, a quienes saben que NO ES NO? Bueno, ya sabés entre quiénes “se forman” los femicidas. El femicida se parece mucho a tu patrón cuando te subestima por ser mujer, al tío que hace chistes machistas en los asados, al que jamás acepta que una mujer “le” haga el asado, al que acosa a una alumna, al que se siente humillado si su esposa maneja y él va al lado, al operario que le dice a una mujer que algo mecánico es “peligroso” solo para asustarla y divertirse con su susto, al señor mayor que invade tu espacio personal en el colectivo. Las mujeres también tienen estas ideas, ya lo sabemos. Pero los cuerpos que matan son los de las masculinidades hegemónicas, no los de las mujeres, y hasta la mujer más machista puede ser víctima de un femicida: acordate. Y no hace falta decir “no todos los hombres”. Quienes no sean ese “todos” están ocupados cuestionando sus privilegios, sumándose a la lucha feminista.
El femicida es, simplemente, un machista común y corriente que un día mató. No me agrada usar metáforas médicas para describir realidades sociales, pero si hay alguna enfermedad en el femicida esa enfermedad se llama machismo. Casi todo el mundo tiene gripe, pero en algunos casos se vuelve mortal, no son dos enfermedades diferentes. Lo mismo con el machismo.
Por Micaela Ortega, por todas. Por las que están, por las que no están. El 3 de junio volvemos a la calle. Por justicia y por otro NI UNA MENOS.

Este fin de semana se estrenó la obra Criollos. “La idea surgió a partir del hallazgo de un parte policial del año 1909 donde una mujer va a denunciar a su marido por haberse escapado con la hija menor y haber dejado embarazada a la hija mayor”, dijo a FM De la Calle el actor, docente y director, Jorge Nayach, quién formuló la idea y adaptación.

“En el parte está la resolución que tomó el comisario. En el parte está la denuncia y el resuelve: toma la decisión de dejar las cosas como están. Manda las actuaciones a su jefe y el jefe aprueba”.

Utilizaron el contenido del texto como texto de la obra. “Lo rico de la propuesta de Jorge era poder volver a los tiempos de antaño en que se habla y escribía así”, contó el actor Marcelo Koth, quien interpreta al comisario. “Lo que denuncia el acta encierra violencia de género, engaño, poligamia, muchas cosas”.

Desde el punto de vista del trabajo interpretativo, realizaron un trabajo de investigación acerca de las prácticas de la época. A su vez, proponen una mirada sobre la gauchesca y utilizan el humor como recursos expresivos.

Nayach explicó que quisieron recuperar “estas reuniones que se daban en los fogones, donde aparecían las historias. Surgió un recuerdo que tengo muy fuerte del Pato Spaltro y Alberto D’Amico, dos grandes actores de Bahía: en todas las reuniones aparecían con cuentos de Wimpi. Estos cuentos que muestran a estos paisanos medio bolaceros, muy creativos. Ahí cerró todo para combinarlo con lo del comisario, tomando alguno de los cuentos”.

La obra puede verse este domingo a las 20 en la sala ATS (Garibaldi 310) y allí continuará en cartel antes de realizar una gira por la zona.

La abogada de la familia de Micaela Ortega, Fernanda Petersen, dijo a FM De la Calle que trabajan en la reconstrucción de los hechos ocurrido el 23 de abril para “saber qué es exactamente lo que pasó y poder acreditar la totalidad de los agravantes que se le han imputado a (Jonathan) Luna el día que se negó a declarar, que es el homicidio agravado criminis causa”.

“Esto es: que mató a la víctima para ocultar otro delito agravado por alevosía y por violencia de género, es decir, por femicidio. Creemos que el móvil de Luna era el abuso sexual y ante la imposibilidad de llevarlo adelante mató a Micaela y luego, como última alternativa, robó alguna de sus pertenencias”.

El martes la madre y el padre de Micaela se reunieron con la dra. Rodríguez, secretaria de la Fiscalía, quien los acompañó y contuvo desde lo personal durante la búsqueda. “La investigación obviamente que tiene fallas porque si no no se hubiera llegado a este desenlace, no me refiero solamente a la muerte de la nena, sino que se podría haber dado con ella antes y se hubiera evitado este calvario de 35 días de búsqueda donde no solamente la familia sino toda la sociedad estaba involucrada”.

“No podemos ser tan ingenuos de pensar que no va a haber más casos como el de Micaela en Bahía Banca o en la zona y las fuerzas de seguridad no están capacitadas para investigar un hecho por fuera de lo que se denomina inseguridad o un robo común o un robo simple. Lo toman en principio como una cuestión intrafamiliar, que es una discusión”, comentó Petersen y agregó que “lo primero que se hace es victimizar a la víctima olvidando el rol que tiene dentro de la investigación que es esto, el de víctima. Probablemente el desenlace lo demuestre pero, mientras tanto, se van investigando y se van poniendo en tela de juicio actitudes o características de la personalidad y eso influye en la mirada que se le da desde lo judicial y desde lo político a la investigación”.

La abogada destacó que “la realidad es que en esto se demuestra que el Estado es responsable. Es responsable por la falta de asignación de recursos, porque no supervisa y porque cuando hay que dirigir una investigación en la cual lo que se investiga es la posible muerte de una mujer, el cometimiento de un femicidio, todavía no estamos a la altura de tener una investigación con perspectiva de género y de comprender realmente cuál es la problemática que se está atravesando”.

En cuanto a la estigmatización de Micaela, Petersen opinó que “determinados medios de comunicación lo pusieron como tema fundamental, que tenía determinada cantidad de perfiles de Facebook, cómo se vestía, si era o no adecuado su comportamiento para su edad. Desde el poder político local también, desde el momento en que el intendente dice que Micaela era la responsable por su búsqueda de que hubiera hechos de inseguridad en la ciudad -el secretario de Seguridad es responsable de esta situación- demuestra que se minimiza la búsqueda cuando se trata de una niña y más si se trata de una niña que no pertenece a determinada clase social o a determinadas familias o casta bahiense”.

“Todo lo que dijo la madre desde el primer momento, que Micaela había sido captada por las redes sociales, que había sido víctima de esto, el sábado a la noche quedó acreditado y todo lo que desde el poder político y desde determinados medios de comunicación se decía, una vez más lo que muestra es el prejuicio y el desconocimiento de la problemática que atañe a todas las mujeres y que no es casualidad que estemos de vuelta frente a la movilización del 3 de junio del #NiUnaMenos”, dijo.

Sobre la situación de la concubina de Luna, María Espinosa, la abogado aseguró que “podría haber tenido otro tipo de actitud” para colaborar con la investigación y por eso analizarán “las posibilidades de futuras imputaciones”. Por otra parte, adelantó que pedirán el juicio político al juez de Ejecución Penal Pablo Chirinos, quien autorizó la salida transitoria del acusado que posibilitó su fuga, porque “tal vez si esta persona no hubiera estado en libertad, Micaela hoy estaba con vida”.

(Por Francisco J Cantamutto) Se trataría el día de hoy en Diputados el proyecto de ley ómnibus del gobierno, mezclando un reclamo justo con una gigantesca estafa.

Cambiemos vuelve a mostrar que sabe hacer política, que no son unos improvisados. Recuperando la iniciativa, enviaron un proyecto de ley ómnibus que mezcla temas y problemas, opacando el debate y manejando la agenda de debate. Este punto es central, pues de esta forma oblitera el veto a la ley anti-despidos, del que nos separa menos de una semana. Modificando la agenda a altas velocidades, dificulta la constitución de una agenda sostenida que, en el debate, mostraría sus claros sesgos de clase.

El proyecto de ley busca tratar a un mismo tiempo varios asuntos diferentes, sintéticamente reunidos entre la Amnistía Fiscal y el Programa Nacional de Reparación Histórica para Jubilados y Pensionados. Al enredar un nuevo blanqueo de capitales con aumentos en haberes jubilatorios, genera falsas impresiones para lo que en rigor es una nueva estafa.

La ley de blanqueo

El estallido de los Papeles de Panamá ha puesto en el centro de atención las prácticas fraudulentas del capital, que se aprovecha de legislaciones laxas para evadir impuestos y regulaciones. Esto incluye el lavado de dinero de actividades ilícitas, como narcotráfico o trata de personas. Este escándalo involucra de lleno al presidente Mauricio Macri, del que se han detectado al menos 3 cuentas offshore no declaradas. Esto incluye a la ahora famosa Fled Trading, que el presidente no declaró, luego negó que haya tenido actividad, y ahora se supo que desarrolló el millonario negocio de Pago Fácil en Brasil. Macri además incorporó en su última declaración jurada, una cuenta en Bahamas –otra cueva fiscal- por 18 millones de dólares, que ofreció repatriar porque, según parece, tras medio año de su propio gobierno, empieza a confiar en sí mismo.

Resulta difícil de creer que gobiernos asociados a los propios capitalistas que practican estas maniobras vayan a alterar sustancialmente el mecanismo, pero sí pueden tomar algunas medidas que calmen al público indignado. Ha llegado la hora de una nueva ronda de lavado. La Ley de blanqueo de capitales, llamada de manera irónica Amnistía Fiscal, se propone habilitar el ingreso de dinero a la economía formal sin investigar ni preguntar nada por su origen. Se calcula que habría entre 270.000 y 440.000 millones de dólares fugados del sistema económico, disponibles para ingresar al blanqueo. Este dinero puede estar en cuentas o colocaciones en el exterior, pero también en cajas de seguridad dentro del país. Por presión del pan-radicalismo, la tratativa en el Congreso quitó la posibilidad de ingresar al blanqueo a funcionarios públicos con cargos activos en los últimos 5 años.

Como en cada ocasión que esto ocurre, el gobierno afirma que este será el último canje, y que al dar garantías –certidumbre- al capital será un éxito. En esto, no se distingue de los 9 blanqueos que hizo el kirchnerismo desde mediados de 2013, mediante los cuales habría logrado captar unos 2.370 millones de dólares colocados en títulos públicos (Cedin y Baade). Cambiemos es más ambicioso y busca captar casi diez veces esa cifra, unos 20.000 millones (aunque mencionaron también un objetivo superior de 60.000 millones). Para distinguirse de sus predecesores, impone una “multa” a los capitales blanqueados, que arrancan en el 5% para sumas de entre $305.000 a $800.000 y 10% por montos superiores, tasa que se incrementará el año entrante. Esta “multa” es una broma por permitir blanquear capitales y evadir impuestos por montos muy superiores (IVA, Ganancias, Bienes Personales, etc.). Se propone destinar esta recaudación directamente a ANSES.

La reparación jubilatoria

Los juicios a la ANSES por actualización de haberes constituyen una verdadera maquinaria perversa. Aprovechando las múltiples formas de la precarización y flexibilización laboral, los pagos de jubilaciones y pensiones comenzaron a atrasarse de manera sistemática durante la Convertibilidad. Esto da inicio a reclamos de los beneficiarios por recomposición de sus haberes, en juicios que cobran algunas veces tarde, y otras nunca llegan a ver. El reclamo por recomposición de las jubilaciones y pensiones es histórico y tiene múltiples ribetes. Las moratorias jubilatorias del kirchnerismo sirvieron para ampliar el universo de cobertura –que hoy llega al 97%- pero no atendieron a este problema de los montos cobrados. El fallo de la Corte Suprema por el caso Badaro tiene años sin surtir efecto en los pagos.

Cambiemos toma así una demanda justa (el aumento de los haberes), pero para hacerlo nos extorsiona con su ley de blanqueo de capitales. Alegando que los recursos de ANSES son insuficientes para hacer estos pagos, proponen financiarlos con las penalidades cobradas a los blanqueadores. De acuerdo con los objetivos declarados de 20.000 millones de dólares que ingresen, esto significaría $300.000 millones, que con una tasa máxima del 10%, significarían $30.000 millones para la ANSES. Esta cifra no alcanza ni la mitad de lo que hoy rinde el Fondo de Garantía de Sustentabilidad, que mediante diversas colocaciones genera unos $75.000 millones al año. Las penalidades del blanqueo, además, servirían por única vez, y no como un flujo de ingresos. A todas luces insuficientes, el titular de ANSES, Emilio Basavilbaso reconoció que podrían obtener más recursos vendiendo las participaciones que tiene el organismo que dirige en 45 empresas privadas.

He allí el meollo de este segundo asunto: el gobierno pretende deshacerse de las participaciones estatales en empresas privadas, legado de la estatización de las AFJP. Aunque sólo en pocos casos esta participación fue conflictiva, al gobierno le resulta ideológicamente indigerible, y bien podría tratarse a ésta como la primera privatización macrista. Los beneficios de esta venta para ANSES están por verse.

La ley de blanqueo y la venta de acciones serían ingresos por vez única, lo que no permite sostener pagos sistemáticos a jubilados y pensionados. A esto debe sumarse los despidos, que erosionan la base de aportantes, lo que da poca credibilidad al anuncio. Aún más, el proyecto de Primer Empleo enviado al Congreso propone, igual que hiciera Cavallo, reducir los aportes patronales para teóricamente fomentar la contratación en blanco. Esto no ha funcionado en Argentina ni en otros países del mundo: su efecto será menores aportes a ANSES. Todo esto contribuye al desfinanciamiento de la caja jubilatoria, que el gobierno deberá resolver en los años por venir. La toma de deuda o nuevas privatizaciones no deben descartarse.

La ley de blanqueo es un auténtico desfalco, pero también una demostración de habilidad política de Cambiemos y falta de compromiso popular real de la mayor parte de las otras fuerzas políticas en el Congreso –que juegan el juego del gobierno. No debe confundirse su profundo sesgo ideológico liberal con torpeza: esa subestimación facilitó que ganaran la elección de 2015. Analizar el carácter regresivo de la medida no debe hacernos perder nuestra agenda.

La Comisión por la Memoria de la provincia de Buenos Aires manifestó su oposición a los proyectos de ley 0007-PE-2016 de “Técnicas especiales de investigación” para delitos complejos y el 1345-D-2016 que incorpora la figura del “arrepentido”-, y manifestó su preocupación ante su tratamiento apresurado, sin consulta ni previa convocatoria al debate a juristas y organizaciones de derechos humanos y de la sociedad civil. Ambos ayer obtuvieron media sanción en Diputados.

“Estos procedimientos resultan de dudosa constitucionalidad y atentan contra las garantías del debido proceso. Están inscriptos claramente en la doctrina de las ‘nuevas amenazas’ según las líneas de trabajo trazadas por las agencias internacionales especializadas de los Estados Unidos -con las que la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, mantuvo numerosas reuniones durante estos meses- y se contraponen con el tratamiento de la problemática desde una perspectiva de derechos humanos”, advirtieron.

Los proyectos pretenden incorporar las figuras de “agente encubierto”, “agente revelador” , “entrega vigilada” que implican la intervención e infiltración de agentes de las fuerzas policiales y de seguridad en la trama delictual, en pos del esclarecimiento de delitos o redes delictivas. Se pretende también incorporar al “informante”, quien actuará en el proceso bajo reserva de identidad a cambio de una compensación económica o un beneficio procesal. Por otro lado, se pretende ampliar la figura ya existente del “arrepentido”, a quien se le podrá reducir o incluso eximir de pena a cambio de información que sirva para esclarecer otros delitos.

En reiteradas oportunidades la CPM se manifestó en contra de políticas y proyectos que, como éstos, proponen la eliminación de garantías fundamentales mediante regímenes de excepción. Tal fue el caso de la sanción de la denominada ley antiterrorista. También ha sido reiterada la denuncia de la militarización de los barrios pobres mediante fuerzas federales no previstas para la interacción con la población civil, en el marco de la proclamada guerra contra el crimen o el narcotráfico.

La llamada guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado operan hoy legitimando un nuevo paradigma belicista de las políticas públicas en materia de seguridad en el que claramente se inscriben los proyectos, en procura de- según los objetivos difundidos- “dotar a la Justicia y a las fuerzas de seguridad y policiales de nuevas herramientas para la investigación de los delitos complejos”.

La CPM destacó que en nuestro país las fuerzas de seguridad y policiales actúan como reguladores de la expansión del narcotráfico y el crimen organizado. Los casos de las policías de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba así lo demuestran. En ese contexto, dotar a esas fuerzas de estas arbitrarias y cuasi ilegales herramientas investigativas solo ahondarán su involucramiento con estas modalidades delictivas.

“Particularmente preocupante resulta el intento tácito de incluir a estas figuras en los delitos de lesa humanidad, lo que encubre la posibilidad de aplicar una ‘obediencia debida’ o ‘indulto’ de carácter judicial. De acuerdo a los compromisos internacionales que tiene nuestro Estado y refrendados por leyes nacionales, estos crímenes no pueden ser pasibles de amnistía, indulto ni conmutación de penas”, opinaron.

El organismo mostró además su preocupación por “la reafirmación del sistema inquisitivo –en abierta contradicción con el nuevo Código Procesal Penal de la Nación que se encuentra a la espera de aplicación efectiva-, ya que la utilización y aplicación de estas técnicas de investigación en muchos casos quedan al arbitrio de los jueces de la Nación, en desmedro de los fiscales. Esta situación se agrava con la injerencia del Poder Ejecutivo en el proceso penal, a través del Ministerio de Seguridad”.

(Por Astor Vitali) Decenas de miles de páginas están dedicadas al Cordobazo. Militantes populares, historiadores, sociólogos e ideólogos de la “lucha antisubversiva” analizaron los hechos que sacudieron al gobierno de Ongania y varias conciencias adormecidas.

Algunos elementos de aquella gesta son excepcionales: conduce la revuelta un conjunto de organizaciones sociales y sindicales clasistas, reivindicando las libertades como trabajadores y trabajadoras a través de la lucha, a diferencia de otras estructuras sindicales con “dirigentes” que actuaron más como delegados de las empresas o de los partidos políticos sin hegemonía obrera, que como representantes de la clase organizada.

Pero la música también puede contar historias y el Cordobazo tiene su narración poético musical.

lenguajes 3

Desde Bahía Blanca, el Maestro Alberto D´Alessandro editó una serie de discos que forman parte de la serie Lenguajes. “Comencé con la serie Lenguajes cuando empecé a tomar conciencia de que la música que yo abordaba en guitarra, justamente, se refería a diferentes leguajes: la música popular, la música folclórica, la música clásica”, dijo a FM De la Calle.

El tercer volumen, Guitarra y Cuarteto de Cuerdas. Música Argentina (EPSA), contiene entre otras la obra “El Cordobazo”, de Jorge Cardoso. D´Alessandro conoció al autor “a través de su famosa ´Milonga´ que hemos grabado con el cuarteto Troverías. Varios años después, el azar o el destino hicieron que viniera Jorge Cardoso a Guitarras del Mundo (en la edición bahiense). Cuando comencé a perfilar la idea de hacer una retrospectiva de su obra, me entero de ´El Cordobazo´. Hacía mucho tiempo que buscaba una obra de ese tipo porque siempre me sensibilizó el tema de las luchas de las clases sociales, por la libertad, de los pueblos originarios. Enseguida pedí la partitura. Jorge Cardoso la tenía manuscrita y me la dio”, explicó el guitarrista.

Además del Maestro D´Alessandro en guitarra, el cuarteto de cuerdas que grabó la obra está integrado por Leonardo Rubin (violín), Besa Aliaj (violín), Paolo Miserocchi (viola) y Mario Peralta (violonchelo).

Los movimientos*

  • “El amanecer”. El día señalado es el 25 de mayo. Las fábricas abren sus grandes fauces… Una sirena sacude la mañana. Estudiantes muertos en Rosario y, anteriormente en Corriente (dos ciudades retiradas entre sí pero unidas por el mismo objetivo…) Las máquinas se silencian… A las 10 de la mañana se produce el “paro activo”
  • “La manifestación”. La policía comienza la represión… La manifestación crece y se producen violentos enfrentamientos con los obreros y los estudiantes… Matan a un estudiante… Vuelven las sirenas de las ambulancias… La policía huye por la presión de los manifestantes y, además, porque le habían acabado los medios antidisturbios…
  • “El ejército” – Requiem… Son las 5 de la tarde (como en las palabras de Federico)… Oficialmente, 16 muertos; la verdad es otra y muy distinta: se han llegado a contar más de cien personas muertas.
  • “La historia se repite”. Un canon que refleja cómo se va repitiendo como una gota de agua junto a otra, la historia de un pueblo, en este caso, el de Córdoba… Al final de este movimiento aparece como un perfil del aire, el tema de la manifestación… Luego, la caída de Onganía, “El Tucumanazo”… “El Rosariazo”… Etc., etc. y así esta historia interminable.

*Extracto de booklet del CD.

* La violenta historia de América Latina de los últimos años ha venido generando un importante hecho cultural que se podría denominar “el arte del exilio”, con obras pertenecientes a las diversas categorías creativas.

El artista exiliado interroga a la tierra que ha dejado, su historia más reciente, busca signos que la expresen, que la mantengan viva y cotidiana en su memoria para que no se convierta en un recuerdo, en una pura nostalgia.

El 29 de mayo de 1969 un hecho sangriento modificó en Argentina los planes inmediatos de un proyecto de país impuesto. Históricamente se le conoce como “el Cordobazo”, sucedió en Córdoba de allá. Ese día 50.000 obreros abandonaron las fábricas, armaron barricadas y tomaron la ciudad de casi u millón de habitante. Derrotaron a la policía, que tuvo que huir, y, finalmente, cedieron ante el ejército con un elevado número de muertos. El hecho permitió que posteriormente cedieran las altas instancias del poder y hubo salida democrática.

El Cordobazo parece hoy un suceso remoto, perdido en el vértigo histórico de América Latina.

Jorge Cardoso le ha puesto música a esa parte del vértigo. Lo que para él como testigo allá y entonces fue un estruendo en las calles de Córdoba, se ha convertido en sonido testimonial aquí en Madrid y ahora. La música también puede contar la historia.

Las notas se acomodan en el pentagrama divididas en cuatro momentos de aquel hecho: por un lado amanece con presagio, con chirridos de sierra y de máquinas en las fábricas; por el otro, hay una manifestación enfrentada policías y caballos que, finalmente, huyen derrotados; en el tercer movimiento llega el ejército y llega la muerte como el poema de Lorca: “A las cinco de la tarde”, termina con un réquiem. El último movimiento es una pregunta, un comienzo o un futuro, no se sabe. Y en todos ellos las dulces melodías de la tierra, sus viejos ritmos mezclados a los ruidos de la historia.

*Daniel Moyano. Escritor

cord 1

El juzgado en lo Contencioso Administrativo N° 1 de La Plata, a cargo del Dr. Luis Federico Arias, comunicó el dictado de una medida cautelar mediante la cual se suspende el aumento de tarifas de energía eléctrica en la Provincia de Buenos Aires (EDELAP, EDES SA, EDEA SA y EDEN SA), en virtud de no haberse celebrado la correspondiente audiencia pública con anterioridad a su aprobación.

El Colectivo de Acción en la Subalternidad (CIAJ) promovió una acción autosatisfactiva contra el Ministerio de Infraestructura de la Provincia de Buenos Aires y las empresas EDELAP (Empresa Distribuidora de Energía La Plata S.A.), EDES S.A. ( Empresa Distribuidora de Energía Sur S.A.), EDEA S.A. (Empresa Distribuidora de Energía Atlántica S.A.) y EDEN S.A. (Empresa Distribuidora de Energía Norte S.A.), solicitando como medida cautelar se suspenda la aplicación de los nuevos cuadros tarifarios para la distribución del servicio público de energía, autorizados mediante Resolución N° 22 del Ministerio de Infraestructura y Servicios públicos de la Provincia.

En virtud de ello, “solicita se ordene a las empresas demandadas a abstenerse de aplicar la nueva tarifa a los usuarios del servicio público, efectuar una nueva liquidación y emitir nuevas facturas o, para el caso en que la nueva facturación no fuera emitida antes de los sucesivos y periódicos vencimientos, que la empresa admita el pago del servicio según el cuadro tarifario vigente con anterioridad al incremento establecido, sin que ello implique la alteración o interrupción del servicio”.

El fundamento de lo requerido reside en que “la resolución del Ministerio de Infraestructura Provincial, vulnera el principio de participación ciudadana en los términos del art. 42 de la CN, es decir, se traduce en una manifiesta lesión a derechos de incidencia colectiva de carácter individual homogéneo, al cercenar la posibilidad de que los individuos que conforman la sociedad se expresen e interpongan impugnaciones previas al aumento tarifario del servicio público, el cual resulta superior al 100%, por lo que los usuarios se ven forzados a pagar en forma desproporcionada una tarifa de la que no han tenido, como ciudadanos consumidores, posibilidad de ser escuchados, conduciendo a un perjuicio económico desproporcionado e injustificado para todos los ciudadanos de la Provincia”.

Arias resolvió “hacer lugar a la medida cautelar” y ordenó “a las citadas empresas a que, de modo inmediato a la notificación de la presente, efectúen la liquidación correspondiente y emitan nuevas facturas con sujeción a lo dispuesto en el presente despacho cautelar”.