El Gobierno oficializó su nueva propuesta de reestructuración de la deuda en poder de bonistas privados mediante el Decreto 582/2020 y el economista Francisco Cantamutto la analizó en FM De la Calle.
“Esta cuarta oferta se ha ido acercando a lo que pedían los acreedores, están bastante cerca de la oferta original. Para el conjunto de bonos, el valor neto -que sería cuánto valen hoy- está en 53,5 dólares cada cien. En la oferta original se reconocía un valor de 37. La mejora fue sustantiva, más del 50 de la oferta original”, afirmó el columnista de En eso Estamos.
Agregó que “en algunos bonos específicos, los del canje 2005-2010, el valor incluso llega a 57 dólares. La diferencia respecto a lo que pedían los bonistas se achicó tanto que hace muy improbable que en el corto plazo haya juicios”.
A los bonistas “se les van a reconocer intereses caídos, van a cobrar antes y, además de eso, van a tener menores quitas de capital que en la oferta anterior”.
Cantamutto acotó que para esto es necesario contar con un mínimo de aceptación en los bonos de 2005- 2010: “Tiene que llegar al 85% y el resto de bonos emitidos durante del gobierno de Cambiemos alcanza con dos tercios. Hasta alcanzar estos valores, el gobierno ofrece estas mejoras, una vez que se supere este umbral esas ofertas se caen, lo que significa que si algún bonista espera a que fracase el canje puede perder las mejoras”.
Cantamutto destacó que “el propio Luis ‘Toto’ Caputo salió a saludar la oferta” y que “el gobierno cuenta con el apoyo de un fondo, viejo acreedor de la Argentina: Fintech”.
“Es un fondo de inversión copropietario del grupo de Telecom Cablevisión. Es amigo de los muchachos de Clarín, esto tuerce la información que circula. Este fondo no tiene gran cantidad de bonos pero actúa como carril de negociación entre Argentina y el resto de los bonistas”.
El obstáculo principal
“Blackrock, el titán de las finanzas y del poder político, está diciendo que no quiere entrar al canje y dice tener alrededor de un tercio de los bonos, por lo cual lo pone en riesgo”, comentó.
“Lo que queda claro es que esta nueva oferta de mejora cuenta con el aval del FMI, del estabishment de Washington y de gran parte de los bonistas que dicen: no solamente me estás ofreciendo un seguro de cobro sino que me mejorás la oferta”.
El economista señaló que “Blackrock, aparte de negociar con Argentina, es un acreedor de decenas de países del mundo. Después de lo que pase con Argentina va a tener que seguir negociando con otros países, entonces, no quiere que se pudra el negocio en todo el mundo”.
Última oferta con cierre en agosto
Cantamutto comentó que “el 4 de agosto esto se cierra con default o con acuerdo y se habilita la discusión del presupuesto. Lo que pasa es que se ponen las mismas condiciones para la deuda local y empieza la negociación explícita con el FMI”.
“El FMI está diciendo ‘muy bien muchachos pero no vamos a tomar correponsabilidad porque prestamos plata sobre el límite de la cuota para financiar la fuga de capital'”, adelantó.