“En un marco de decisiones macroeconómicas que reasignan miles de millones de dólares a los que más tienen, a nuestros chicos se les restringe la leche y el pan”, aseguraron el ex concejal Raúl Ayude, integrante de la agrupación Nuevos Vientos, y el ex consejero escolar Roberto Jarque, miembro de la Corriente Comunista David Watu Cilleruelo.
Los dirigentes repudiaron en un comunicado el anunciado recorte de los cupos en los comedores escolares y destacaron que “los desayunos, almuerzos y meriendas cumplen un rol indispensable para la educación de muchos de los alumnos, complementando la alimentación familiar deficiente”.
“Durante 2015 hubo 20.017 cupos de Desayuno Merienda Complementaria los que fueron recortados, según nota de la Dirección General de Cultura y Educación, a 16.578. 3.439 cupos menos. Por cada cupo se abona diariamente $3,95. Lo que correspondería a $300.000 mensuales. Durante 2015 hubo 3.815 cupos de Servicio Alimentario Escolar cuyo recorte en 2016 fue a 3.315, 500 menos. Por cada cupo se abona diariamente $6,30. Equivaldría a unos $ 70.000 mensuales”.
Ayude y Jarque recordaron que dichos montos no fueron actualizados desde 2014 y, por ende, perdieron poder adquisitivo, agravádose la situación con los aumentos de más del 40% en alimentos básicos desde noviembre hasta la fecha. “Sobre eso, el recorte”.
“Las escuelas hacen milagros para poder cumplir con su tarea con los montos recibidos, sufriendo el aumento de necesidad por la coyuntura económica actual. Con estas decisiones las autoridades provinciales y locales muestran hasta donde están dispuestos a llegar, presionan sobre las cooperadoras y docentes de las escuelas, intentando que estos se paren en la puerta del comedor para designar quien come y quién no”, manifestaron.
Para los referentes, “mientras se decide quitar retenciones al agro y a las mineras, se devalúa el peso con relación al dólar, con la consiguiente alza del valor de los alimentos básicos, aumentan los servicios, aumentan los alquileres, el detenimiento de la obra pública con el aumento del desempleo y la baja de las changas con las que muchas de las familias más humildes cubrían sus necesidades. La decisión que toma el Estado en ese sentido es de recortar los cupos de los comedores, único espacio de contención alimentaria de nuestros chicos”.
“Lejos de avanzar hacia pobreza cero, se avanza hacia un aumento de las necesidades y un recorte en los paliativos. Trabajo digno es la solución y nunca los comedores y las ayudas, pero estas asistencias alimentarias, en un marco de emergencia como este, se vuelven urgentes e indispensables”, opinaron.
Finalmente, desde sus agrupaciones exigieron “que se respeten los cupos solicitados por cada escuela, se actualicen los montos y se releven las necesidades de los comedores, ya que en muchos casos los chicos comen por turnos por faltas de utensilios o deficiencia en las instalaciones”.