Edgardo Form, presidente del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos, visitó FM De la Calle para conversar antes de su presentación en la sede local de la entidad sobre los desafíos que enfrenta el cooperativismo en la actualidad. Al momento también está a cargo interinamente de la Confederación Cooperativa de la República Argentina (Cooperar) –mientras Ariel Guarco preside la Alianza Cooperativa Internacional–.

El cooperativista comentó que Guarco está “cumpliendo su rol al frente del organismo fundado en 1895. Es un orgullo porque es la primera vez que un compatriota accede a la presidencia y fue electo sobre la base de una propuesta que procura poner a la ACI de cara a los desafíos del cooperativismo y contribuir a debates de la agenda contemporánea (generar trabajo decente, relaciones pacíficas entre países, creación de bienes y servicios con sentido social y solidario entre otros)”.

Respecto a la reinstalación de políticas neoliberales aseguró que “estamos ante un escenario complejo, hay que agudizar la inteligencia para preservar los logros que se obtuvieron en años previos, garantizar la continuidad de las entidades, explorar alternativas para sortear los obstáculos y un tema clave es la integración, hacemos mucho hincapié en la cooperación entre cooperativas (sexto principio de la cooperación)”.

“La unión hace la fuerza y a la hora de peticionar a las autoridades no es lo mismo ir por separado”, expresó en relación al freno a os artículos de la reforma tributaria que incluían la aplicación del impuesto a las ganancias para cooperativas y mutuales. “Es una vulneración de la naturaleza de las cooperativas que, por definición, no tienen fines de lucro. En conjunto fuimos a diferentes bloques del parlamento nacional y durante la sesión de diputados se eliminaron los dos artículos que pretendían aplicar el impuesto”.

Sobre los tarifazos afirmó que “impactan de manera dramática. Un estudio de un Observatorio de la Economía Social y Solidaria explicaba que hay 16.000 trabajadores de empresas recuperadas que corren el riesgo de quedar sin trabajo por el impacto que tienen las tarifas”. Si bien en el Congreso se está discutiendo el tema, “el presidente advirtió que no hay posibilidades de modificar el régimen tarifario”.

Form comentó que tuvieron una reunión –junto con representantes de distintas federaciones que agrupan cooperativas eléctricas– “con uno de los funcionarios que está en la Secretaría de Energía de la Nación, donde planteamos la necesidad de estudiar la configuración de un fondo compensador a nivel nacional que ayude a compensar los mayores costos”.

Sobre el emprendedurismo que pregona el gobierno opinó que “suena a solución individual, nosotros hablamos de soluciones colectivas. […] Para afrontar grandes desafíos es necesaria la ayuda mutua y el esfuerzo propio. Paulo Freire decía que ‘la lucha por la esperanza es permanente y crece en la medida que se percibe que no es solitaria’”.

Rodolfo De Lucía, fiscal de la causa que tiene como imputados a los abogados Roberto Daniel Carmona y Rafael Benedicto Díaz Flaqué por la estafa de la firma DyF Fiduciaria, hizo referencia en FM De la Calle a la jornada de alegatos y el pedido de nueve años de pena por la imputación del delito de defraudación en relación a su actuación en tres de los emprendimientos que mantenía la empresa.

“Desde el principio la fiscalía los acusa de formar una asociación ilícita junto a Sergio Favretto, en el marco de esa asociación –destinada a cometer defraudaciones contra los emprendimientos que administraba DyF– haber colaborado con Favretto para que cinco hechos puntuales de defraudación (administración fraudulenta) pudieran ser llevados a cabo”, comentó el fiscal.

También explicó que “el delito de sociedad ilícita tiene como pena entre 3 y 10 años de prisión, los de estafa cada uno 6 años (máximo). […] Teniendo en cuenta los agravantes que consideró la fiscalía, extensión del daño que se causó con esta maniobra (por montos y damnificados), y la especial formación profesional que tienen Carmona y Flaqué –abogados–, vuelve más reprochable su conducta”.

De Lucía expresó que no calcularon el monto total de afectados por la maniobra, “es muy grande. La imputación hacia Carmona y Flaqué no era concreta, se les imputa haber generado pasivos por 12 millones de pesos y haber sustraído tres manzanas de terreno que pertenecían a otros dos emprendimientos. […] Cuando en otros fideicomisos sacaron la cuenta de cuánto han perdido, las sumas son mayores teniendo en cuenta que también fueron damnificados proveedores y empleados, entre otros”.

En relación a los controles por parte del Estado para evitar este tipo de situaciones o si hay alguna instancia que falle, aseguró que “el fideicomiso (dentro del Código Civil y Comercial) es una herramienta que permite la realización de desarrollo inmobiliario. Hay determinadas conformidades de proyecto que a nivel municipal tiene que ser aprobados. Quizás falta control cuando estos planes se vuelven de magnitud. […] Parecería que no hay un control del Estado de en qué medida estos proyectos son viables, y no es la primera vez que sucede en Bahía Blanca, pasó con los Alternativa Bahiense en su momento. Tenemos estafas similares en trámite, no sería raro que también lleguen a juicio (en la ciudad y en Punta Alta)”.

Sobre la posibilidad de recuperar algo de lo perdido: “depende de cada fideicomiso, algunos estaban sin avances en las obras, otros ya eran edificios en construcción –que se han podido recuperar con inversores externos–. La quiebra de DyF no fue suficiente para responder por todas las deudas, hay casos donde las personas que pusieron dinero no van a recuperar nada”, explicó.

Si bien el lunes se conoce la sentencia de Carmona y Díaz Flaqué, Favretto “técnicamente no es un prófugo porque no está correspondientemente notificado. Tiene pedido de detención hace años y captura –incluso internacional–. Cuando podamos dar con él tendrá que rendir cuenta por unos cuantos hechos más que se le imputarían solo a él. Hoy lo buscamos activamente y no está confirmado que esté fuera del país”.

El sociólogo Daniel Feierstein dijo a FM De la Calle que al negacionismo  y a la lógica de los dos demonios “se la enfrenta políticamente y con acciones sociales”. Fue durante su visita a Bahía Blanca para brindar un seminario en el Departamento de Humanidades en la UNS.

El investigador, que publicará próximamente el libro “Los dos demonios, recargados”, participó además de una entrevista pública coordinada por Fabiana Tolcachier y Jessica Visotsky integrantes de la Cátedra Libre de Derechos Humanos.

¿Cómo sintetizarías la idea de los dos demonios recargados?

El objetivo es tratar de analizar cómo reaparecen las lógicas de los dos demonios pero con otros sentidos, con otros objetivos, con otras intencionalidades que en algún punto son más graves de lo que fue el surgimiento en los años ‘80 de la teoría de los dos demonios. Entonces, un poco de ahí el concepto de “recargado” que es tratar de mostrar como la novedad de este momento y la peligrosidad, la disputa que se está dando en las representaciones en el intento de aprovechar este sistema de equiparación de las violencias, básicamente para demonizar cualquier posibilidad de resistencia con un orden injusto.

 ¿A través de qué acciones por ejemplo?

El objetivo de los dos demonios comparaba dos violencias en los setenta absolutamente distintas, la violencia genocida y la violencia insurgente pero con el objetivo de legitimar el juzgamiento de las violencias genocidas. Entonces, más allá de los problemas que podía tener, el objetivo de esta equiparación tenía que ver con mostrar la importancia y la gravedad de la violencia genocida.

Mientras que la aparición ahora de esos sistemas de equiparación por un lado tiene el objetivo de intentar volver a perseguir a los sobrevivientes de las experiencias de las insurgencias o de confrontación social en la Argentina, quienes para el caso han sufrido desapariciones, asesinatos, exilio e infinidad de persecuciones, además de la persecución legal. Pero, por otro lado, y esto es más grave en esta necesidad de demonizar, se buscan demonizar también los modos actuales de intentar enfrentarse a eso que no tiene nada que ver con los modos de los setenta y que, sin embargo, son demonizados en el mismo sistema. Acá podemos ver desde la represión del pueblo mapuche en el sur, hasta la represión a la manifestación social a fin del año pasado. 

Imaginamos que en este contexto la presencia de la política de seguridad y el apoyo del gobierno nacional independientemente de la perspectiva del poder judicial en algunos temas, tiene un peso…

Exactamente. Lo llamo “recargado” porque esa política de seguridad que está encarnada en Patricia Bullrich es una novedad desde el año ‘83 para acá. Si bien los años ‘80 fueron el momento de mayor hegemonía de la teoría de los dos demonios, en ningún momento esto llevó al desbocamiento de las fuerzas de seguridad ni a esta idea de Bulrich y de Michetti del beneficio de que ante cualquier caso el beneficio de la duda debe ser a favor de las fuerzas de seguridad, de las fuerzas armadas. En este sentido le veo mucha más gravedad que a la versión original, porque están intentando avanzar sobre un consenso de la democracia Argentina a partir del fin de la dictadura que era la contención del ejercicio de la fuerza represiva. En este sentido la idea es poder pensar cómo la discusión de los setenta no es sólo eso.

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Vos has resaltado el problema de la pérdida de pluralidad en los organismos de derechos humanos que se ha registrado durante los últimos años, ya con dos años del gobierno del macrismo, ¿cómo evaluás la responsabilidad de los sectores afines al kirchnerismo y, también, cómo han actuado los sectores más críticos en relación a cómo se ha montado el macrismo sobre cierto desprestigio a partir de algunos episodios de corrupción?

Yo creo que uno de los tickets fundamentales para impedir el aumento de la represión ha sido la legitimidad de los organismos de derechos humanos y  eso es lo que está puesto en cuestión. En esa “puesta en cuestión”, que por supuesto es una ofensiva de los sectores más conservadores y del propio macrismo, hay mucho de lo que yo llamo “los errores no forzados”, que son los errores que cometió el propio campo popular y los organismos de derechos humanos y que facilitaron esta deslegitimación.

Fueron ambos sectores y esta es la miopía, tanto de los sectores que terminaron acercándose al gobierno kirchnerista como de los sectores que fueron incapaces de ver una conquista de ese gobierno, lo cual generó un quiebre, una simplificación donde se tenía, por un lado, un sector que planteaba que no había ninguna violación de derechos humanos por parte del gobierno, lo cual es inaceptable porque el gobierno siempre viola los derechos humanos y los organismos están para señalarlo. Pero había otro sector que no era capaz de distinguir la diferencia entre un proceso de juzgamiento con más de mil condenados y la impunidad que precedió a ese período.

Entonces, me parece que en este quiebre, en esta pérdida del pluralismo, no poder zanjar internamente las contradicciones ante un gobierno efectivamente contradictorio y complejo, juega un papel muy importante en la deslegitimación y en la homologación de los organismos como parte de un discurso antikirchnerista a partir de la “lógica del curro”, de la identificación partidaria.

No creo que esté todo perdido pero se vuelve un desafío a dos años de gobierno de macrista, cuando todavía seguimos teniendo dos marchas ante cada proceso de denuncia, lo que parece bizarro en estas condiciones.

En ese sentido ¿en Buenos Aires lograron por lo menos un acto unificado el pasado 24 de marzo?

No. Este otro tema fue una movida mediática que planteó que se había logrado cuando todavía no era así y eso fue uno de los elementos que lo impidió. Estuvimos muy cerca, lo cual es muy importante: hubo actos únicos en lo que fueron las manifestaciones de reclamo por Santiago Maldonado, por ejemplo.  Pero no, finalmente el 24 de marzo volvió a haber dos actos pese que habíamos estado muy cerca de lograrlo.

Es difícil pensar poder atravesar unos cuantos años de descalificaciones mutuas, de chicanas totalmente innecesarias que han dejado muchas heridas y, por otro lado, ver cierta miopía actual como para no poder tomar decisiones por encima de estas cuestiones personales. Se logró avanzar un poco y a veces surgen estas vehemencias que por lo general es lo absurdo, porque no tiene nada que ver con una calificación del momento actual. Verdaderamente no hay diferencias significativas de las necesidades de este momento sino que tiene más que ver en analizar cómo zanjar cuestiones del pasado que están obturando la posibilidad de acciones conjuntas. Yo soy optimista en el sentido de que más temprano que tarde se supone que esto tendría que recomponerse.

Otro de los puntos en los que haces hincapié en el libro es la defensa del concepto de genocidio. ¿Por qué tenemos que ir más hacia el genocidio y no utilizar figuras como crímenes contra la humanidad o terrorismo de Estado para retratar lo que sucedió en nuestro país?

Hay muchos motivos. Te voy a mencionar los dos o tres que considero más importantes y que van quedando muy claros en este momento.

El primero es que es el único concepto que permite quebrar la dualidad, algo tan fuerte de las lógicas de los dos demonios recargados. Los otros conceptos nos introducen en discusiones que siempre nos llevan a la dualidad. El concepto de genocidio es el que plantea que ninguna acción que podamos dar sobre la legitimidad o no de las acciones insurgentes, no tiene ningún punto de comparación con lo que implica la organización de un genocidio.

El segundo elemento es a quiénes afectaron los hechos, me parece que la potencia del concepto de genocidio tiene que ver con entender que hubo un intento de destrucción el grupo nacional argentino y esto implica que toda la población sufrió los efectos del terror, algo que no queda para nada contemplado en conceptos como terrorismo de Estado, crímenes de lesa humanidad, donde se los ve de un modo más individual y directo, donde pareciera que las víctimas fueron los que sufrieron en sus cuerpos la represión estatal y me parece que es fundamental entender que un genocidio deja marcas en toda la sociedad, no solamente en aquellos sujetos que afectó directamente o en sus familiares.

El tercer elemento es la solidez jurídica del concepto, que existe en nuestro país desde 1956 y que, por lo tanto, da muchas más herramientas para la claridad, solidez de su aplicación jurídica y sobre todo la distinción con cualquier otro tipo de práctica.

Estos son algunos de los elementos entre muchos otros que le dan una diferencia fundamental, no tanto el hecho que se cree que sería más grave que otros delitos, eso no tiene ningún sentido, pero sí cómo construimos la memoria de lo que ocurrió.

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Hablando de lo jurídico, ¿cómo ves esta etapa de los juicios?

En un sentido creo que muestra las cuestiones que hemos conquistado, los juicios continúan, han habido sentencias muy importantes en estos dos años: la de Mendoza, la de la ESMA 3. Más allá de que hay como cierta autorización a los jueces más renuentes a cajonear causas o a otorgar mayor número de prisiones domiciliaras o a intentar revertir las presiones preventivas.

También hay como pequeños indicios contra los sobrevivientes de la experiencia genocida por las acciones desarrolladas por la insurgencia. Me parece que ahí sí hay un peligro cierto, mucho más que la impunidad que es esta igualación entre lo que no tiene punto de comparación. Por eso digo que esta revictimización de los sobrevivientes -que exactamente son eso: sobrevivientes- y más allá de la valoración de si las acciones que desarrollaron primero han prescripto en relación al paso del tiempo, lo segundo es que han sido juzgadas legal e ilegalmente numerosas veces. Fueron desaparecidos, asesinados, torturados, exiliados y juzgados en los años ‘80.

Ese discurso de “memoria completa” o de reinstalación del proceso de juzgamiento es extremadamente falso, mentiroso y peligroso, porque creo que tiene más posibilidades de construir consenso que la posibilidad de la impunidad, que me parece que ha quedado claro con la marcha de mayo del año pasado que hay un fuerte rechazo social a la posibilidad de la impunidad. La causa Larrabure me parece que es la puerta de entrada a esta mirada equiparadora, creo que en este sentido es muy importante la disputa social, política y jurídica que se está dando alrededor de esa causa para no permitir ese proceso de igualación.

¿Qué te pareció la decisión de la Fundación del Libro de levantar la proyección en la Feria de la película “Será Venganza” que reivindica a represores de nuestro país?

Me pareció excelente y creo que es el camino porque ante esta ofensiva de miradas que buscan distorsionar las construcciones del pueblo argentino uno puede pensar que la salida tendría que ver, como propuso un proyecto de Nilda Garré, con impedir y negar penalmente la expresión de estos consensos. Yo creo que es un enorme error.

Creo que a estas lógicas de los dos demonios recargados y al negacionismo se las enfrenta políticamente y con acciones sociales. No creo que el derecho penal esté para penar pensamientos, creo que lo que sí corresponde es llevar a cabo acciones sociales y no otorgarles espacio, por lo tanto hay una enorme responsabilidad incluso de los periodistas de impedir y cerrar el espacio a la manifestación de estas expresiones pero por una decisión política y no por una decisión penal que no implica consenso social.

Entonces, me parece que en este sentido ilumina el camino, como ocurrió en la Feria del Libro, que sea la propia sociedad la que diga que no está dispuesta a tolerar y brindar espacios a estos modos de agresión de la memoria social.

Fotos: Cristian Gonzalez y FCPyS UNCUYO

El delegado gremial e integrante de la Mesa Nacional de la Federación de Aceiteros, Marco Pozzi, informó por FM De la Calle que se encuentran en estado de alerta permanente como consecuencia de la ola de despidos en las plantas de Cargill de General Gálvez y Bahía Blanca .

“A partir de ayer se dictó el estado de alerta a nivel nacional. Surgió a partir de eso que el Ministerio convoque una audiencia para hoy a las 3 de la tarde, así que estamos en estado de alerta y expectantes con lo que puede pasar en la audiencia”, aseguró.

Al mismo tiempo, el dirigente comentó los resultados de una serie de estudios realizados sobre la salud de los trabajadores del sector. “Hicimos análisis en base a los datos que tenemos en nuestra obra social, sobre todo en la parte del cordón de Rosario”.

“Eso arrojaba números bastante temerosos con respecto a las posibilidades de cáncer. La posibilidad de que un compañero aceitero contraiga cáncer en relación con un ciudadano común es el doble. Eso nos alertó, hicimos un estudio y, por ejemplo, hay modificaciones dentro de la escala del tipo de cáncer que tenemos la población aceitero con respecto a la población del común de la gente”, manifestó.

Ante estos datos, desde el gremio decidieron llevar adelante un plan preventivo. “Lo ideal sería hacerlo con las empresas, modificar las condiciones que sean necesarias para eso, porque también nos encontramos con que hay muchos de los agentes cancerígenos que no están declarados en el sistema de ART”.

“Me parece que ahí hay que hacer un trabajo importante para que realmente la prevención sea efectiva, y en el caso que no sea así, que las empresas se hagan cargo del daño que hacen en la población tanto aceitera como en la población en general. Porque también tenemos otro dato certero que es, que las plantas no están alejadas de las ciudades”, aseguró.

Cristian Chazarreta, abogado de la familia de Gabriel Burgos Melo (19), obrero que falleció cuando una zanja se derrumbó en Soler al 100, se refirió en FM De la Calle a la definición del fiscal Aguilar de imputar al titular de la empresa y a dos profesionales más. “Burgos Melo perdió la vida el 6 de noviembre de 2016, un domingo en que la empresa decidió comenzar con la obra aunque faltaba la autorización municipal y los controles pertinentes”, indicó.

“Los tres profesionales debieron ser rigurosos, cambiaron totalmente la planificación de la obra exponiendo a los trabajadores a condiciones vulnerables”, advirtió el letrado sobre: Ángel Pablo Matelica (ingeniero civil, director de la obra y titular de MAPSA), Miguel Ramírez (ingeniero en seguridad e higiene) y Nahuel Ostertag (subdirector de la obra), imputados por homicidio culposo y lesiones culposas de los tres obreros que sobrevivieron con secuelas.

El fiscal Aguilar continuó con la labor del Dr. Zaratiegui (apartado por una situación de salud), y en enero “recibe a la familia, le indica que iba a estudiar la causa y define las tres imputaciones para profesionales que intervinieron en roles preponderantes en esa obra”. También aseguró que los “incumplimientos son inagotables. Entre ellos: el estacado de las paredes para evitar derrumbes, controles periódicos, control continuo del director y personal de ingeniería”. Por el lado de la documentación expuso que no contaban con “la autorización provista por la Municipalidad (el expediente estaba en trámite y comenzaron a trabajar sin ella)”.

Chazarreta manifestó que había un “triángulo contractual entre FUMEBA (fundación que administra el Hospital Privado del Sur) EDES y MAPSA”. Mientras que la fundación solicitó la repotenciación del servicio, EDES tiene dos formas de realizar esa actividad: la hacen ellos (que están demorados con los plazos) o FUMEBA hace el aporte económico y contratan una empresa (MAPSA). “EDES se encarga del control de condiciones de esta repotenciación, pero intervienen las tres partes. […] Por el momento no fueron imputados y no tienen fecha de citación a indagatoria”, expresó.

Respecto a los obreros que sobrevivieron dijo que “siguen traumados, bajo contención familiar y psicológica. Quiero resaltar que los trabajadores son zanjeros toda la vida –desde chicos–, y luego de haber estado cuatro horas enterrados bajo tierra, difícilmente se puedan reinsertar laboralmente en el rubro que realizaron toda su vida. […] La familia de Burgos Melo quiere justicia y que se condene penalmente a los procesados responsables de este hecho”.

Sobre este tipo de accidentes que ocurren seguido en la ciudad, el abogado manifestó a titulo personal: “Esto se ve a diario, en determinados rubros los trabajadores quedan expuestos a lesiones porque no se hacen los respectivos controles. El cumplimiento de las normas es costoso, otras veces es por desidia de los empleadores”.

Ayer ante el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 4 de la Ciudad de Buenos Aires, integrado por Adolfo Calvete, Ivana Bloch y Julio César Báez, se dio lectura a los alegatos de la querella en el juicio por el travesticidio de Diana Sacayán ocurrido en 2015 y cuyo único imputado en la causa es Gabriel Marino.

En diálogo con FM De la Calle, Luciana Sánchez, representante legal de la familia sostuvo que su alegato “fue larguísimo”, pero que tenía que ver con que “no solo es para las cosas puntuales. Pasan muchas cosas en los juicios orales, cumplen muchas funciones y estamos hablando de Diana así que era difícil que fuera corto”.

 

Consultada respecto de que esta sea el primer causa es llevar la caratula de ‘travesticidio’ explicó que “en efecto eso es un gran trabajo y una demanda muy concreta de Sasha Sacayán y de Darío Arias de llevar esa palabra y de poder inscribirla en el lenguaje judicial. Siempre sabemos que los significados judiciales son más acotados que los sociales, pero bueno, es importante que el lenguaje judicial pueda ir evolucionando también”.

Sobre la pena pedidas en su alegato comentó que fue prisión perpetua porque “así lo dispone nuestro Código Penal de la Nación. Hay pocos delitos en nuestro Código Penal, por suerte, que tienen esas penas tan altas y los delitos que tienen esas penas son los más graves. Podemos discutir muchas cosas de la pena perpetua pero, bueno, no era el momento en el juicio para eso, sino para pedir la pena y la calificación está dado así”.

Del total de travesticidios que han sucedido en los últimos tiempos sólo cuatro han sido llevados a juicio, al respecto Sánchez mención que es muy difícil hasta ahora porque “los travesticidios están avalados socialmente. La impunidad se construye socialmente, no es fácil ser impunes y cometer crímenes, menos en las sociedades modernas. Los mismo pasa con los crímenes de lesa humanidad digamos, es una impunidad que está construida”.

“Por más que la ley refleje que es dañoso, grave, socialmente grave matar a una persona por su identidad de género o con motivo de su identidad de género, no habría ninguna condena en este caso. Bueno, todavía no la hay de hecho, porque tiene un aval social la comisión de estos crímenes”, enfatizó.

La semana pasada AFIP ordenó que los clientes de frigorífico recuperado Incob debía realizar sus pagos en una cuenta especial del Banco Nación. El jueves las trabajadoras y los trabajadores denunciaron un pedido de coima desde Buenos Aires y el viernes se manifestaron frente a la delegación de San Martín al 100 donde les ofrecieron una solución momentánea.  Hoy se reunen con senadores en La Plata.

Orlando Acosta denunció en FM De la Calle que la deuda “fue hecha por Garaggiola (ex presidente de la empresa) y ex-funcionarios de la AFIP. El jueves pasado llamó un funcionario de Buenos Aires proponiendo que le demos el 20% del monto de la deuda para que sacara el expediente. […] Así se creó la deuda en primer lugar, Garaggiola pagaba para bajar el expediente y cuando volvía a subir, volvía a pagar la coima. Tenemos pruebas, se hizo una denuncia penal y nos vamos a sentar ante el gobierno para decirle que es la AFIP que sigue generando estas deudas”.

El trabajador aseguró que se encuentran más tranquilos: “Cuando fuimos el viernes a movilizarnos mantuvimos una reunión con distintos directivos de cada área y pudimos explicarles la complicación de la cooperativa para pagar la deuda de once millones de pesos heredada de Garaggiola. Desde ese momento la cooperativa vive con lo del día a día y en el medio pasamos por los aumentos de impuestos y servicios”.

Acosta comentó que la situación con ARBA (ente recaudador provincial) es más fácil de solucionar, “yendo a las presentaciones –por ser cooperativa– estás exento de pagar. Hace tres semanas la Cámara de Diputados de la Provincia votó un amparo ante cualquier acción legal que llegue a una cooperativa –desalojo, embargo–, lo que vamos a proponer es la última media sanción a esa ley”.

“Los directivos manifestaron que si como agente de recaudación no pueden pagar parte de la deuda es negligente de su parte –y eso lo entendimos–”. La propuesta que les hicieron desde AFIP consiste en que la cooperativa entregue cuotas mensuales de $20.000 para registrar antecedente de que hay voluntad de pago pero no capital. “Ellos, ante un embargo desde Buenos Aires, tienen cómo ‘defendernos’ hasta que salgan las leyes de condonación que ya tienen media sanción en Diputados”, explicó Acosta.

Luego de que le dieran media sanción a la quita de impuestos en las boletas de servicios, Andrés De Leo (senador provincial por Cambiemos) habló sobre el tema en FM De la Calle. También se refirió al embargo que la AFIP le realizó a Incob, y aseguró que los recibirá el martes en La Plata. “En principio el proyecto no abarca deudas nacionales, la cooperativa más allá de un componente social no deja de ser una empresa comercial que se rige por normas impositivas nacionales”.

El alcance del proyecto sí tiene que ver con ARBA, “vamos a intentar avanzar con lo que tiene que ver con la provincia”: la condonación o eventual suspensión de deudas que hayan podido tener en Buenos Aires y la prórroga de la ley de expropiación de la propiedad. De Leo aseguró que van “a hacer un esfuerzo para tratar de sacar adelante” al frigorífico.

Respecto al tema impositivo el senador manifestó que “va a haber que avanzar en otras líneas, con otras autoridades, y ver posibilidades de encuadramiento en algún esquema impositivo de regularización para que puedan seguir operando”. De los funcionarios de AFIP que no realizaron ningún tipo de control durante la última década permitiendo el endeudamiento, advirtió: “si hablamos de que en otra etapa el funcionario público incumplió con sus deberes, deberá ventilarse las responsabilidades y hacerlo”.

Por otro lado, el senador hizo referencia a la desfinanciación de los municipios a raíz de la media sanción al proyecto de quitar impuestos a las tarifas: “Eliminamos impuestos distorsivos (de muchos años) que 17 millones de bonaerenses abonaban en las boletas de luz, agua y gas, que nada tenían que ver con la prestación del servicio”.

“La realidad es que Buenos Aires va a recibir de coparticipación un monto sustancial mucho más importante que lo recaudado con impuestos. […] Entre enero y abril de 2018 la coparticipación se incrementó en casi 6.000 millones de pesos, un 41% más que el año 2017”. Asimismo explicó que la Gobernadora “duplicó los fondos que le van a girar a los municipios por recaudación de bingos y casinos. Está garantizado que los municipios tengan financiamiento, y a las críticas que hizo el FpV –que se van a desfinanciar obras– tenemos que decirle: durante años se cobraron muchísimos impuestos y dejaron al país y a la provincia absolutamente quebrada”.

De este modo, estiman que el monto a recibir por la recaudación de bingos y casinos será de “15 millones de pesos, y por coparticipación entre 80 y 100 millones de pesos (respecto de años anteriores)”. En cambio, lo que se dejará de recaudar por impuestos de tarifas “seguramente oscilará los 100 millones de pesos”.

Sindicatos estatales bonaerenses pararon ayer y realizaron un acto en Plaza Rivadavia para visibilizar de manera conjunta las dificultades que están atravesando como consecuencia de las decisiones del gobierno provincial, que avanza en su plan de ajuste y precarización.

En diálogo con FM De la Calle el titular de ADUNS, Sergio Zaninelli, explicó que “nosotros como docentes de universidades nacionales en todo el país iniciamos un paro por 48 horas, en este plan de lucha que afortunadamente lo venimos cumpliendo todas las federaciones docentes”.

“El reclamo en principio general es salarial. Esta imposición que pretenden los gobiernos del 15%, distribuidos en cuotas sin la opción de una cláusula gatillo de aplicación automática, algo que venimos rechazando y los gobiernos no atendiendo”.

 

Por su parte, la secretaria general de SUTEBA Bahía Blanca, Ana Canullo, afirmó que “desde el mes de febrero que empezamos a concurrir a las escuelas que vamos viendo que el ataque es sistemático, que no es casual, y esto lo vimos en: cierre de cursos, jubilaciones de oficios, muchos problemas en los cambios con las licencias médicas de los compañeros que están enfermos”.

“Hemos visto, la verdad, con mucho dolor e indignación y peleando la calle en contra de los cierre de los bachilleratos de adultos. Porque la verdad que algunas funcionarias y funcionarios hablan con eufemismos y lo que estamos presenciando lisa y llanamente es cierres de escuelas”.

Desde la Asociación Judicial Bonaerense, Claudia Barrio denunció “el trabajo insalubre que en muchos casos realizamos en edificios poco apropiados, con sobrecarga de trabajo y sobrecarga de horas. Hay compañeros y compañeras que trabajan más allá de las 2 de la tarde, que se hacen cargo de sus propias viandas y que nadie les recompensa eso”.

A nivel provincial, la vicepresidenta del CICOP, Marta Márquez, explicó la situación que atraviesan lxs trabajadores de la salud bonaerenses: “Volvemos a parar exigiendo llamado a paritarias a los profesionales de salud de la provincia de Buenos Aires, que es una paritaria que está vencida desde diciembre de 2017 y no hemos tenido una sola convocatoria para discutir salarios y para discutir las gravísimas condiciones en las que está el sistema de salud de la provincia de Buenos Aires”.

 

“Podríamos hacer una larga lista de deficiencias a cual más grave y a cual más preocupante. Y además, venimos padeciendo la falta de profesionales en muchos hospitales de la provincia de Buenos Aires con servicios cerrados o semicerrados, algo directamente relacionado con los bajos sueldos y las malas condiciones en las que trabajamos”, aseguró.

(Por Alejandro Olmos Gaona) Es suficientemente conocida la relación que tuvo la Argentina con los organismos internacionales de crédito. Hay que estar viviendo en una dimensión distinta de la realidad para dudar de la complicidad operativa de los organismos multilaterales (FMI, BM y BID) con los grandes grupos financieros internacionales. El Plan Brady es un ejemplo de cómo colaboraron para salvar a los bancos, y liberarlos de créditos presumiblemente incobrables, articulando toda una estructura que fue impuesta en casi todos los países de Latinoamérica, a principios de la década del 90, mediante la cual además de incrementar el endeudamiento externo, permitieron comprar empresas públicos a precios irrisorios, lo que determinó en la Argentina, un desguace integral del Estado.

Aunque, este organismo multilateral, es solo en apariencia una institución que se dedica a la cooperación monetaria, en realidad tiene una estructura y un poder mucho mayor aún que un estado soberano. Si bien el FMI no tiene regulada ni establecida ninguna responsabilidad internacional por las acciones que realiza, es el que decide y consolida espacios de poder a través de la maniobrabilidad del dinero recaudado en los estados tributarios del sistema, generando un esquema plutocrático sin ninguna bandera ni frontera específica, que ha manejado los esquemas económicos del mundo entero, mediante la eufemística justificación de la existencia de un mundo globalizado, donde la interdependencia de los estados hace posible el funcionamiento de estos mecanismos de control. Si se recorre el documento donde está establecido su funcionamiento, se podrá ver que goza de todo tipo de inmunidades, aún respecto de la acción que puedan ejecutar gobiernos que eventualmente se sientan damnificados por alguna decisión de su directiva.

El resultado de la aplicación de estos programas de ajuste determinó durante la década del 90 el notable deterioro de nuestra calidad de vida, que se vio involucrada en medio de un sistema en el cual los indicadores de crecimiento de la productividad, la generación de empleo y los índices económicos en general mostraron una abrupta e indetenible caída. El sueldo real de los trabajadores disminuyó, al producirse recortes de salarios, mientras se flexibilizó la legislación laboral para permitir que el empresariado nacional y extranjero manejara discrecionalmente el empleo, sin limitaciones de carácter legal que pudieran encarecer lo que ellos llamaban sus costos de producción. Se redujeron los servicios sanitarios y educativos; reaparecieron con más fuerza las llamadas enfermedades de la pobreza (dengue, paludismo, cólera, etc) y aumentaron los precios de los servicios básicos (luz, agua, teléfono, combustibles, gas) debido a los procesos de privatización. Hubo una apreciable transferencia de recursos a la economía informal, como consecuencia de los despidos o en razón de la falta de puestos de trabajo, lo que determinó un auge exponencial del cuentapropismo. Creció la desocupación, la subocupación y los contratos laborales “basura”.

Pareciera que, pasan los años, y se repiten los mismos esquemas de auxilio financiero, ante crisis repetidas, y discursos mentirosos de una transparencia que no existe. El presidente Macri, dijo hoy que siempre habla con la verdad, pero la realidad que puede observarse muestra que su discurso resulta insostenible. La recurrencia al FMI, es un salvataje, porque las reservas del Banco Central están comprometidas, y la llamada “prevención” del auxilio financiero, no es tal, sino contar con dólares que ya no pueden obtenerse de los grandes bancos, cuyas ganancias han crecido exponencialmente y lo siguen haciendo

Los datos de la realidad son preocupantes:

En el presupuesto 2018 hay vencimientos por 1.284.400 millones de pesos y se contempla emitir nueva deuda por 2.180.700 millones, lo que significa un endeudamiento nuevo equivalente a 46.200 millones de dólares.

La deuda creció en el año 2016 34.500 millones de dólares, 38.200 en el 2017 y sumada la nueva deuda prevista en el Presupuesto el endeudamiento neto llegaría a los 119.000 en tres años. La dictadura en 7 años, elevó la deuda de 8.000 a 45.000 millones de dólares, que actualizados estarían en el orden de los 70.000 millones.

Colocar la deuda prevista este año 2.180.700 millones de pesos (113.000 millones de dólares) significa un promedio 6.000 millones de pesos por día y 250 millones de pesos por hora.

A diferencia del capital refinanciado, los intereses se pagan y son parte muy importante del gasto público, y lo que no se puede pagar se capitaliza por anatocismo. El año pasado estaba previsto pagar 247.600 millones de pesos, pero la cifra se elevó a 320.000 millones de pesos. En el presupuesto 2018 se prevé pagar 406.500 millones de pesos, lo que significa casi 21.000 millones de dólares solamente de intereses.

El pago de los intereses de la deuda es el que tiene mayor ritmo de aumento interanual 28.0% en el 2018 contra un promedio del gasto público primario (sin contar los intereses de la deuda) del 16% del 2017

El pago por intereses constituye el 14% del gasto público total, pero representa el 28.3% del gasto de la Administración Central.-
Las corridas de los últimos días se produce pocos días antes del mega-vencimiento de Lebac a renovar por el BCRA el Martes 15.5 por 680.000 M$ (Millones de Pesos), que representan el 55 % del stock total de estas letras (1.3 B$-Billones de Pesos). No está demás apuntar que ante la suba de la tasa de política monetaria, vamos a tener que pagar más de 400.000 millones de pesos de intereses de las Lebac durante el 2018.

La Política institucional de compra de Reservas con Deuda Pública – la deuda cuasi-fiscal del BCRA por Lebac – que fue utilizada en gran escala por la administración Kirchner y que ahora ha sido potenciada hasta límites inmanejables por la nueva administración se ha convertido así en el agujero negro de las finanzas del Estado Argentino, con consecuencias difíciles de dimensionar y que pueden llevar nuevamente a la Nación a una crisis de la deuda, al no poder afrontar sus obligaciones.

Los 30.000 millones de dólares, que posiblemente aportaría el FMI, es casi lo mismo que las Lebac que vencen el martes 15, y veremos que ocurre con su refinanciación.

Pareciera una constante de la dirigencia política actual y la de anteriores gobiernos, ocultar al pueblo lo que negocian en secreto, aunque después las consecuencias de lo que acuerdan deban ser asumidas por toda la comunidad. A esto se suma la hipocresía de referentes del gobierno anterior, que se han olvidado de lo que acordaron con los organismos internacionales, mientras pronunciaban encendidos discursos criticando sus acciones.

Dos ejemplos puntuales: 1.- El 31 de agosto del año 2011, la ex presidente Cristina Kirchner, solicitó al Congreso autorización para capitalizar al BID en 7525 millones de dólares, los que serían pagados en cinco cuotas diciendo que el BID tenía entre sus metas “el logro de una mayor equidad social y la reducción de la pobreza en los países de menor desarrollo de América latina y el Caribe y, asimismo mediante el fortalecimiento de las operaciones de cooperación técnica y productos no financieros a países, reforzar sus estructuras institucionales” La necesidad de esa capitalización, tuvo origen en una serie de operaciones del BID, que le significaron importantes pérdidas debido a inversiones especulativas en hipotecas subprime., y su capital operativo disminuyó considerablemente. 2.- El 21 de febrero de 2013, Cristina Kirchner volvió a solicitar la autorización del Congreso para elevar la cuota de la Argentina en el Fondo Monetario Internacional en Derechos Especiales de Giro (DEG) en 3.187 millones, eso determinó que la Argentina debió pagar el equivalente a 1600 millones de dólares en DEG para esa capitalización de la cuota de la Argentina. En ese proyecto la Sra. de Kirchner decía que el FMI tiene entre sus objetivos “ fomentar la cooperación monetaria internacional, facilitar la expansión y el crecimiento equilibrado del comercio internacional, fomentar la estabilidad cambiaria, coadyuvar a establecer un sistema multilateral de pagos y poner a disposición de los países miembros con dificultades de balance pagos los recursos de la institución”

Un dato importante, que generalmente se soslaya, es que este descomunal endeudamiento, es de responsabilidad compartida entre el gobierno y la mayor parte de la oposición que votó favorablemente las leyes de presupuesto del 2016 hasta hoy, incluida la ley de pago a los buitres.

Como siempre lo he sostenido, una es la retórica declamatoria de los gobiernos que dicen una cosa y hacen otra, lo que se contrapone con los datos que surgen de lo que finalmente se acuerda y nadie se entera, como pasó con el acuerdo firmado con el Club de París por el ex ministro Kicillof, que reconoció una deuda que en un 60% era de la dictadura militar para compra de armamentos e importaciones no declaradas. En estos temas, nadie puede tirar la primera piedra, porque todos han sido parte del reconocimiento de una deuda fraudulenta que NINGÚN GOBIERNO QUISO INVESTIGAR, y seguimos pagando las consecuencias.

En el último informe del FMI, se deslizaron los ajustes que debía hacer el gobierno, ahora se van a ejecutar férreamente. Ya observaremos las consecuencias que pagaremos todos los argentinos, excepto el sector privilegiado que gobierno, cuyos fondos están debidamente protegidos en el exterior.

Así lo confirmaron desde el frigorífico en la carta abierta que publicaron, donde narran los logros de los últimos años y las deudas adquiridas de la gestión anterior. Orlando Acosta, integrante de Incob, se refirió sobre el tema en FM De la Calle:“la AFIP toma una medida que pone en jaque el trabajo cotidiano. […] Es como que te embarguen el 100% del sueldo pero igual tener que pagar luz, gas, y comer”. El viernes a las 10 se manifiestan frente a la dependencia de San Martín al 100.

“Todos estos logros se ven en peligro por una decisión arbitraria y maliciosa –que podría dejar a 67 familias en la calle– por parte de AFIP, quien ha tomado la decisión de embargarnos los clientes por medio del Fisco Nacional, prohibiendo el pago de las cuentas corrientes a la empresa, teniendo estos que depositar el dinero en una cuenta del Banco Nación”, reza el comunicado.

Acosta aseguró “no teníamos noción de que existía la deuda” sino que se anoticiaron cuando cambiaron de autoridades y removieron a Enrique Garaggiola (ex presidente) de su cargo. “Si bien reconocemos la deuda, estamos denunciando que hubo ex funcionarios -que ya no están mas en la AFIP- que fueron copartícipes de esta situación. ¿Cómo puede ser que una empresa que no paga retenciones, haya trabajado durante diez años sin tener una sola inspección? ¿Cómo nunca llegó una multa?”

También explicó que con la nueva dirección de AFIP, “los que ingresaron vieron que INCOB no pagaron retenciones durante 10 años y entraron con los tapones de punta. […] Acá no hubo dialogo, la AFIP no tuvo el tupé de decir ‘muchachos le vamos a embargar los clientes’. […] La forma de subsanar esto es que paguemos pero ¿qué vas a hacer con esta falta que hubo de los ex funcionarios que participaron?”

Esta misma deuda están negociando hace tiempo en la Legislatura y tiene media sanción en la Cámara de Diputados. Al respecto, el integrante del frigorífico dijo: “Buscamos la condonación de la deuda o algún tipo de facilidad de pago, teniendo en cuenta que en algún momento el estado fue responsable (porque los funcionarios eran nacionales). Además se pide que se investigue el caso de INCOB. […] Conocemos varios senadores y diputados de Bahía Blanca, y los diputados se han puesto la situación al hombro”, pero por el lado de los senadores les “está costando muchísimo, es imposible encontrar un senador”.

En relación al tarifazo reveló que han sabido organizar la parte administrativa “para que estos tarifazos no impacten en el precio de la carne. Hace un año y medio que la carne no tiene aumento, esta semana aumentó por el dólar y es mentira porque no manejamos la carne a precio dólar si es para consumo interno”. Sin embargo los costos por la energía eléctrica se perciben, mientras que en octubre de 2016 pagaban alrededor de $20.000 pesos, “hoy estamos a $220.000 y este aumento nos lleva a $350.000”.

“Si INCOB cierra sus puertas tienen que tener noción que en Bahía solo hay dos frigoríficos que abastecen la ciudad. Viñuela estaba trabajando al máximo –igual que INCOB– y no tiene la posibilidad de abastecer el 50% de la ciudad como hacemos nosotros; eso provocaría un efecto dominó a las otras carnicerías que se van a quedar sin productos”.

(Por Astor Vitali) El pedido del presidente Macri al Fondo Monetario Internacional se presenta como un “retorno” al FMI (del que Argentina no se había ido). La decisión se da en un contexto de inestabilidad monetaria y sensación de falta de manejo económico por parte del gobierno.

La semana pasada, antes de la suba del dólar, hubo ganadores. Porque hubo “informados” que se la llevaron antes de la suba. Y por supuesto la especulación financiera maneja sus recursos al respecto.

Desde el punto de vista político, hablar del “retorno” al Fondo tiene alto impacto simbólico y práctico. A nadie se le escapa que pedir, mucho más en un contexto desfavorable, implica someterse no solamente a los monitoreos del organismo de crédito internacional sino además a imposiciones de recorte de gasto público.

Cuando se achica el gasto público se ve afectado el sector de jubilados y jubiladas que representa casi un tercio del llamado “gasto público” (inversión social). Que nadie se llame a engaño, eso lo van a pedir. La apuesta de obra pública con la que el gobierno pensaba inyectar dinero a la economía viva también será restringida para garantizar los objetivos fiscales, como ya anunciaron. A esto hay que sumarle la caída de consumo empujada por la realidad inflacionaria que superará ampliamente las proyecciones del gobierno (15 por ciento).

Desde el punto de vista económico implica hipotecar recursos futuros que no podrán ser utilizados para necesidades estratégicas. Implica ganancias para especulación y recesión para la economía real.

Mientras tanto, el Congreso es el escenario del show de las piedras cruzadas. De un lado ssacuden contra las políticas económicas que claramente castigan a los sectores populares y de otro hablarán de irresponsabilidad y desestabilización. El espectáculo se transmite en vivo y en directo.

Lo cierto es que, salvo que al gobierno se le vaya todo de las manos, las cartas de Cambiemos no están echadas y aún tienen margen para tomar todas estas medidas en un año no electoral como este y luego intentar promover una recomposición de la imagen de gobierno o hacer jugar a La reina. La oposición tiene lugar para tirar piedra pero sin lastimar fatalmente porque aún no están reunidos los consensos necesarios para oponer alternativa a la gobernabilidad del Pro y sus secuaces radicales (una banda nociva y consumida por el rencor).

En este contexto, muchos dirigentes gremiales obsecuentes aceptaron una pauta del 15 por ciento sin cláusula gatillo. El 15 por ciento ya es historia. Las masas asalariadas pierden este año como lo vienen haciendo desde el comienzo de la gestión macrista. Pero hay que estar alertas porque esos dirigentes ya pierden credibilidad rápidamente. Pasan cosas por debajo de la superficie burocrática del sindicalismo argentino.

En el medio, hay una Historia de la deuda con idas y vueltas. Entre los endeudamientos y el “desendeudamiento” que fue presentado como una gesta heroica y soberana, los recursos públicos y privados no fueron nunca a financiar un programa de crecimiento basado en la industria y el empleo estable. Nunca recursos hacia un proyecto que no dependa de los menesteres internacionales. Ayer Macri lo dijo sin rodeos, “Argentina depende mucho de la financiación extranjera”. Gana un modelo estable de especulación financiera y el trabajo precario. Por goleada.

Entre endeudamientos y “desendeudamiento” hay un juego complementario con la pelota manchada de sudor y sangre. En ese juego son delanteros senadores, diputados, concejales, gobernadores, jueces, fiscales y funcionarios de toda calaña. A veces en la defensa y a veces de volante van los medios de comunicación hegemónicos que siempre la patean al córner de la superficialidad del debate y jamás se meten un gol en contra.

De espectadores, que a veces gritan y a veces no, va una tribuna plagada de los que nunca juegan. De los que la van pasar. Pero estos son los que pagan la cuota para saldar las deudas del Club.

Hay que parar la pelota. Hay que parar la pelota porque siempre la patean los mismos y nunca la tribuna hace la jugada táctica para romper el juego perverso entre endeudamiento y “desendeudamiento”.

Hay que hacer un equipo verdaderamente popular. Los y las de abajo no están jugando pero son los que sufren la derrota. Siguen pasivos en la tribuna, expectantes de que el equipo de sus amores pateé bien, que jueguen por la camiseta. Pero su equipo ahora juego por el campeonato, ya no por la camiseta.

Mientras que en el campo de juego siempre estén los mismos, podrá haber cambio de equipo pero la jugada será la misma.

El problema de la dependencia de la especulación (es decir, la desinversión sistemática y el saqueo de recursos) es estructural. Con esos jugadores no se puede jugar ni un amistoso. Ellos sí tienen puesta la camiseta.

No alcanzó ni alcanza con mandar al FMI al descenso. Siempre pueden volver. Hay que sacarles la roja.

Desde la Central de Trabajadores de la Argentina-Autónoma (CTA-A) rechazaron la decisión ya “que recurre a viejas recetas que nos han dado resultados trágicos en el país. Hacemos responsable al Presidente de la Nación y a su gabinete por esta decisión que ha generado estragos en la economía y en la calidad de vida”, manifestó el secretario general Pablo Micheli en FM De la Calle.

“No es casual que hace unos días el presidente se haya reunido con Cavallo y termine tomando esta decisión”, y reiteró que “la gente sabe que no es bueno que el país se endeude de esta manera y que el FMI tome el control: que genera pobreza, pérdida de puestos de trabajo, más dominación. […] No compramos el discurso de que es una versión distinta del FMI y nunca creímos las recetas del Fondo Monetario”.

Desde el mediodía se debate en la cámara de Diputados los proyectos de la oposición para retrotraer los precios de los servicios, al respecto Micheli advirtió: “Si el presidente llega a vetar el dictamen favorable a parar este atropello (las tarifas de gas y luz) no va a ser igual que con la ley antidespidos –que quedamos las dos CTA–, va a haber un paro general de todas las centrales”.

Sobre los tres aspectos que se desglosaron de la reforma laboral, desde el gremio analizaron que las consecuencias para lxs trabajadorxs son “gravísimas”. “El tema de crear un fondo de cese de empleo, que de nuestro bolsillo salga el fondo de indemnización, es una medida de flexibilización laboral atroz. Hay irregularidades, violación a convenios internacionales, al artículo 14 bis de la Constitución, que nosotros vamos a rechazar de plano y seguramente lo hará la otra CGT y CTA también”.

Elecciones internas

Ayer cerraron las listas en todo el país, que cumplen con la paridad de género, y el 28 de junio se realizarán. Micheli aseguró que “el programa de nuestra central es conocido, actualizado en términos de la política económica y reclamos por mayor democracia y libertad sindical a los tiempos que corren. Acá no flamea bandera de ningún partido político.

“No vamos a callarnos la boca ante ningún gobierno frente a problemas con los trabajadores, injusticias, injusta distribución de la riqueza, ataque a bienes comunes, rechazo absoluto al fracking, a la precarización laboral, a la explotación de jóvenes y mujeres. […] Siguen siendo nuestros principios y vamos a seguir en la calle peleando contra esta política económica. Nuestro lema central es: sin unidad no tenemos destino (no sólo en la CTA sino los trabajadores del pueblo argentino)”.

Manifestó Walter Uranga, presidente de la institución, luego de una denuncia anónima que alertó a los inspectores municipales y que concluyó con el labrado de un acta. “No tengo quejas sobre los agentes, vinieron a cumplir con su deber, también quisieron ingresar a la casa del denunciante y no les permitió pasar para medir si los decibeles se excedían de lo permitido.

“Labraron un acta y paramos porque no queremos que nos clausuren el lugar. Esto no es un boliche bailable, es un lugar que cedemos a la cultura. […] Los recitales son “solo los sábados de 21.30 a 0 horas, no queremos funcionar como un boliche. Esto nos permite construir, es nuestro único ingreso y así les pagamos a los albañiles, no recibimos subsidio de nadie”, dijo Uranga en FM De la Calle.

El Sixto Laspiur “está abierto a cualquier tipo de expresión cultural y justo nos tocó este mal momento de decir ‘no podemos seguir y apelamos a la buena predisposición de las autoridades’” (actualmente les piden una habilitación que no pueden afrontar económicamente).

“Tenemos apoyo de un montón de gente pero en la Municipalidad no nos han atendido […] Espero que nos escuchen, no pedimos nada solo queremos hacer lo nuestro sin molestar; si hay que arreglar algo para que no genere ruido o molestia a alguien, estamos dispuestos”. Y reiteró que “estaría bueno que el estado nos escuchara. Generamos cosas hace 12 años, tenemos baby fútbol con más de 800 chicos y no tiene la repercusión que debería tener”. También brindan un taller de poesía –que aún no comenzó– a cargo de Álvaro Urrutia y Osvaldo Costiglia, y quieren seguir con el proyecto de la escuela de artes gráficas.

La idea surge de la experiencia que Walter tuvo en La Piedad: “Estábamos a punto de empezar la secundaria y jugando en la cancha de Laspiur, un compañero comentó que había entrado en La Piedad y que había imprenta, tipos móviles. Yo que siempre fui mal dibujante vi mi oportunidad de expresarme a través de letras de molde, letras de plomo y madera. […] Están surgiendo escuelas porque es un oficio lindo y la idea es que no se pierda. Es un trabajo que viene de hace 500 años”.

Señaló que cuentan con las maquinarias necesarias “gracias a la grandeza de los gráficos que nos las han dado o vendido a muy bajo precio”, y que lo mismo ocurre con la infraestructura, “teníamos pensado seguir adelante pero nos prohibieron los recitales, llegamos al encadenado de un salón de 18x5mts sumado a lo que ya tenemos”. Además, están en contacto con Fabián Castro, del Sindicato Gráfico Sureño, intentando hacer un convenio “para que vengan jubilados gráficos a dar una mano con los futuros alumnxs, que se genere un espacio descontracturado pero con la disciplina del aprendizaje”.

Finalmente agradeció “a la gente del rock, rock pesado, trash”, y comentó que la banda Asacris se reunió para tocar en el Sixto Laspiur, “fue un reencuentro de distintas generaciones. […] Esto me da un impulso para luchar, los rockeros de Bahía son gente bárbara, colaboradora, y se lo merecen”.

El economista y doctor en Ciencias Sociales, Julio Gambina, analizó én FM De la Calle las medidas económicas del gobierno que encabeza Mauricio Macri.

“El resultado concreto es un ajuste muy fuerte sobre los ingresos de la mayoría de la población. El resultado es la consolidación de una devaluación del orden del 27% entre el valor del dólar a diciembre y el valor del dólar a la actualidad. Eso tiene mucho más que ver sobre la perspectiva de inflación que empieza a dar vuelta sobre cuanto será la evolución de los precios este 2018”, afirmó.

“El primer impacto es que esto es un ajuste para la mayoría de ingreso fijo en la Argentina sean los que perciben salarios, jubilaciones o planes sociales e incluso el sector empresario que le vende a esos sectores de ingresos fijos. Y por lo tanto, acá hay grandes ganadores que son los grandes productores y exportadores tanto del agro como de la industria e incluso sectores especuladores”.

Gambina planteó que “el gobierno está haciendo todo lo posible para que no llegue a buen puerto la iniciativa (contra los tarifazos) en el Parlamento. De todas maneras tiene el presidente, la posibilidad del veto total o parcial. El límite lo veo mucho más en el conflicto de la sociedad que, en lo que se pueda hacer desde el Parlamento. Ni que hablar de la reforma laboral”.

“A un tema que hay que prestarle atención es a la conflictividad social. Hay mucha conflictividad social en la Argentina no, suficientemente articulada por eso es que se demora la medida de un paro nacional. Cuando yo digo que hay mucha conflictividad basta con ver lo que ocurre cotidianamente. Recientemente, el primero de mayo, una cantidad importante de actos pero claro, al mismo tiempo desarticulados. O sea que, lo que muestra es un grado de fragmentación de las centrales sindicales, de las organizaciones sociales y territoriales”, manifestó.

El Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán aprobó días atrás una ordenanza que dispone vedar todo tipo de acción que tenga por objeto la interrupción legal del embarazo, declarando además a la ciudad como “defensora y promotora de la vida, desde la concepción humana en el vientre materno hasta su muerte natural”.

Desde la fundación tucumana Mujeres por Mujeres, alertaron que dicha norma va en contra de la constitución y es por ello que FM De la Calle conversó con Noelia Aisama, abogada e integrante de la misma.

“Claramente (el Concejo), está exhortando a toda la comunidad de San Miguel desde el ámbito profesional, como también al poder de justicia, al Poder Ejecutivo que quien quiera implementar en el caso positivo de que se legalice el aborto en Argentina la obstaculización de que efectivamente este derecho se garantice para las mujeres”.

Consultada sobre cómo funciona dentro la interrupción del embarazo en los términos que plantea la legislación actual, comentó que “es importante destacar que somos la única provincia a nivel nacional que no está adherida a la ley 25.673 que es de Salud Sexual y Procreación Responsable, por lo tanto, tenemos un primer obstáculo para poder efectivizar la garantía al acceso a la salud sexual y reproductiva de las mujeres. Por otro lado, también somos una provincia donde no se está aplicando la Ley de ESI, de Educación Sexual Integral. Por lo tanto, en términos de efectivización de derechos tenemos esos obstáculos”.

“Desde la fundación y con Católicas por el Derecho a Decidir hemos realizado un monitoreo social sobre el acceso a la salud de las mujeres donde, no solamente hay un nivel de desinformación de las usuarias de la salud en términos de derechos de los pacientes, sino también que tampoco hay desde el ámbito de los profesionales de salud en poder informarles y garantizarles todo lo que tenga en materia de derechos sexuales y reproductivos”, agregó.

Ordenanza 3Ordenanza 4

Daniel Yofra, secretario general de la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmontadores de Algodón y Afines de la República Argentina, se refirió al respecto en FM De la Calle. “Lo único que pretendemos es tener una vida digna”.

El gremialista no quiso comentar sobre el porcentaje de aumento: “La mayoría de los trabajadores no sabe cuánto tienen que cobrar, se habla del 15% o 20%, si la inflación futura o pasada, nadie habla de lo que necesita un trabajador. El 50% de los trabajadores del país cobra menos de $15.000 y por más que le agregues 15% o 20% sigue siendo un trabajador pobre, esa es la discusión que hay que dar”.

“Siempre tratamos de ser serios en esa apreciación, lo que importa es cuál es la política salarial. Los trabajadores deben saber cuánto tienen que cobrar para vivir dignamente y no es un porcentaje, sino la cifra necesaria para cubrir las necesidades que establece la Ley de Contrato de Trabajo y la 14 bis”.

En una negociación paritaria hay dos temas a tener en cuenta: cuánto tiene que ganar un trabajador, y si las empresas lo pueden pagar o no. Según Yofra “aquellas empresas que dicen que no lo pueden pagar tienen que demostrar con los balances que efectivamente no lo pueden hacer. La ley prevé que los empresarios muestren los balances”.

En relación a lo comentado previamente, el gremialista mencionó a la empresa Cargill como un “caso emblemático”, “no sólo en su ciudad sino las de todo el país han facturado $52.000 millones de pesos. Que una empresa de esas venga a plantear que no puede pagar son excusas. Despidieron a 45 trabajadores como si fueran baterías… ‘no me sirven más, las cambio y se terminó’. Se encontraron con un gremio que pelea por los trabajadores”.

Respecto a los tres aspectos de la reforma laboral que ingresaron al Senado manifestó que tienen una “postura contraria; son todas en contra de los trabajadores, de los derechos, de la posibilidad de progresar. Es una ridiculez que se imponga esas leyes y no se debatan con los verdaderos interesados, los trabajadores”.

“Hay que prestar mucha atención porque ya en algunos convenios se ha modificado la baja flexibilizándolo y los gremios fuimos cómplices, muchos se han flexibilizado. A nosotros una de las condiciones que nos dieron fue esa misma y no lo hemos permitido. Si quieren modificarlo no tenemos problema, pero vamos a imponer nuestra postura para cambiarle la calidad de vida a los trabajadores”.

Más declaraciones del secretario general de la F.T.C.I.O.D y A.R.A.

  • “Este gobierno favoreció mucho a las empresas, y más de nuestro rubro. Las grandes exportadoras no pagan impuesto a la exportación y se les ha sacado algún tipo de retención.
  • Las empresas se niegan a dar un aumento a los trabajadores pero no hay una cuestión de costo laboral porque cuesta entre 0,5% y 5%.
  • El salario es uno de los puntos que nos tiene que unir como obreros. ¿Qué implica dar un buen salario? Que las empresas ganen menos, y esa es la lucha entre capital y trabajo que siempre va a existir. La diferencia es que algunos peleamos y otros no”.
  • La empresa dice que tiene derecho a despedir porque la ley así lo admite, y nosotros tenemos el derecho a huelga y paramos cada vez que despiden a un compañero. Donde los compañeros quieran parar la Federación y los sindicatos van a apoyar.

Luego de la escalada del dólar que llegó a superar los 23 pesos, el gobierno se vio obligado a salir a calmar las aguas mientras que el Banco Central efectivizó un paquete de medidas para subir la tasa de política monetaria al 40%. Eduardo Lucita, integrante del Colectivo de Economistas de Izquierda, analizó la situación en el aire de FM De la Calle.

Afirmó que el problema financiero “corrió el velo sobre la debilidad de los fundamentos del programa económico del gobierno. En esta disputa ganó el mercado internacional porque la presión fue muy fuerte luego de que Estados Unidos decidiera subir la tasa de interés”.

También aseguró que la idea que quiso dar el gobierno “es que finalmente se acabó el gradualismo. Hasta ahora era un ‘gradualismo sui generis’, porque en las tarifas se utiliza una política de shock (la antítesis). Hay una embestida muy fuerte de los poderes financieros internacionales y de los gurúes de la city de que hay que aplicar una política de shock fuerte en general”.

Sobre los dichos del secretario de Comercio, Miguel Braun -“subestimamos el pase de la devaluación a la inflación y el impacto de las tarifas”- aseveró que “se va a transmitir rápidamente a los precios –especialmente en alimentos– pero también en la industria y sectores que son importadores. Quizás en uno o dos meses también se refleje en precios mayoristas”.

Respecto a cómo afecta esto a los salarios manifestó que “el ministro Dujovne ratificó hoy que no van a mover la pauta inflacionaria del 15%. Si hasta ahora se pensaba que la pauta del 15 se iba a cumplir en agosto, y los últimos 4 meses los salarios iban a perder… van a empezar a perder desde ahora”.

Lucita aseguró que “el promedio de datos que hace el Banco Central periódicamente ya hablaba de una inflación del 20%; con la situación actual, si está por debajo del 25% hay que descorchar champagne. Los salarios si siguen así van a perder más”. Y, si bien el presupuesto plantea un crecimiento de la economía del 3.5, “varias consultoras hablan de que el crecimiento va a estar por debajo del 2; si uno no crece al 4% no crea empleo real”, indicó.

“Si un Estado –que se precie– no le mete mano a la banca y al comercio internacional, no hay forma de eludir la salida de capitales. Le pasó al gobierno anterior que controlaba el tipo de cambio y administraba reservas pero se le iban dólares por todos lados. El mercado lo doblegó en el 2014 y obligó a una devaluación que se les fue de las manos pero que pudieron recomponer por los controles estatales que tenían”, explicó el economista.

“Ahora todo el poder está en los bancos y en el capital financiero. Frente a eso el Estado es un colador, no tiene forma de controlar los movimientos. Todos los que entraron para aprovechar la bicicleta financiera decidieron irse porque Estados Unidos subió la tasa al 3% y están todos mirando para allá porque hoy se anuncia cuánto es la tasa de desempleo (si la tasa de desempleo baja, los salarios aumentan, la inflación va a aumentar y la reserva federal va a aumentar de nuevo)”.