Fue la pregunta que respondieron vecinas y vecinos de nuestra ciudad convocados por FM De la Calle para una emisión especial de En Eso Estamos en el marco del 193° de la ciudad.

Andrés Contreras, referente barrial de zona norte y trabajador de la Biblioteca Almafuerte, y Luciano, miembro del Centro de Estudiantes de La Piedad.

Leticia Batista, integrante del equipo pastoral que acompaña la organización barrial en Talleres Sur y del Colectivo Sororidad y Fe y miembros del Centro de Prevención de Adicciones.

Mario Minervino, periodista, y Silvia Pirillo, docente y conductora de “Mundos Imaginarios”.

Victoria, integrante de la Federación de Estudiantes Secundarios, y Néstor de la Iglesia, periodista y locutor.

La abogada Mónica Fernández Avello avanzó esta semana en su alegato contra cuatro ex miembros de la Triple A bahiense. Afirmó que negar la existencia de la banda parapolicial «es un insulto a la inteligencia».

Fue al considerar lo dicho por los testigos de la defensa y, en particular, por el presidente y el vice del Partido Justicialista Mario Simón y Hugo Álvarez.

«La única conclusión lógica y razonada es que dicen desconocerla porque no solamente apoyaban su ideología sino también apoyaban sus métodos. Más que una declaración ha sido una confesión y desde esta punto de vista solicito se valoren», dijo.

Los imputados son Raúl Roberto Aceituno, Juan Carlos Curzio, Osvaldo Omar Pallero y Héctor Ángel Forcelli. La letrada sostuvo que «la responsabilidad de la sociedad es decir Nunca Más» y la del tribunal «es la de sentenciarlos con la máxima pena que corresponda al delito que cometieron».

La audiencia del martes terminó de manera abrupta por un corte de internet. Su exposición continuará con el análisis de las responsabilidades penales de los acusados el próximo 26 de abril desde las 9.

«¡Están mintiendo!»

La representante de H.I.J.O.S. destacó la «falta de credibilidad absoluta de todos los contemporáneos a los hechos que manifestaron desconocer lo que era la Triple A. No solamente por la magnitud que tuvo esta organización criminal -estamos juzgando una parte de los hechos porque la realidad es que son alrededor del doble- sino porque era imposible vivir en Bahía Blanca y no haberse topado uno o sus conocidos en algún momento con estos delincuentes».

La militancia política no era necesaria para saber lo que hacían: «Andaban en la vía pública haciendo ostentación de armas, en bares, en whiskerías, en restaurantes, cafés. Eran visibles para todos nosotros aunque no supiésemos sus nombres o no los pudiésemos identificar por su cara. ¿Cuál es la valoración que hago de esos testimonios? ¡Están mintiendo!».

La querellante se preguntó por el motivo de estas declaraciones que se podrían haber amparado en el señalamiento de represores que murieron impunes. «Hasta podrían haber dicho ‘yo estaba de acuerdo con la ideología de la Triple A pero no con sus métodos’. Pero ¿desconocer qué existían? Es un insulto a la inteligencia».

«La única conclusión lógica y razonada es que dicen desconocerla porque no solamente apoyaban su ideología sino también apoyaban sus métodos. Más que una declaración ha sido una confesión y desde esta punto de vista solicito se valoren».

Fernández Avello recordó que en el debate «vimos la declaración del presidente y del vicepresidente de un partido democrático», en referencia a los líderes del Partido Justicialista local Mario Adalberto Simón y Hugo Héctor Álvarez.

«Repito: acá no solamente estamos juzgando casos lejanos y pensamos que nunca más van a ocurrir. No, señores jueces, esto puede volver a ocurrir. Ya he explicado cómo el gobierno anterior comenzó este circuito de inteligencia nuevamente para espiar y perseguir, incluso a mis patrocinadas, H.I.J.O.S. Bahía Blanca. ¿O acaso no vimos todos y todas por televisión en una manifestación bolsas de polietileno negro, simulando mortajas con nombres, entre otros el de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo? ¿No vimos en una manifestación anterior que iban con horcas? ¿O acaso no hay una guerra judicial que ha destruido el Código Penal y la Constitución?».

La querellante advirtió que «en cuanto se les da una mínima oportunidad comienzan a rearmarse» y que no es una cuestión de nombres: «López Rega no está, Ponce no está, pero dejaron sus retoños».

Un único objetivo

Fernández Avello precisó que, a diferencia de los militares que intentaban excusarse en el cumplimiento de tareas ajenas al terrorismo de Estado como la hipótesis del conflicto con Chile, el único objetivo de la Triple A fue la eliminación de enemigos políticos. «Pertenecer era formar parte de los ejecutores porque, como ha quedado probado, la inteligencia correspondía a distintos organismos del Estado».

«Si bien es verdad que salvo el caso de Aceituno -que se lo ubica caminando con los Argibay cuando asesinaron a Cilleruelo- el resto solo va por la asociación ilícita, para esta querella todos y cada uno son responsables de todos los homicidios, privaciones ilegítimas de la libertad, torturas, robos, amenazas y daños ocurridos en aquella época porque con su aporte a la organización criminal permitieron que estos delitos se hagan posibles», afirmó.

Lesa humanidad

La abogada sostuvo que la tesis principal de la causa es que los hechos «son delitos de lesa humanidad porque la Triple A recibió el aporte del Estado para realizar sus crímenes. Esto lo vemos claramente porque cuando este aporte cesó, cesaron los crímenes de la Triple A que pasaron a manos de las fuerzas armadas».

«Digo Estado en un sentido amplio del término, sea de las fuerzas de seguridad con sus zonas liberadas, de la justicia no investigando, las fuerzas armadas haciendo inteligencia, la Universidad Nacional del Sur pagándoles un sueldo y permitiéndoles usar sus vehículos», concluyó.

El periodista Emilio Ruchansky repudió la persecución del fiscal Mauricio Del Cero hacia personas que cultivan y consumen cannabis. Esta tarde participará en una charla con familiares de los jóvenes de Puán detenidos por supuesto narcotráfico.

“Desde el caso Moscoso en adelante ha tenido un accionar sospechoso encubriendo a la policía, uno ya no sabe si es porque desconoce en materia de drogas o porque responde directamente a lo que le pide la policía”, dijo el editor de THC a FM De la Calle.

Agregó que “sorprende el grado de desconocimiento sobre la planta de cannabis, encontré fotos de ramas, hojas, que eso no se utiliza pero te lo pesan y te lo cuentan. Sale en los medios hablando que decomisó kilos y kilos y a veces son plantas que ni siquiera llegaron a florecer, no hay ningún material estupefaciente”.

Ruchansky explicó que “si bien sigue siendo delito cultivar y consumir, en Mar del Plata, por ejemplo, si te encuentran con drogas para uso personal te las decomisan pero no te llevan a una comisaría ni te forman causa. Acá hay políticas criminales que podrían decir: no voy a saturar las fiscalías con personas que consumen”.

“El fiscal general de Bahía (Juan Pablo Fernández) bien podría tomar una política más inteligente, si bien se trata de respetar los derechos de las personas hay un idea de eficacia y economía”, señaló el integrante del Acuerdo por la Regulación Legal del Cannabis.

Uno de los pioneros en adoptar esta alternativa no punitivista fue el juez necochense Mario Juliano, quien falleció el año pasado.

“Se puso a investigar cuánta plata se gastaba en perseguir a las y los jóvenes y se dio cuenta que se era muchísimo dinero para algo que no tenía sentido. Había un hostigamiento directo a la gente que estaba en la calle, gastando dinero por algo en lo que no hay víctima. Si tengo un porro en el bolsillo es un delito sin víctima, en todo caso el daño me lo hago yo pero no a los demás”, dijo el autor de “El Cogollero Gris”.

“Juliano forzó una audiencia donde la policía pidió disculpas por el accionar violento. Insisto: podés sacarle la sustancia pero de ahí a detenerla, a armarle una causa, es mucho. Quiero dar este mensaje: se pueden cambiar las cosas, incluso sin tener una nueva ley, que la necesitamos y la Corte la pidió, se puede por lo menos tener otra política criminal”.

Por otro lado, mencionó que “el gobernador Kicillof mandó un proyecto que crea una Agencia Provincial de Cannabis y que obliga a funcionarios a tener buenas relaciones con la comunidad cannábica”.

“Quedó demostrado, por experiencias de otros países, que si uno legaliza y regula el consumo de cannabis no pasa nada. La ministra de Seguridad, el ministro de Educación, el Ministerio de Salud han trabajado en generar acceso al cannabis medicinal. Hay un clima favorable, es un año electoral, es complicado meter temas así. Creo que hay mirar los cambios en EE.UU. porque es el país de donde parte todo el prohibicionismo”, propuso.

Ruchansky integrará el panel que sobre “Criminalización de la juventud, política de drogas y derechos humanos en contexto de Covid” coordinado por la Cátedra de Educación y Derechos Humanos de la UNS. La charla virtual será a las 19 por zoom.

Si bien el aniversario de Bahía Blanca nos remite a la fundación de la Fortaleza Protectora Argentina, la historia de nuestro territorio incluye a los pueblos que fueron masacrados durante la constitución del Estado argentino y que hoy, poco a poco, reconstruyen su identidad.

“Conocer la historia, aceptarla, aceptar los hechos de sangre ocurridos y el lugar que ocuparon los pueblos originarios” es un primer paso hacia una ciudad intercultural, dijo la docente e integrante de Kumelen Newen Mapu, Daniela Canullán, a FM De la Calle.

Agregó que “primero hay que hacer este recorrido histórico y hay que hacer lecturas. La posibilidad de la interculturalidad tiene que ver con un mirar hacia el pasado y ahí vamos a ver una ciudad en la que confluyan distintas culturas. Se puede dar pero falta un recorrido más profundo de las instituciones”.

Canullán es docente de Literatura en escuelas secundarias, a partir del Programa de Educación Intercultural se reencontró con sus raíces mapuches y decidió recuperar la historia familiar.

“Lo que me ocurre en el presente no es lo mismo que me ocurría hace unos años, cuando empecé la búsqueda de mi identidad oculta, que tiene que ver con el pueblo mapuche. Es una realidad que pasa en el presente de mucha gente, todos fuimos escolarizados en el sistema educativo nacional y hasta que no se nos abrió la puerta a nuestra cultura no hemos podido ver parte de la historia”, esgrimió la docente.

Luego de que la invitaran a participar del Programa de Educación Intercultural, Canullan indagó en su familia: “Pude ir hablando con mi mamá en ese momento, mi abuela, las personas más grandes y que han vivido esa parte de la historia e incluso en otras ciudades”.

“La ciudad es también un punto de encuentro para todas esas familias que tuvieron que  salir de su tierra para prosperar. Mis familias maternas y paternas vienen de la provincia de Rio Negro y se conocen acá. Es lo que le ha pasado a muchas familias hace 50 años atrás o más”.

“Empecé a ver otra cosa, que mi historia tenía que ver con otros hechos que no aparecían en los manuales. Ver gente que ya había hecho ese recorrido y llegó a la Kumelen Newen Mapu.  Es importante porque en soledad es difícil”, agregó.

Persiste el discurso respecto a que los pueblos originarios son historia del pasado, que no tienen presencia en la ciudad. “No solo pasa con alumnos sino con padres y madres que desconocen la fundación de Bahía, hechos como el 19 de Mayo, el mal llamado ‘Último Malón'”.

“En Bahía tenemos varios historiadores/as que han hecho un camino de regreso para mostrar ese material. Por otro lado, ese material no está tan difundido, no aparecen en el diseño curricular. Si bien ha cambiado la mirada, falta que en algunos hechos concretos haya decisiones más fuertes y amplias”, opinó Canullán.

Con motivo del 193° aniversario de la fundación de Bahía Blanca, FM De la Calle invitó a su audiencia y a tres historiadoras a reflexionar sobre procesos y protagonistas de la actualidad y del pasado que permitan pensar un futuro diferente.

Del debate participaron Fabiana Tolcachier, docente e investigadora del Departamento de Humanidades (UNS); la escritora Lucía Bianco, directora del Museo del Puerto e integrante del grupo organizador del Festival de Poesía Latinoamericana de Bahía Blanca; y Julia Giménez, licenciada en Historia, doctoranda en la Universidad Estadual de Campinas y colaboradora de nuestra emisora.

El primer eje propuesto fue: ¿qué aspectos, luchas o procesos históricos reivindican de la ciudad?

Tolcachier señaló “las tradiciones críticas, artísticas, intelectuales, en línea con espacios emancipatorios de democratización de derechos. Reivindico tradiciones omitidas como los viejos teatros racionalistas, medios gráficos, como pudo ser el periódico anarquista ‘Brazo y Cerebro’, que tuvo su edición en White y trasladó su imprenta a Villa Mitre. También existió una mujer corresponsal local del diario anarquista La Protesta, ni que hablar la trayectoria de Nuevos Tiempos con Agustín De Arrieta, intendente socialista por poco tiempo. Hubo una movida cultural, periodística y artística sumamente interesante. Para no nombrar a los lugares comunes como Martínez Estrada o la Casa del Pueblo de White”.

“En tiempos más recientes el hecho de haber sostenido un medio como el de ustedes, centros culturales como La Pana, el Festival de Poesía, en el Festival de Teatro.  Ni que hablar de nuestros escritores y espacios artísticos que tratan con mucha dificultad de sostenerse”.

Bianco dijo que piensa a Bahía Blanca “aprendiendo de ciertas características del ambiente que ocupa, en el que creció y se desarrolla la ciudad. Es un lugar de transición de ecosistema, de espinal de monte, de zona patagónica, todo en tensión, en mezcla, el estuario como un método de pensamiento. Actualmente hay un sistema de bollas, para no perderse, para llegar al puerto. Históricamente ha sido un espacio de laberintos para los navegantes que llegaban”.

La directora del Museo del Puerto afirmó que “había un formato de pensamiento muy opuesto, del que se suele hablar cuando se habla del 11 de abril, que son las grandes fundaciones. La fundación originaria, que nos dice que una ciudad se forma en pocos días con necesidad de urgencia, que es militar, que va por intereses previos. Grandes fundaciones siempre ligadas a inversiones de capital externo, a ciertos intereses que no se problematizan cuando se mira al pasado, qué y quiénes quedan afuera”.

Propuso “pensar mucho más a través de las experiencias colectivas, las resistencias y los modos de organización, qué pasa con las construcciones que tienen que ver con quienes habitan Bahía, con los intereses nacionales e internacionales, qué pasa con la sociedad, con lo que hace o no llega a hacer”.

Por su parte, Giménez destacó que “hay dos puntos que dialogan con lo que decían Fabiana y Lucía. Pensar a Bahía como un espacio de llegada, de estar, que es un punto geoestratégico, nos explica tanto ese proceso de acumulación, el espacio de violencias que hace el proceso fundacional que está bautizado a partir de la sangre de nuestros pueblos originarios, atravesado por la llegada del ferrocarril, con una integración desigual”.

“Es un lugar de tránsito muy anterior a la llegada de ese capital extranjero pero si una se pone a pensar en las formas violentas en las que se van imponiendo las lógicas del capital en el Sur-Sur, también están las resistencias que van desde las más tradicionales, a la llegada de ese ejército blanco en conformación, al del movimiento obrero, y hasta el día de hoy con las resistencias culturales”.

“Bahía tiene artistas con formación crítica y con capacidad de acción y medios de comunicación, ahí podría pensarse la FM De la Calle como un proyecto de resistencia. Bahía está en el punto geoestratégico que lo hace un lugar conflictivo, un lugar de saqueos y violencias pero, al mismo tiempo, un lugar de resistencia de un pueblo”.

Si tuvieran que destacar un momento o hito histórico de nuestra ciudad, ¿cuál recordarían?

Tolcachier mencionó que “se suele pensar en el modo de representación de la construcción identitaria hegemónica de la ciudad a partir de los hitos del capital. Hay que tratar de disputar esos sentidos y usos del pasado y evidenciar que hay políticas de la memoria en función de proyectos políticos y económicos, y es el presente -y las luchas del presente- el que activa estos sedimentos y estas tradiciones”.

“Me preocupa pensar eso como si fuera el Billiken o los libros de texto. Lo que se evidencia es que la tradición histórica y la política de memoria son selectivas y entrañan una disputa”, afirmó.

Por ejemplo, en tiempos de corrección política el Municipio impulsa el cambio de nombre del Parque Campaña del Desierto y el intendente propone el nombre de César Milstein. “Recuerdo haberlo escuchado diciendo que le parecía bárbaro porque no generaba controversias. Es espantoso, lo interesante de pensar nombres y procesos históricos es develarlas. ¿Con qué Milstein nos vamos a quedar? ¿Con el del Premio Nobel o con el que se tuvo que rajar en el ’62 por la dictadura de Onganía porque adhería a una ideología libertaria?”, se preguntó.  

Bianco agregó desde Ing. White que respecto a “conflictos y momentos olvidados, no puedo dejar de mencionar la huelga de remachadores de julio de 1907 que tenía que ver con cosas muy básicas. Una etapa de las más fuertes en términos de representación. Esa etapa de la Bahía en que se extiende con el ferrocarril al puerto, insertándose en el mercado mundial, basada en la presencia de muchísimos inmigrantes que llegaban en muy poco tiempo y vivían en condiciones tremendas”.

“El conflicto que irradia este puerto llega a escalas que no son solo locales, luego una represión en Casa del Pueblo que lleva, posteriormente, a la muerte de algunos de los obreros, a una huelga general de gremios en Rosario, La Plata, Buenos Aires. Se invierte esta lógica de una necesidad que viene de afuera y nos modifica y, en este caso, cómo la organización de los más oprimidos llega a desbordar la ciudad y a unirse en un clima de época que tenía que ver con la articulación de acciones de trabajadores en distintas zonas del país. (…) Hay algo ahí que hace a la posterior organización obrera de la ciudad”.

Giménez rescató el contexto de la primera sentencia de los juicios de lesa humanidad de septiembre del 2012. “Las calles de alguna forma nos unificaron en un proceso por el que veníamos tirando varios de los sectores críticos al modelo de desarrollo como al sistema político tal como está enredado en la ciudad y la región, y también se junta con el procesos de movilizaciones en torno al dragado y que tiene que ver con ocupar las calles de forma creativa, donde hubo un proceso intergeneracional de rescates de memoria, de lucha, de aprendizajes. Esta lucha es un punto importante de partida para seguir discutiendo la ciudad”.

Y si tuvieran que pensar en una figura o persona que podría destacarse en la historia bahiense.

Tolcachier apostó por “una construcción participativa desde una política de la memoria”. Destacó al barrio Noroeste y su memoria ferroviaria “de tantos luchadores como los hermanos Mandolesi, el propio José Magnani que es recordado por la cuestión de los jubilados pero fue un militante comunista que propició una huelga tremenda porque en la década del ’30 querían poner una patente a las bicicletas y todos los obreros las usaban. A veces me preocupa achatar la historia y no abrirla”.

“Reivindicaría a militantes por la memoria la verdad y justicia, no solamente Watu que tiene una calle en el Campus de Palihue, la fecha del 3 de abril como Día de los Derechos Humanos en la UNS, pero también  a los luchadores como Ernesto Malisia, Eduardo Hidalgo, Celia Korsunsky. Fue un laburo de décadas en el peor contexto de dictadura y los primeros años post dictatoriales”.

“Y también tenemos una deuda enorme con los pueblos originarios, no hay sitios de memoria que abran e interpelen estos relatos hegemónicos del malón, Campaña del Desierto, calle Roca, 11 de abril, 19 de mayo, ese perfil de ciudad milica. Cómo pensar que Bahía tuvo otra cuestión cultural, enriquecer esta historia, interpelar este modelo civilizatorio como relato único, haría una convocatoria de abajo hacia arriba para disputar y que ellos propongan los nombres”. Por otro lado, en cuanto a la representación de las diversidades recordó a la figura de María Eva Rossi.

Bianco buscó “un nombre que lograra condensar algo de invisibilidad y de experiencias colectivas en contextos de época. ¿Se puede pensar a alguien y haya ocupado un lugar en el Estado, que haya condensado propuestas anteriores y haya abierto algo a futuro en cuanto a posibilidad de pensar diferente?”.

Eligió a Isabel Barros Taramasco, responsable del área cultural del gobierno de Juan Carlos Cabirón. “Tuvo que ver con la apertura democrática después de siete años de terrorismo de Estado. No me refiero a las consecuencias desastrosas que tuvieron sino también a los sistemas de representación que habilitaron esos 7 años y cómo se modificaron con la democracia. Algo de lo que se empezaba a armar en ese clima, no solo dentro del Estado sino en las calles y localidades como White, lo planteo más como una pregunta que podría ser un modo de pensar políticas públicas, culturales, que tengan que ver con una mirada ampliada a sectores sociales que por lo general están excluidos de una mirada de la historia”.

Julia Giménez eligió al ex fiscal Hugo Omar Cañón: “Pensé en Celia, en Marcela (García), en Susana Matzkin, y entre esos nombres Cañón es una figura que reúne esa lucha. Nos trae ese apoyo que dio por una reparación integral a las víctimas y familiares (…) una figura que se preocupó por hacer estos vínculos intergeneracionales, la solidaridad y apoyo a la lucha. Además, fue el traidor a la patria de La Nueva Provincia y eso lo reivindica como una figura que nos ha enseñado mucho”.

¿Cómo les gustaría que fuera la Bahía del futuro?

“Sueño con una ciudad donde haya movida participativa, donde se expandan democráticamente espacios, voces, medios de comunicación, donde se democraticen las instituciones, nuestras propias aulas, hay carreras como la de trabajo social que no se han podido gestar. Sueño con una ciudad que no afecte la naturaleza, fueron muy interesantes las audiencias públicas por el dragado, donde se pueda interpelar esos intereses de destrucción, con una visión más integral. Sueño con que estas audiencias públicas sean más cotidianas. Las disputas seguirán permaneciendo, es una lucha bastante desigual donde los intereses están muy aglutinados y los sectores de resistencia nos dispersamos”.

Bianco deseó “una ciudad que nos pueda interpelar y aglutinar, algo que interpele a intervenirla y no a dejarse llevar por estas olas de proyectos de fundación futura o de sueños de una salvación de algo de afuera, que haya algo de clima y viento local”.

Por último, Giménez imaginó una Bahía “que pueda resignificar su vínculo con la idea de progreso, que pueda generar un proyecto, una Bahía que se mire desde otro lugar, no tanto hacia Buenos Aires. Sueño con una ciudad más participativa”.

Bahía Blanca fue ratificada este martes en la Fase 4, por lo cual se mantiene sin cambios en cuanto a las restricciones horarias y de actividades. Sin embargo, en las últimas 24 se registraron 322 casos positivos de Covid 19 en línea con las cifras de la semana pasada.

“Hay un salto y se aceleró bastante. Es una barbaridad el número, es el triple de lo que tuvimos en uno de los picos que fue por septiembre y octubre”, comentó en su columna semanal de FM De la Calle el médico Horacio Romano.

En cuanto a la discusión sobre la eficacia y la eficiencia de las vacunas destacó que “ninguna tiene el 100% de efectividad excepto para casos graves. Una cosa es un Covid leve y otra un respirador, que te vacunes no significa que tengas un escudo impermeable, cualquiera de las vacunas actualmente es buena y uno tiene que aplicarse la que pueda”.

Desde la Secretaría de Salud municipal informaron que la ocupación de unidades de terapia intensiva es casi total: solo queda una cama disponible.

Romano aseguró que “el hospital está lleno, hay muy pocas camas de terapia en Bahía. El año pasado cuando arreció la primera ola nos encontró con los hospitales más vacíos porque había cosas que no se atendían, cirugías programadas por ejemplo, todavía estamos rezagados con atención de pacientes que lo necesitaban”.

Respecto a la desinformación generada a partir de las declaraciones del director del Centro Chino de Control de Enfermedades, Gao Fu, referidas a la efectividad de la vacunas, Romano afirmó que “una es Sinovac y acá se aplica la Sinopharm que no es la que se refiere este persona”.

“Cuando se leen informes se describe que fue efectiva. Esto me lleva a otro articulo español que plantea discutir en la prensa la efectividad de vacunas, como si fuera una competencia, con una lógica más de propaganda de laboratorios que de información científica”, manifestó Romano.

“La efectividad del 94% significa que la probabilidad de contagiarnos que tenemos cada uno es del 5 o 6%. Es un número que está bien, pero llevado a grandes poblaciones varía. No hay ningún estudio que compare una contra otra, las vacunas fueron hechas con distintos tiempos, Pfizer se hizo en verano de EE.UU. cuando la circulación no era mucha, AstraZeneca se hace en un pico fuerte, se prueba en muchos países y se le coloca al personal de salud con lo cual estás vacunando a gente muy expuesta”.

“Plantear que una es mejor porque tiene 94% y la otra es peor porque es de 70% es un error. Lo que se maneja es otro número: cuántos tengo que vacunar para salvar a uno. Una cosa es efectividad y otra eficacia, la primera es que algo haga lo que tiene que hacer y, la segunda, son los procesos y personas que intervienen para hacer que algo se cumpla”.

“La vacuna te protege, ninguna tiene el 100% de efectividad excepto para casos graves. Una cosa es un Covid leve y otra un respirador, que te vacunes no significa que tengas un escudo impermeable. Cualquiera de las vacunas actualmente es buena y uno tiene que aplicarse la que pueda”, dijo.

Por último, esgrimió: “Si yo fuera ministro de Salud trataría de vacunar a la mayor cantidad de gente posible, que se cuiden, cerrar lo más posible y dar la segunda dosis dentro de los 3 meses. Si algunos reciben 2 y muchos ninguna, aunque sea una sola dosis la efectividad sería del 60%. Si lo traslado a poblaciones más grandes voy a salvar más vidas si vacuno a la gente aunque sea con una sola dosis”.

(Por Astor Vitali) Cuando el equipo de producción de En Eso Estamos se reunió para intercambiar posturas respecto de qué enfoque debíamos adoptar para producir los contenidos de un programa especial en torno a la fecha que oficialmente se reconoce como aniversario de Bahía Blanca, concluimos que, en esta oportunidad, pondríamos el lente en aquellas cosas que nos enorgullecen de la ciudad.

Se sabe que los poderes político y económico de esta localidad persisten sólidamente imbricados con sectores conservadores en lo ideológico y especuladores en lo económico. Los estigmas de una ciudad que el mundo identifica con sus niveles de fascismo en ambiente constituyen los primeros elementos con los que, quien observa la ciudad, suele construir su caracterización.

Sin embargo, como contrapartida de esta realidad insoslayable, hubo y hay otra calidad de ciudadanes que conforman tejidos entrañables.

En ocasión de realizarse un acto por el inicio de los primeros juicios por delitos de lesa humanidad en Bahía Blanca, el 28 de junio de 2011, el secretario general de la CTA local, Enrique Gandolfo, dijo que, sin olvidarse de los “enemigos del pueblo” quería referirse a “la otra Bahía. Es la Bahía muchas veces invisibilizada pero que viene del fondo de la historia (…). La huelga de los trabajadores de Ing. White en 1907, las luchas heroicas de los cinco mil obreros ferroviarios que había en esta ciudad antes de las privatizaciones”, la Bahía “de los que resistieron al golpe del ’55, de los trabajadores que el 30 de mayo de 1969 paralizaron esta ciudad, el día después del Cordobazo” y de los y las protagonistas de “la huelga de las coordinadoras que tiró abajo a López Rega y a su ministro Rodrigo”, en julio de 1975.

“La Bahía de aquella generación de estudiantes rebeldes, generosos, combativos de la UNS, de la UTN, de la escuela de trabajo social, incluso del Juan XXIII. La Bahía de aquellos compañeros, muchos de ellos están presentes, cristianos de base, compañeros y compañeras de la Pequeña Obra, de Cáritas, de los sacerdotes y las monjas tercermundistas que también hubo en Bahía Blanca. Vivieron, amaron y lucharon acá en Bahía Blanca. No hay que olvidarse de todo eso. La Bahía de Enrique Heinrich y de Miguel Loyola, obreros gráficos de La Nueva Provincia” asesinados por “luchar en contra de esa patronal”. Y la de “un movimiento de los derechos humanos ejemplar”.

También recordó un 24 de marzo de 1994 cuando 50 compañeros advertidos por el entonces estudiante secundario Federico Randazzo, supieron que a 50 metros de ellos estaba el genocida Astiz.

“¿Cuál era el acto del 24 de marzo? Era ir caminando y pararnos como lo hicimos frente al genocida Alfredo Astiz y gritarle en la cara: ‘Astiz cobarde en las Malvinas, asesino en el país’. Y Celia Korsunsky se paró a medio metro de Astiz, y era todo un símbolo de esta ciudad que se atrevía a decirle al genocida en la cara que no nos íbamos a reconciliar, que no los íbamos a perdonar y que íbamos a pedir siempre Juicio y Castigo. Esa Bahía también existe”, sostuvo Gandolfo.

Coincidimos: esa Bahía también existe o, sobre todo, esa Bahía existe.

Lo mismo podemos decir en este contexto en el que se llevan adelante los juicios a la Triple A, que dan cuenta de una memoria que se hace carne en grupos militantes que sostiene valores esenciales para que la democracia no sea un conjunto de frases vacías. En el medio del pensamiento posibilista, de un debate político institucional de calidad ramplona, plantear esta política de la memoria activa da sentido a las luchas de mañana.

Desde el punto de vista de los social, en la actualidad, para cualquiera que observe con atención, está claro que las situaciones dramáticas a las que la desigualdad que nos impone el modelo económico local fueron sobrellevadas por la solidaridad de abajo: comedores, merenderos, campañas de colectas, fondos espontáneos para sortear las desgracias corrientes, organizaciones sociales, gremiales y culturales asistiendo a sus bases, y una larga lista de personas que dedicaron una parte de sus bajos sueldos a inyectar recursos hacia quienes menos tienen.

El gobierno municipal, en cambio, sub ejecutó partidas de todas estas áreas sensibles.

Desde el punto de vista de la salud, cabe recordar que el 147 fue atendido por un grupo de voluntarios ya que el municipio no invirtió recursos para pagar el trabajo de quienes se dedicaron a la ardua tarea de seguimiento.

Huelga señalar que fueron los y las trabajadores de la salud, con bonos mal cobrados y sin reconocimiento salariar acorde, quienes soportaron la crisis sanitaria en una ciudad cuyas autoridades dieron rienda suelta a la idea de que cada uno haga más o menos lo que quiera, cómo y cuando quiera, como si la salud pública no fuera un problema comunitario y como si el estado no fuera el responsable de garantizarla.

En el ámbito cultural, somos unan ciudad con una gran cantidad y calidad de propuestas artísticas y culturales de todo tipo. Además de esa calidad cultural, existe una conciencia de clase de los trabajadores y de las trabajadoras de la cultura que se expresa en un conjunto de normas que supieron instalar a través de la lucha política.

La Comedia Municipal de Bahía Blanca, por ejemplo, no solo implica trabajo para actores y actrices sino que está concebida desde el enfoque de garantizar los derechos culturales de la población, recorriendo barrio a barrio, con plena conciencia de que si el mercado nos busca empobrecer intelectual y espiritualmente pues a través de la lucha política podemos construir herramientas que garanticen dicho acceso al arte y a la cultura.

El Consejo Cultural Consultivo, los Espacios Culturales Independientes, la ordenanza de Eventos con Continuidad en el Tiempo -que garantizan la financiación del entramado de festivales, encuentros y talleres que la propia población construye-, los sindicatos que funcionan como herramientas de lucha y memoria colectiva de peso, y un sinnúmero de colectivos que profundizan los conocimientos y garantizan la participación comunitaria, son elementos particulares de Bahía Blanca.

Desde el punto de vista deportivo, hay un universo de gente con los pies en la tierra que escapa a la lógica cholula de los apóstoles de Ginóbili, universo en que muchas personas construyen techos, redes y arcos para que les pibes tengan un lugar donde el juego no esté ceñido por el peligro y la violencia social, donde se dan talleres, donde perviven los oficios.

Las bibliotecas constituyen una red de inmensa relevancia. En un continente en el que el analfabetismo funcional y el sistema de educación han venido decayendo -pese a la lucha docente-, la existencia de libros a la mano del pueblo, con bibliotecarias profesionales, constituye un entramado imprescindible.

Podríamos seguir enumerando un universo de hacedores y de hacedoras en más ámbitos, como en el trabajo, el cooperativismo, el sindicalismo que no se sienta con esos “enemigos del pueblo” que diseñan un modelo económico local con casi un tercio empobrecido y miles de personas bajo la línea de indigencia. Un modelo centrado en un polo que lo único que derrama es enfermedad.

Hay un Bahía hermosa, luchadora y poética, que a menudo no tiene tanta prensa. Estos micrófonos se hacen eco de ella y, si la calle así nos lo reconoce, busca también resonar junto a su pueblo en ese canto libertario.

El 2 de marzo se cumplieron 5 años del crimen de Berta Cáceres, líder del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh).

Olivia Marcela Cáceres Zúniga, hija mayor de Berta y actual diputada de Congreso Nacional de Honduras por el partido de oposición, Libertad y Refundación (Libre), se refirió en diálogo con la columnista de Asuntos Latinoamericanos de FM De la Calle, Julia Giménez, a la lucha emprendida junto a su madre, como mujer lenca, en defensa de los ríos y contra el gran capital extractivita y a su compromiso como defensora de los derechos humanos para combatir la impunidad encarnada en Honduras.

Para Olivia, el golpe de Estado que en 2009 destituyó al presidente Manuel Zelaya profundizó el modelo extractivo de explotación minero energética entregando soberanía a partir de las Zonas Especiales de Desarrollo.

Asociado a ello, la violencia política contra aquellos y aquellas que resisten al saqueo ya se ha llevado la vida de centenares de militantes populares y defensores de la tierra y el medioambiente en Abya Yala.

En relación al avance la de causa Berta Cáceres, Olivia explicó el proceso en curso contra David Castillo, ex directivo de la represa Desarrollos Energéticos S.A. (DESA) por la coautoría del crimen. Aunque entorpecido por un sistema judicial viciado, para Olivia ello pone al desnudo los vínculos entre los poderes económicos y políticos a nivel nacional e internacionales tanto en el asesinato de su madre como del modelo que continúa matando y expulsando a los pueblos de sus territorios.

“El hecho de que un día la justicia llegue a ese eslabón intelectual tan poderoso sería sentar un precedente en la justicia de este país contra esa impunidad histórica y quizás una forma de que estos hechos no se repitan”, afirmó.

Escuchá la entrevista:

Hernán Zerneri, integrante de la Asociación Ambiental Unión 20 de Agosto, dijo a FM De la Calle que el escape de ácido clorhídrico en la planta de Unipar fue por “una falla en una soldadura” y no por la rotura de la junta de una brida como se informó en primer término.

“En el momento que se da la liberación del cloruro había una lluvia torrencial, cuando monitorearon el entorno estaba lloviendo y eso favoreció la dilución del material para que no llegue a la comunidad. Ya van dos ‘suertes'”, dijo en referencia al escape de cloro del 2000 cuando el viento llevó la nube amarilla hacia el estuario.

El incidente ocurrió en los primeros minutos del jueves. “A las 2 horas se controló y se activó el PRET 1 por protocolo. En función de presiones y volúmenes de las empresas cualquier producto que liberen puede tener una afección al entorno”, explicó.

“La empresa presenta un motivo oficial, en este caso en Unipar es una falla de materiales que tiene más que ver con el mantenimiento preventivo que con la capacitación de la gente. Hay que atender cuál es la causa raíz de cada cosa para pedir que se refuercen recursos para que no se repitan”.

Zerneri afirmó que “nuestro pensamiento del tema pasa por el mantenimiento preventivo que hacen las industrias respecto a sus instalaciones. Puede haber una falla y que el material de la cañería presente una porosidad”.

Por otro lado, informó que la semana pasada se realizó una reunión del Comité de Control y Monitoreo y entre los temas tratados incluyeron “cuestiones que hacen al quehacer del CTE, además de aspectos comunicacionales que tienen que ver con el Municipio y el CCyM y retomamos una agenda de comunicación perfilado a todo el año”.

“Hicieron lo que hicieron por la connivencia de políticos, fuerzas armadas, jueces y fiscales. O sea, el Estado puso a disposición de estos asesinos gran parte de su aparato”, dijo Mónica Fernández Avello en la primera jornada de su alegato.

La representante de la agrupación H.I.J.O.S. continuará lunes y martes desde las 9 su exposición en el juicio contra cuatro ex integrantes de la Triple A bahiense acusados de integrar una asociación ilícita que cometió 24 homicidios.

“Todos sabíamos quién era Ponce y su patota, el terror que nos producía la fiambrera y la certeza de que la justicia no nos iba a dar ninguna respuesta ante el atropello de estos asesinos”, afirmó.

La semana pasada la Fiscalía pidió pena de prisión perpetua para Raúl Roberto Aceituno y de 10 años de cárcel para Juan Carlos Curzio, Osvaldo Omar Pallero y Héctor Ángel Forcelli.

Fernández Avello recordó que en los noventa, década en la cual nació la agrupación H.I.J.O.S., “existía la absoluta impunidad” y el discurso oficial sostenía la teoría de los dos demonios. “Se pretendía equiparar a las víctimas del terrorismo de Estado con los genocidas. Eso lo estamos viendo en este juicio ante la insistencia de la defensa para hacer ver los hechos como una simple disputa interna dentro de un partido que se arreglaba a los tiros, cuando la Triple A en ese momento definía todo en esta ciudad, en la CGT, en la universidad, en la justicia y en la iglesia”.

Destacó que el accionar de la asociación ilícita que integraban, entre otros, los imputados en el juicio “se dedicó a matar a un montón de gente en Bahía Blanca y la zona dentro de un plan criminal macro que estaba establecido en todo el país”.

“No estamos nutriéndonos solamente de prueba testimonial, no nos valemos de testimonios únicos, aislados, huérfanos y carentes de sustento. Cada uno está refrendado por muchos documentos, por elementos de convicción como, por ejemplo, las notas periodísticas de la época y por los informes de inteligencia, refrendados a su vez por las causas penales en las que surge palmariamente la connivencia del Poder Judicial”.

Impunidad y reciclaje

En aquel clima de impunidad menemista surgieron los escraches. “Se encontraban las víctimas y los victimarios. Ellos: asesinos, torturadores, violadores y robadores de bebés, andaban por las calles, en algún café, en cualquier kiosco o en la esquina de una manifestación de derechos humanos”.

Eso permitió que muchos genocidas se reciclaran en la función pública. “En este juicio lo hemos visto claramente. Uno de los casos emblemáticos es el de Pablo Argibay, hijo de Jorge Oscar Argibay, a quien hemos escuchado nombrar hasta el cansancio como el jefe de los culatas”.

“Este señor actuaba conjuntamente con su hijo Pablo y formaba parte de la asociación ilícita Triple A, varios testigos los vieron en la UNS y en otros lugares, armados, amedrentando y también asesinando, como es el caso de Watu”.

Pablo Argibay murió impune días después que la Fiscalía lo incluyera en el pedido de detención e indagatoria al grupo que está siendo enjuiciado. Luego de su participación en el genocidio, estudió medicina, trabajó en el Hospital Italiano de Buenos Aires, fue asesor del Ministerio de Ciencia y Tecnología, investigador del CONICET. “Murió en 2015 como un gran señor lleno de honores por sus colegas. Una se pregunta: ¿por qué sucedió esto? Realmente sucedió por la impunidad”.

Otro ejemplo fue el del acusado Héctor Ángel Forcelli, quien al recuperar la libertad -de la que aún goza- concurrió al acto del Día de la Lealtad Peronista el 17 de octubre de 2018. “Nadie de los presentes reparó en él o repudió su presencia, cosa que sí hizo la agrupación que represento”.

“Ni que hablar de otro muy mencionado en este juicio, Rodolfo Ponce, quien fuera diputado de la Nación desde el 10 de diciembre de 1983 al 9 de diciembre de 1985”, agregó y subrayó “la distorsión moral que permitió que aquellos integrantes de hordas asesinas se transformaran en representantes del pueblo argentino”.

Acólitos de Montezanti

En otro tramo de su alegato, Fernández Avello se refirió a la demora que tuvo la justicia bahiense en dictar su primera sentencia sobre los crímenes del terrorismo de Estado respecto a otras jurisdicciones.

Arriba: Forcelli, Montezanti y Aceituno. Abajo: Chisu, Curzio y Pallero.

“No es casual que ocurra esto en un Poder Judicial que, hasta hace pocos años, tenía como integrante de la Cámara Federal a Néstor Montezanti, quien también fue profesor de la UNS formando futuros abogados. Este individuo está procesado por la asociación ilícita Triple A, la misma que estamos juzgando acá. Él no está más pero sus acólitos y los de la dictadura siguen estando en el Poder Judicial”, afirmó.

La persistencia del miedo

Para la abogada, esto explica el miedo de los testigos para declarar en la causa. “Tenemos a todos los procesados en libertad y uno solo con domiciliaria, en una ciudad chica como Bahía Blanca donde, como remarcaron varios testigos, todos sabíamos quién era Ponce y su patota, el terror que nos producía la fiambrera y la certeza de que la justicia no nos iba a dar ninguna respuesta ante el atropello de estos asesinos”.

Durante el debate se supo que Curzio llamó a una testigo antes de su declaración. “Pero claro, el tribunal no lo tomó como un acto intimidatorio y Curzio sigue en libertad. Esta es la respuesta que la justicia les da a las víctimas hoy. Y después quieren que los testigos no tengan miedo”.

“Me limité a decir lo que dije, si alguna vez la justicia me da seguridad yo voy a explicar esto”, sostuvo otro testigo a quien, luego de ser convocado en la instrucción, le quemaron la casa y un grupo -entre cuyos integrantes sospecha estaba Pallero- le dio una paliza.

Dijo Fernández Avello: “Señores jueces, hace once años que estoy como querellante en juicios de lesa humanidad pero nunca vi el terror de los testigues. Es más, muchos ni siquiera quisieron declarar”.

Más allá de las disculpas

“Hoy estamos juzgando hechos que ocurrieron hace 46, 47 años”, sostuvo la titular de la querella, “más allá de las disculpas que se puedan pedir a las víctimas y sus familiares, la asociación que represento no es culpable de esta situación”.

“Culpables son los que apoyaron o callaron ante las leyes de impunidad. Culpables son esos jueces que no investigaron, esa policía que dio zona liberada, esa prensa que mintió deliberadamente y, por qué no, esa parte de la sociedad que miró para el costado siendo la Triple A la antesala de los años más oscuros que vivió la Argentina y cuya influencia siguió hasta nuestros días”, sentenció.

La presencia del gobierno estadounidense en Argentina tiene un nuevo capítulo. La donación de tres hospitales de campaña como ayuda humanitaria en contexto de pandemia fue la excusa de la visita del almirante Craig Faller, jefe del Comando Sur.

Para la periodista Stella Calloni “hay un proyecto de recolonización de Nuestra América en donde nos están sometiendo a un conflicto, como durante la guerra fría”.

En Buenos Aires se reunió con el ministro de Defensa, Agustín Rossi, y con el jefe del Comando Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, General Juan Martín Paleo. Luego viajó a Tierra del Fuego donde la Armada busca financiamiento para la instalación de una nueva base.

Esta semana llegará al país Juan Sebastián González, asistente especial del presidente Joe Biden y director principal para el Hemisferio Occidental del Consejo Nacional de Seguridad.

Calloni, especialista en política internacional, advirtió en FM De la Calle que la visita del militar yanqui ocurre en medio de la puja geopolítica con Rusia y China. “Si vas a mandar a una misión humanitaria, enviá al Ministerio de Salud, resulta siempre más amenazante que aparezca aquí el Comando Sur que está poniendo bases en un montón en países”.

Las bases que se instalan en diferentes puntos de América Latina “aparecen como lugares de ayuda humanitaria para catástrofes que tienen esa cobertura falsa, como la que está en Neuquén. Está cerca de Vaca Muerta, son centros estratégicos de la red de bases de EE.UU. Hay vigilancia de radares y alta tecnología que ellos manejan en lugares claves de nuestro territorio”.

“Rusia y China hacen su juego. Estados Unidos se desayunó que había dejado de ser la única potencia, entró en decadencia, y empezó a tener otra conducta con respecto al mundo. Como vieron que Pekín había donado hospitales y también se pueden elaborar sus vacunas en otros países, los demócratas sugirieron que plantearan acuerdos más amigables porque China les estaba ganando terreno”, explicó Calloni.

“No digo que sea malo que Biden quiera tener una buena relación con Argentina y el gobierno actual, pero no se puede ofrecer ayuda con condicionamientos” a nuestras relaciones internacionales con la patria de Bolívar y otros países. La especialista comentó que, años antes, “el almirante Craig Faller se negó a convalidar una invasión a Venezuela, eso lo puso en una mejor situación para negociar con América Latina pero saca a la luz la necesidad de saber qué hay detrás”.

Otro ejemplo que utilizó la periodista para comprender el objetivo de Estados Unidos fue la colocación de “un centro regional naval en Panamá, pequeño Comando Sur naval para monitorear toda la región. Tenemos que tener claridad. Hay un proyecto de recolonización de Nuestra América en donde nos están sometiendo a un conflicto, como durante la guerra fría”.

En relación a la militarización de la región y las decisiones tomadas durante el gobierno de Macri, Calloni afirmó que el ex ministro Defensa, Oscar Aguad, “había anunciado la construcción de una base logística en Ushuaia, suponiendo que esta sería argentina. El objetivo era facilitar insumos para la gente que hace expediciones científicas” en el continente blanco. “Se quieren quedar con la Antártida argentina y chilena”, sentenció.

En 2016, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, rubricó un convenio para “crear un centro de inteligencia criminal regional” en la provincia de Tierra del Fuego. En noviembre de ese mismo año, Aguad “firmó un acuerdo con la Guardia Nacional del Estado de Georgia, sede del Comando Sur, violatorio a la soberanía nacional, que autorizó la utilización de las tropas especiales, como boinas verdes y mercenarios” en territorio argentino. “Frente a esta realidad, yo me pregunto, ¿la ayuda humanitaria no se tendría que haber quedado acá, para que ir a Ushuaia, ¿cuál es el criterio?”.

 “Hay bases sin tropas, que pertenecen supuestamente a centros humanitarios pero están pensadas dentro de la red del Comando Sur a lo largo de América Latina”, concluyó Stella Calloni.

Amigos, amigas, dirigentes políticos, sindicales, sociales y del ámbito universitario conformaron el 3 de abril la Comisión por el Reconocimiento Académico de David “Watu” Cilleruelo, con el objetivo de solicitar a las autoridades de la UNS dicho homenaje.

Desde FM De la Calle compartimos un resumen de las adhesiones y participaciones del encuentro virtual realizado a 46 años del crimen del dirigente de la Federación Universitaria del Sur y la Federación Juvenil Comunista.

El planteo fue recogido por la Fiscalía en su alegato en el juicio a cuatro ex miembros de la Triple A como uno de los pedidos de reparación simbólica solicitados ayer al tribunal.

Raquel Cilleruelo, hermana de David, hizo llegar una carta que fue leída por Gabriela Eberle: “Me pone contenta todo lo que me contás de las actividades programadas, les pido que me disculpen porque entre el aniversario, el juicio, y otras yerbas ando medio, mejor dicho, bastante sensible y no creo poder hacer esto sin llorar. Espero con ansias la sentencia del tribunal y a la vez con tristeza, tanta gente que se nos fue y a la que yo quería abrazar”.

Con gusto seré parte de esta comisión, gracias por todo lo que hacen por la memoria de Watu. Y si ocurriera un milagro y pudiera viajar para cuando dicten sentencia, como siempre pensé que ocurriría, que gran abrazo les voy a dar a todos“.

Guadalupe Godoy, abogada y representante de la UNLP en la Red Interuniversitaria de DD.HH., llamó a “pensar a la universidad como víctima pero también como victimaria, a partir de las intervenciones que sufrió. Genera dificultad porque el homenaje implica la revisión. Hay una memoria incómoda que sigue ahí y estos planteos remueven un montón de cosas”.

Nora Contiñas, integrante de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, señaló que “el recuerdo, la memoria, tiene que caminar todos los días. Gustosa voy a estar a sus órdenes para lo que necesiten, para seguir adelante. Todos nuestros militantes merecen que se les siga honrando cada día”.

“Ahí están los que asesinaron a Watu, solos, despreciados, como lo que se merecen. Y está el Watu rodeado de toda la solidaridad, los amigos y los afectos. Les agradezco en lo personal a los que están acá y a los que no están, habernos transmitido no solo el militante, el revolucionario, sino cómo era David. Yo conozco a David gracias a ellos”, mencionó José Lualdi, integrante de la Corriente Comunista David Watu Cilleruelo.

El escritor y matemático Guillermo Martínez recordó “como una deuda de la UNS que ni siquiera se tratara la posible remoción de Tetu (en la década del 80), que se jubiló y, si hubiera querido, hubiera sido profesor emérito”. Al respecto, Dante Patrignani -secretario de Derechos Humanos de la CTA y compañero de militancia de Watu- destacó que “estos tipos eran intocables, como fue intocable Montezanti hasta que lo tocamos. El miedo no era exclusivo de ellos”.

Recordó que en una ocasión “decidimos ir al curso de Tetu un rato antes de la clase, les hablé a los estudiantes, llegó Tetu y nos echó de la clase. Si eso sucedía ahora lo cagábamos a trompadas pero teníamos miedos encima”.

Julio Gambina, economista y presidente de la Fundación de Investigaciones Sociales y Políticas, mencionó que “para entender el porqué de la pobreza y la miseria de la Argentina actual hay que ir al 75 y 76, a la Triple A y a la dictadura, y ubicar ese tiempo compartido de un gobierno constitucional con grupos parapoliciales que son el antecedente del terrorismo de Estado. Por eso hay que recuperar la memoria de Watu”.

Ariel Armero se refirió al “juicio popular a Remus Tetu en la universidad” y compartió el registro que realizó desde FM De la Calle de la intervención de Osvaldo Bayer en los alegatos. Dijo el autor de la Patagonia Rebelde:

“Esa noche Remus Tetu marco el principio de la tragedia, el Moncho Argibay, el asesino, apenas un eslabón de la tenebrosa Triple A y de la infame ESMA, y los dos juntos, Tetu y Argibay, configuraron todo ese crisol de cobardía, corrupción y ferocidad que se llamaron Astiz, Menéndez, Vila, Acosta y Massera.

Pero la historia no los acompaña, todos seguirán encerrados en sus madrigueras, despreciados hasta por los gusanos y las ratas. En cambio, aquí, el Watu , nuestro amigo, renaciendo y eterno, junto a todos aquellos estudiantes cuyos nombres recordarán las aulas y los recreos, el amor y la caricia, el valor y la mirada hacia adelante.

Hoy no iniciaríamos contentos el regreso ni dejaríamos vacío el salón de reencuentros y propósitos, sin prometernos jamás servir a los autoritarios, demagogos, corruptos, oportunistas, a los que calzan armas para imponer matones, a los que prohíben la palabra y queman libros, a los que dividen al sociedad en aprovechados y azuzados por el hambre y la enfermedad, a los que niegan la tiza y el cuaderno a nuestros maestros, a los que condenan a nuestros viejos y niños a la basura y barro, a los que quieren encerrar las ideas con alambres de púas.

Este es el símbolo de esta reunión de la ética y memoria, el desprecio de la maldición bíblica para Remus Tetu: maldito seas por los siglos de los siglos. Y nuestras flores y nuestras lágrimas embarazadas de futuro para nuestro amado Watu”.

Gervasio Díaz, miembro de H.I.J.O.S. Alto Valle, contó que “pudimos encontrarlo a Remus Tetu y hacerle un escrache. Siempre decimos que cuando no hay justicia hay escrache. Esos momentos así, como este de reconocimiento, son los de mayor justicia que vamos a tener como así las instancias judiciales que permiten a familiares dar cuenta de esa historia de represión y de lucha”.

El educador popular Orlando “Nano” Balbo, sobreviviente del CCDyT La Escuelita de Neuquén, opinó que “los monumentos no son memoria, son dispositivos importantes que evitan que se instale el olvido. Pero para hacer memoria tiene que tener la dialéctica, el dinamismo de poder traer el pasado a interpelar el presente y poder construir futuro. En este proceso, a esta memoria debemos darle una encarnadura humana, es importante que tenga el nombre de Watu, que la universidad sepa que dentro de su territorio se violaron todas las normas y hasta se asesinó”.

Por último, Hugo Blasco, secretario general de la Federación Judicial Argentina, destacó que “hay algunos sectores políticos en los que no conviene o molesta enjuiciar a estos personajes. La complejidad no es solo de la universidad sino en todos los ámbitos de militancia, en el sindicalismo también pasa. Rescatar la historia como fue y hacer justicia con la historia es parte de esa tarea porque sino todo da igual”.

La licenciada en Economía Agostina Costantino analizó en FM De la Calle los números del Indec sobre la pobreza en Argentina. “La situación estructural se vio agravada no sólo por la pandemia sino también por algunas decisiones respecto a la distribución del ingreso que se vienen tomando desde el año pasado”.

Costantino detalló que las cifras corresponden al segundo semestre del año pasado y exponen que “un 42% de las personas en nuestro país están cobrando bajo la línea de pobreza y un 10% están bajo la línea de indigencia. Sus ingresos no les alcanzan para cubrir la canasta alimentaria”.

La columnista explicó que “la comparación interanual muestra que la pobreza aumentó un 6,5% en promedio en todo el país. La región más afectada fue el Gran Buenos Aires, y tiene directamente que ver con la pandemia, por el parate de las industria en esa zona y la prohibición a la circulación” hacia un lado y otro de la General Paz.

Según la Encuesta Permanente de Hogares “el ingreso promedio de una familia pobre en el segundo semestre del 2020 fue de $29.500 mientras que la canasta básica total, estuvo en $50.000. La brecha con el monto de la canasta básica total, aumentó respecto a 2019”. La economista explicó que “no sólo se acrecentó la proporción y la cantidad de pobres, sino que las personas pobres son más pobres que antes ya que cobran en promedio cada vez menos ingresos con respecto a lo que cuesta la canasta básica total”.

Mujeres y niñeces

Costantino dijo que “el INDEC aún no publicó detalles, sino un informe: del total de personas pobres, la incidencia sobre los niños es realmente escalofriante. Las cifras muestran que el 57,7% de las personas entre 0 y 14 años, son pobres, casi 6 de cada 10”.

En relación a la feminización de pobreza, la economista citó una investigación de BAE Negocios, realizada por Macarena Turubiano, quien “compara el primer trimestre 2020 con el tercer trimestre del 2020, e intenta analizar qué pasa con los ingresos laborales y no laborales”.

“¿Qué es lo que explica este aumento en la pobreza? Turubiano narra que en el primer trimestre, las tasas de ocupación de desempleo y actividad entre varones y mujeres, fue más o menos similar. La diferencia está en el punto de partida ya que ellas enfrentan cotidianamente una tasa de ocupación mucho menor que ellos, 35% en el primer trimestre, contra 49%”.

Asimismo, Costantino mencionó que la investigación de BAE Negocios “analiza específicamente el tema de los ingresos y observa que en la normalidad pre pandemia los salarios correspondientes a las mujeres ya eran inferiores al de los varones: $36 mil contra $28 mil”.

“Es en la distribución de ingresos, donde ocurre la feminización de la pobreza, porque en los deciles más bajos hay una mayor proporción de mujeres. Estructuralmente en Argentina, un dato nunca cambiaba: dentro del 10% más pobre de la población, 7 de cada 10 eran mujeres. Al tercer trimestre del 2020, esa proporción del decil más bajo de ingreso, descendió de a 6 de cada 10, por la existencia del IFE, que fue escasa pero tuvo un efecto importante”.

En este sentido, la licenciada en Economía, pronosticó que “lo más esperable que esta cantidad de mujeres, haya vuelto a subir porque el IFE se cortó. Es real que al mismo tiempo que se corta el IFE, el Estado siguió manteniendo otro tipo de política de transferencia de ingresos, como el ATP, que son subsidios a empresas para pagar salarios”.

Costantino invitó a reflexionar sobre estas medidas: “¿Cómo se financia ese ATP? ¿Qué efectos tiene sobre la distribución de ingresos? ¿Cómo recauda el Estado? Todavía no se ve la plata del gravamen a las grandes fortunas y en la Cámara Baja se aprobó el aumento del mínimo no imponible al impuesto a las ganancias (NdR ayer el Senado lo transformó en ley). Se decide disminuir cargas a los sectores asalariados en blanco que son los que mejores estarían en la distribución de ingresos pero se resuelve hacer menos progresivo a un impuesto progresivo y no se toca uno regresivo, como es el IVA”.

En el ámbito local, disminuyó la pobreza y subió la indigencia. “Bahía Blanca está dentro de los más bajos en todo el país con un 24%. Esto podría estar relacionado con el parate de actividades no tan abrupto como en Gran Buenos Aires o CABA, muchas actividades volvieron antes que en otras ciudades, no creo que sea por la incidencia del IFE”, concluyó.

Esta sábado 10 de abril a las 20 tendrá lugar el Festival Música en la Ventana en su edición número 12. El clásico encuentro se suele desarrollar en las localidades de Sierra de la Ventana, Saldungaray, Villa Ventana y Tornquist. Debido a las circunstancias pandémicas, en esta oportunidad su realización será de manera virtual.

La propuesta fue declaradao de interés cultural por el municipio de Tornquist.

¿Dónde se emite?

En los auditorios virtuales de UMSur

http://youtube.com/c/uniondemusicosdelsur
facebook.com/uniondemusicosdelsur/

¿Quiénes participan?

Maximiliano Molina (Sierra de la Ventana)- Guitarra.
Alberto D´Alessandro (Bahía Blanca)-Guitarra.
Lucas Carrillo (Cnel. Pringles-La Plata)-Batería.
Luján Hernández (Tornquist)-Cantautora.
Rodrigo Terrón (Coronel Dorrego)- Compositor.
Simón Palacio (Guaminí)- Guitarra y voz en composiciones propias.
Marta Lerra (Posadas- Misiones)- Guitarra.
Dúo De Color Nuestro (Sierra de la Ventana)- Laura Zylbersztejn-Jorge Canolik- Canción latinoamericana.
Francisco Alonso (Bahía Blanca- La Plata)- guitarra-Giselle Albamonte- Micaela Justel (CABA). Danza contemporánea.
Colaboración a la gorra. en los link indicados en la transmisión.
Dirección artística: A. D´Alessandro. Organización: Maximiliano Molina.

La Fiscalía pidió condenas de prisión perpetua y de 10 años de cárcel para los cuatro imputados en la causa que juzga más de una veintena de homicidios cometidos por la Triple A en Bahía Blanca.

Son las penas más altas para los delitos que se imputan.

“Por la memoria de las víctimas y la dignidad de familiares y sobrevivientes, por la valentía de quienes prestaron testimonio y el silencio de quienes no pudieron hacerlo, por el fin de la impunidad y del miedo, que sea justicia”, afirmó Pablo Fermento.

Los acusados son Juan Carlos Curzio, Osvaldo Pallero, Héctor Ángel Forcelli y Raúl Roberto Aceituno. Todos imputados por asociación ilícita y en el caso de Aceituno, también por la coautoría del crímen de David Cilleruelo.

“Los hechos que estas personas cometieron siguen atravesando a la sociedad, la condena cumple una función reparadora ya que únicamente de esa manera se clausura el capítulo de impunidad”.

Fermentó solicitó que todos los actos sean considerados crímenes de lesa humanidad constitutivos de genocidio.

Reclamó que se revoque la prisión domiciliaria de Aceituno y se ordene la detención de los otros tres represores.

En cuanto a la reparación simbólica requirió que se declaren insalvablemente nulas un conjunto de resoluciones del ex interventor de la UNS, Remus Tetu, y del ex secretario general técnico, Julio César Lemos, y se encomiende a las autoridades actuales que notifiquen a los destinatarios de las cesantías y expulsiones ocurridas en 1975.

A las universidades del Sur y del Comahue y a las delegaciones de Bahía Blanca y General Pico de la UTN que coloquen en espacios de circulación pública de referencias históricas sobre la puesta a disposición de sus instalaciones y recursos al servicio del funcionamiento de grupos paraestatales armados y la publicación de la sentencia definitiva de la causa.

A 46 años del crimen se conformó la Comisión por el reconocimiento académico de Watu Cilleruelo. La Fiscalía sumó su apoyo y consideró que el dirigente “se convirtió en un símbolo por lo que fue, por lo que le hicieron y por cómo y para qué se lo hicieron”. Por ello, pidió que la UNS le entregue el título honoris causa al dirigente de la Federación Universitaria del Sur.

Esta madrugada el Comité Técnico Ejecutivo informó que la empresa Unipar realizó “una parada no programada de planta debido a la pérdida de cloruro de hidrógeno en la unidad de pirólisis 2400”.

La ex Indupa activó el nivel de emergencia PRET 1 y el CTE comunicó que no se detectaron “anormalidades”. La situación fue controlada pasadas las 2:30.

El coordinador del organismo, Walmir Morete, dijo a FM De la Calle que la empresa avisó a las 12:15 “que debía parar una de sus pantas en forma no programa debido a un escape de cloruro de hidrógeno. Es ácido clorhídrico en estado gaseoso, no es un derrame sino un gas”.

“La pérdida podría hacer sido desde una brida, debieron parar la planta para despresurizar y arreglar lo roto. No es menor, la empresa decreta un PRET 1, es nivel amarillo, el más bajo, son accidentes que tengan como única consecuencia daños materiales puertas adentro de la empresa y no tienen un daño exterior a la planta. Interviene Defensa Civil y Bomberos de Ing. White que van a la planta”, explicó Morete.

El CTE concurrió a “inspeccionar y realizar mediciones para detectar si este gas está en la periferia de la planta. Se decretó que no, estaba lloviendo torrencialmente y había viento, eso probablemente ayudó”.

“La empresa lo que hace es parar la planta y bajar presiones hasta que queda parada, hasta que no circula más, parte de eso se ventea a la antorcha. Medimos con equipos en el perímetro de la planta para ver si se detectaba. Es tóxico, corrosivo y con olor picante que se detecta con el olfato. No recibimos denuncias de vecinos de White ni de Bahía. Entendemos que la lluvia dispersó, estamos esperando el informe de la empresa para saber cuánto fue”.

La economista María Julia Eliosoff analizó en su última columna en FM De la Calle las políticas de inclusión financiera. ¿Para quiénes están pensadas? ¿Qué miradas hay? ¿Cumplen con su objetivo?

“La idea de inclusión financiera no es nueva en términos de género. Quienes traen esta agenda son organismos internacionales de crédito que hablan de tratar de que más cantidad de población tenga acceso a cuentas bancarias, cajas de ahorro y créditos. Según su teoría, esto contribuiría a la inclusión social, a luchar contra la pobreza, al empoderamiento económico de las mujeres”, afirmó.

Agregó que “en Argentina, en términos de bancarización, hay mucha gente que tiene una cuenta abierta, esto tiene que ver con la AUH y con el IFE. Durante la pandemia se bancarizó a 2 millones de personas”.

Eliosoff destacó que “El IFE fue una política de inclusión financiera pero la agenda mira la inclusión financiera para emprendedoras y mujeres a cargo de pymes. Básicamente para el sistema bancario las mujeres son sujetas de crédito para consumo. Los créditos vinculados al desarrollo productivo tienen más trabas, por ejemplo, le piden que vaya EL responsable de la empresa o garantías vinculadas a un titular masculino. En el papel no está escrito pero al momento de generar las entrevistas, el banco pide de interlocutor a un varón”.

“Cuando pensamos la inclusión financiera para el desarrollo, en general está vinculada al acceso a crédito, es decir, el acceso a la deuda. El acceso financiero si no viene acompañado de otras herramientas es deuda”.

La economista afirmó que “es importante mencionar que las personas que llegan al sistema bancario formal ya están endeudadas. Empiezan a conectar una población con ingresos intermitentes a un circuito bancario que ofrece otro tipo de herramientas que profundizan más el círculo de endeudamiento·.

Las investigadoras Luci Cavallero, Verónica Gago y Celeste Perosino plantean una agenda feminista para abordar la cuestión financiera. Algunos de sus puntos son:

1- ¿A dónde estamos incluyendo a las personas, en qué contexto están esas personas? ¿Qué condiciones van a garantizar su permanencia en ese sistema bancario? Por otro lado, generar una pedagogía financiera: incluir a los territorios en la planificación de estas estrategias. Que esa educación vaya de la mano con la denuncia de las prácticas usureras que tienen estas entidades.

2- Buscar otros dispositivos para apoyar la producción y reproducción de la vida.

3- La inclusión financiera tiene que ir de la mano de otras estrategias de políticas públicas.

4- Que exista información pública para poder complejizar los registros de cómo, para qué y quiénes se endeudan.

El periodista Miguel Bonasso destacó la relevancia del juicio contra ex integrantes de la Triple A de Bahía Blanca. Este jueves, La Fiscalía cerrará su alegato con el pedido de penas para los cuatro imputados.

“Puede mostrar el vínculo perverso de la derecha peronista con la Marina que ha aparecido siempre como el arma más gorila, más antiperonista, y, por supuesto, con La Nueva Provincia que es un órgano directo del Servicio de Inteligencia Naval”, dijo el ex secretario de Prensa de Héctor Cámpora a FM De la Calle.

La entrevista se realizó días después de las declaraciones de Mario Simón y Héctor Álvarez, presidente y vice del Partido Justicialista bahiense respectivamente, quienes defendieron a dos de los represores y desconocieron los crímenes de la banda parapolicial en la región.

“Para cualquier persona con dos dedos de frente y uno de memoria, no cabe duda: la Triple A no solo existió sino que desgraciadamente no puede negarse la responsabilidad de altos dirigentes del peronismo en su participación directa o en su encubrimiento”, afirmó Bonasso.

¿Por qué el PJ no tiene una mirada crítica respecto a los años previos al golpe de Estado?

No se ha hecho el juicio a Isabel Perón y no se ha calado a fondo en la responsabilidad del propio Perón en la creación de la Triple A y en la persecución brutal desatada después de su regreso con Ezeiza.

El elemento central es que los crímenes perpetrados por la Triple A -más de 1500 asesinatos entre 1974 y el golpe, durante el gobierno ‘constitucional’ de la señora María Estela Martínez, alias Isabel Perón- fueron perpetrados desde el Estado, con autos y armas del Ministerio de Bienestar Social. En Bahía Blanca también con el apoyo de la universidad conducida por el nazi rumano Remus Tetu, de triste memoria.

Todo es terrorismo de Estado y son crímenes de lesa humanidad que no prescriben. Cuando algunos pseudo periodistas como Ceferino Reato presentan a José Ignacio Rucci como un pobre mártir del sindicalismo olvidan el vínculo que, por ejemplo, está explícito y claro en el tema de Rodolfo Ponce, mencionado reiteradamente en el juicio. En este criminal, que fue diputado justicialista, Cámpora tenía confianza al comienzo -me consta por haber sido secretario de prensa del Frente Justicialista de Liberación- y era un hombre de los servicios vinculado a la Marina. No es casual que este juicio esté ocurriendo en Bahía Blanca, esto tenía que ver con lo que significa La Nueva Provincia y el Servicio de Informaciones Navales.

Para cualquier persona con dos dedos de frente y uno de memoria, no cabe duda: la Triple A no solo existió sino que desgraciadamente no puede negarse la responsabilidad de altos dirigentes del peronismo en su participación directa o en su encubrimiento.

Si no se quiere tratar y estos señores contestan cosas que dan la sensación de que viven dentro de un frasco, tanto el presidente como el vicepresidente del Partido Justicialista de Bahía Blanca, les diría que salgan del frasco, saquen la tapa de la olla porque se van a ahogar con los olores fatales que hay adentro y vean la realidad. Es cierto que ha pasado mucho tiempo pero también sabemos muchas cosas que pasaron hace tiempo…

Usted menciona en uno de sus libros “el somatén para Perón”, ¿cómo se fue gestando y cómo lo veían desde dentro de las filas del movimiento peronista?

Cuando escribí ‘El presidente que no fue’ fui el primero que denunció lo del somatén, me hago responsable. Decirlo fue un acto de valentía porque de alguna manera he pertenecido al peronismo, no al PJ sino a la JP, estuve vinculado a Montoneros pero no al PJ específicamente.

Desgraciadamente tengo el testimonio grabado de Gloria Bidegain, la hija del dr. Oscar Bidegain -quien fuera gobernador de la provincia de Buenos Aires- en un viaje que hizo a España en abril de 1973 para ir después a China con José López Rega, uno de los jefes de la Triple A, y con Isabel Perón.

Perón se refirió a algunos actos de violencia que habían ocurrido en Argentina. Algunos posiblemente cometidos por el ERP, no recuerdo exactamente. Dijo: ‘lo que hace falta en Argentina es un somatén’. El somatén fue aplicado en la dictadura española de Miguel Primo de Rivera, el padre del fundador de la Falange José Antonio Primo de Rivera, y era un organismo paramilitar, parapolicial, creado desde el Estado para reprimir actividades fundamentalmente de la izquierda social, sindical, de la que peleaba al nivel de la clase trabajadora.

La Triple A es eso, es un somatén. Perón estaba esbozando ahí la idea de crear un aparato estatal secreto, paraestatal, no oficial sino oficioso, con los recursos del Estado para reprimir a la izquierda, sobre todo a la de su propio movimiento que era la que más le preocupaba. Está comprobado, es histórico, hay numerosos documentos, hay una reunión a la que se convocó a los dirigentes del justicialismo con el objeto de denunciar, investigar y señalar a personas que pudieran ser infiltradas, que fueran subversivos.

¿Por qué ese Perón que había hablado de la juventud maravillosa, que había elogiado al Che Guevara como el mejor de nuestros compañeros, que se había reunido con los Montoneros, que había aprobado el tema Aramburu -muy espinoso- que alentaba a la juventud guerrillera, militante, de golpe se convierte en el tipo que dice hay que hacer el somatén?

Por una razón muy sencilla. Vuelve con un pacto con fuerzas internacionales, incluido obviamente Estados Unidos. El pacto se hace a través de la gente de Licio Gelli de Propaganda Due, los tipos que tuvieron que ver con el asesinato del papa Luciani, le estoy hablando de cosas gruesas, han provocado varios muertos en el mundo, son una mafia internacional muy pesada.

Hay un viaje clave que hacen a Roma Isabel Perón y López Rega para entrevistarse con Gelli. Le plantean que el único que puede parar a la izquierda revolucionaria, a las organizaciones armadas a la Argentina, es Juan Perón con su retorno. Esto explica Ezeiza.

El autor de ‘Recuerdo de la muerte’ y ‘Diario de un clandestino’, entre otros libros, destacó la responsabilidad en la organización de aquella masacre de López Rega y el teniente coronel Jorge Osinde y excluyó al ministro del Interior Esteban Righi y a la Policía Federal.

La Federal había aconsejado armar una especie de círculo alrededor del palco donde iba a hablar Perón para evitar incidentes –recordó-. Osinde, con un argumento aparentemente popular, se negó diciendo que la gente no iba a querer ver uniformes de la Federal que había reprimido hasta el día anterior en la dictadura. Era un argumento de izquierda para hacer una política de derecha. La policía quedó a 1500 metros de distancia. Eso permitió que grupos fascistas como la CNU, el CdO de Brito Lima y otras porquerías siniestras y armadas por el estilo, ocuparan militarmente el palco y el Hogar Escuela que estaba enfrente, lo cual hizo que hubiera una apariencia de enfrentamiento pero eran todos del mismo bando, la extrema derecha peronista. En el medio quedó la multitud.

El periodista destacó que “así como Perón tuvo una primera presidencia brillante, ejemplar desde el punto de vista de la distribución -por algo se generó el peronismo- también es cierto Perón regresó en un negocio con el imperialismo y la oligarquía y fue un Perón represor. No alcanzó a desplegar toda su represión total porque se murió”.

Foto: Diego Goldberg

En cuanto a José Ignacio Rucci, sostuvo que tuvo una participación directa en la masacre de Ezeiza:

Lo que queda demostrado con este vínculo con Ponce y la gente de Bahía Blanca es que Rucci no era un angelito, un pobre mártir del movimiento obrero, lo cual no significa que hubiera que asesinarlo. No estoy para nada de acuerdo con eso, creo que es un hecho terrible y lamentable, que no debió haberse producido. Pero no por sus características morales sino porque Perón lo había elegido como secretario general de la CGT y hacerle eso a alguien que acababa de ganar con el 62% de los votos desde el punto de vista político era una barbaridad descomunal.

Rucci no era un santo. Lo prueba el juicio de Bahía Blanca. Prueba que Rucci estaba decidido a cazar militantes de izquierda. Él decía ‘hay que acabar a los bichitos colorados’. ¿Quiénes eran los bichitos colorados? Nosotros. Por eso 1500 compañeros quedaron tirados en las cunetas, perforados a balazos por la Triple A.

Nunca se debió responder a la violencia con violencia sino con una política de masas. En aquel momento, afortunada y desgraciadamente también, la Juventud Peronista respondía a Montoneros como organización revolucionaria y la visualizaba como conducción, eso sindicaba que había que haber dado una batalla política enorme para quedarse con la conducción del peronismo.

En el juicio se evidenció el alineamiento de Ponce con Rucci y se juzga la toma de la sede local de la UTN en el marco de un proyecto que ese sector del sindicalismo tenía para las universidades y en el contexto de instalación del polo petroquímico. ¿Qué intereses había detrás de ellos?

Rucci era un producto del vandorismo, tuvo una fuerte presencia en la UOM. Hay todo un sector del sindicalismo argentino vinculado al sindicalismo norteamericano. Detrás está el poder económico. Para mí la derecha es derecha, puede ser peronista o no, pueden ser los que pusieron las bolsas (NdR: en Plaza de Mayo) el otro día u otros, representa el poder económico frente a un modelo distinto de justicia social, distributiva. El vandorismo se caracterizaba por simular una lucha sindical, incluso a veces con acciones audaces, huelgas y lo demás, para después negociar. (…)

Lo que querían hacer en las universidades era limpiarlas de toda presencia militante de izquierda peronista o no peronista. Por otro lado, vincularlas al desarrollo técnico pero no por el propósito benefactor de generar técnicos sino de establecer un control político sobre un sector que les resultaba adverso.

Durante la entrevista el ex diputado nacional recordó una conversación con el padre Hernán Benítez, confesor de Eva Duarte:

Él sabía que yo era amigo de Carlos Mujica, asesinado por la Triple A. Me dijo, ¿quién asesinó a nuestro amigo Carlitos? Le digo: la Triple A. Me dice, no, eso ya se sabe, la Iglesia lo sabe bien, yo le preguntó quién disparó la ametralladora. Le digo que, según un testimonio de un sobreviviente que fue herido con Mujica, fue el comisario Rodolfo Almirón. ¿Y qué era el comisario Rodolfo Almirón en ese momento? Le digo: era el jefe de la custodia de Isabel Perón. ¿Usted no cree en el carácter transitivo?, me preguntó.

Por eso, Bonasso repudió semanas atrás el saludo del papa Francisco a Isabel Perón cuando la ex presidenta cumplió 90 años: “Isabel tendría que haber sido convocada por lo menos para la investigación del asesinato de Carlos Mujica”.

En nuestra ciudad el debate oral del juicio continuará mañana a las 9:30 con el tramo final del alegato del fiscal Pablo Fermento. El viernes, comenzará la exposición de la dra. Mónica Fernández Avello por la querella.  Las audiencias son transmitidas en directo por el canal de youtube Audiovisuales UNS y el sitio juiciobahiablanca.wordpress.com

A Juan Carlos Curzio, Osvaldo Omar Pallero, Héctor Ángel Forcelli y Raúl Roberto Aceituno, se les imputa haber integrado la asociación ilícita y en el caso de Aceituno, además, haber sido uno de los asesinos del dirigente estudiantil David “Watu” Cilleruelo.