En una audiencia prevista para el 5 de agosto las empresas responsables de la contaminación del estuario deberán responder si aceptan o rechazan una oferta económica para reparar el daño que hicieron. 

Los pescadores artesanales propusieron a la justicia que se hagan cargo del costo de la planta de tratamiento para el reúso de líquidos cloacales, la cual no solo mejoraría la calidad ambiental de la ría sino que aliviaría el abastecimiento de agua potable de la ciudad.

“Hace tres años que está acreditada la contaminación y la cruel realidad es que no hay ninguna resolución sobre este tema”, dijo a FM De la Calle el abogado Lucas Beier. Los trabajadores realizaron cortes y protestas en Ing. White y las empresas respondieron con denuncias penales.

La Cámara Federal dictó la nulidad de una serie de convenios que el fiscal Santiago Martínez y las empresas firmaron sin participación de la querella ni la fiscalía especializada. Siguieron días de protestas y negociaciones frustradas dentro y fuera de los ámbitos judiciales.

Uno de los intentos involucró a la Unión Industrial, entidad integrada por varias de las empresas imputadas, ante cuyas autoridades se ofreció a mediar. “Respondieron que no quieren hacer ningún arreglo, que van a dejar que siga la vía judicial. El Consorcio (de Gestión del Puerto) dijo que si las empresas no participan ellos tampoco”.

Las multinacionales apuestan a llegar a la última instancia judicial, trámite que les podría garantizar una década más de impunidad y avanzar con la ampliación de algunas plantas.

“Queremos que el Poder Judicial tome esto seriamente y dicte de una vez por todas una cautelar más seria, no tratar que se llegue a un arreglo sino tomar decisiones e imponer obligaciones. Así como la jueza de Garantías en menos de 48 horas obligó a los trabajadores a levantar las manifestaciones también podrían obligar a las empresas a intentar ir mejorando el tema ambiental”, afirmó Beier.

Las investigadas son Unipar (Solvay Indupa), TGS, Petrobrás Argentina, Compañía Mega, ABSA, Profertil, Cargill, el Consorcio de Gestión del Puerto, Dow (PBB Polisur), Azurix Buenos Aires, la Municipalidad y la provincia.

Hace dos años, la Cámara Federal le impuso al fiscal Martínez un plazo de 90 días para que disponga la formulación de «un plan concreto» para «diagramar inversiones futuras y asegurar el desarrollo integrado y sustentable de la Ría de Bahía Blanca, que establezca un equilibrio entre el desarrollo y la preservación del ambiente».

En los próximos días, la vía del “consenso” tendrá una última oportunidad. “Las empresas tienen que manifestar si, además de lo que propusieron que era mejorar el sistema de tratamiento -que ellas dicen que es óptimo- en un plazo de 18 meses, aportan dinero para sanear el ambiente cumpliendo con los parámetros de la Cámara”.

La querella considera “suficiente” que se hagan cargo del financiamiento de una planta para la reutilización de líquidos cloacales. “El fiscal consideró que correspondía, les dio traslado y el 5 de agosto tienen que decir si están de acuerdo. Si no están de acuerdo definitivamente se cierra la etapa de conciliación y si dicen que sí habrá que empezar a trabajar en eso”, afirmó el abogado.

El estancamiento de la causa impuesto por Martínez y la jueza Marrón es funcional a la prescripción de la acusación contra los empresarios y funcionarios denunciados. “La causa no prescribiría nunca porque es un delito de ejecución continua -en este momento están arrojando desechos industriales-, a no ser que dejen de arrojarlos y empezaría a correr el plazo. Pero sí corre sobre la persona que deja de ser director. Denunciamos a diez empresas, cada directorio estaba formado por veinte personas, son 200 personas”.

Por último, Beier se refirió a la reciente captura  de peces ulcerados. “No es lo cotidiano que salgan tan visibles pero recordemos que todos los peces analizados en la pericia salieron con úlceras cancerígenas que, según el Departamento de Delitos Ambientales de la Federal, es consecuencia directa del alto grado de contaminación del estuario, no es normal”.

“Dijeron claramente que consumirlos es peligroso para la salud, no es posible el desarrollo de la biodiversidad dentro el estuario. Ninguna de las pericias fue impugnada ni declarada nula pero pasaron tres años y todo sigue como si nada”.

“Las empresas en vez de hacer tantas cuestiones de responsabilidad social empresarial, donando plata o construyendo placitas, se tendrían que hacer cargo del saneamiento del estuario y dejar de contaminar. Es principalmente un reclamo a los funcionarios del Poder Judicial, Legislativo, administrativo, al Concejo Deliberante, al intendente. Cuando salió la pericia hubo un poco de revuelo y después nadie más habló de este tema”, dijo el abogado.

“Efectos de los agrotóxicos en la salud infantil” es el nombre del informe que busca concientizar a la comunidad médica para abordar las enfermedades que se asocian a los herbicidas y funguicidas que se utilizan en los cultivos agropecuarios e impactan en la salud de los pueblos, en particular en una de las poblaciones más vulnerables como son los niños y las niñas.

Se trata de un trabajo de la Sociedad Argentina de Pediatría elaborado por su Comité de Salud Ambiental, a través de un equipo que reunió a doce profesionales.

“Es un hito porque hay varias cosas que suceden cuando se labura en territorito con poblaciones expuestas que vienen denunciando o pidiendo ayuda. Una de las que más se escucha es que no encuentran médicos que digan esto que te pasa puede ser por los agrotóxicos, se encuentran muy desamparados”, dijo a FM De la Calle Ignacio Bocles, médico y docente de la Cátedra de Embriología de la Facultad de Medicina de la UBA.

El coautor de uno de los capítulos del documento, agregó que “hace tiempo que Argentina se debía que una sociedad médica se plantara de esta manera y pusiera una posición respecto a una necesidad efectiva que es la de formar, capacitar y dar herramientas a los médicos que están en territorio para hacer una evaluación que involucre el carácter ambiental. Es algo que se tomó muchísimo tiempo”.

“Desde el 96 que tenemos este modelo en el agro pero la historia de extractivismo y de contaminación viene desde mucho antes. Es algo bienvenido, es necesario y se tiene que tomar en cada territorito para evaluar la situación de cada lugar, para ver qué medidas se necesitan”, dijo el investigador.

¿Qué son los agrotóxicos?

La palabra agrotóxico se acuña desde las comunidades, hace referencia a los químicos y compuestos sintéticos que se utilizan en la producción agrícola. El uso del químico implica un riesgo y ese riesgo es tóxico y no debería llegar nunca a estar en contacto con el cuerpo de nadie. Cuando nos ponemos a hablar de lo socioambiental no debería destruir los ecosistemas.

Son químicos que tienen un poder biocida importante sea cual sea el objetivo que vayan a matar. Al mismo tiempo, mientras más se usa más resistencia se genera, con lo cual se tiene que usar más. Este modelo en los últimos años ha generado un crecimiento exponencial del uso que ha generado que incluso población urbana alejada de los campos tenga en su cuerpo estos venenos.

¿Cómo nos afectan?

De muchísimas maneras, el pensamiento de la salud está formateado y se piensa como antes se pensaban a las infecciones, tal microbio genera neumonía y es eso lo único que puede generar.

Acá estamos hablando de químicos y con la contaminación en general sucede que se pueden producir múltiples afecciones, hasta anomalías congénitas, malformación en embriones, aumento de casos de cáncer, tienen impacto en la herencia, el impacto se puede dar en hasta 4 generaciones después, en aumentos en incidencia de diabetes, hipertensión, etcétera. No estamos expuestos a uno sino a un conjunto de químicos que que pueden tener muchas implicancias, con lo cual altera la forma en la que enfermamos, morimos y también la forma en la que vivimos.

-¿En la actualidad no se mira a la salud desde una perspectiva integral?

Hay una tendencia en todo el mundo en transformar cómo entender la salud y la vida, salir del pensamiento lineal de que una cosa genera otra. Estamos atravesados por muchas variables que hacen que las enfermedades se manifiesten de manera diferente en cada persona y distintos generadores de enfermedad generan distintos problemas.

En ese sentido se torna fundamental que los médicos adquiramos herramientas epidemiológicas de evaluación comunitaria. Si estoy enfocado en diagnosticar y tratar una enfermedad de alguien y no me pregunto si es o no más frecuente en la comunidad, lo único que hago es poner parches a un sistema generador de enfermedades. El punto es diagnosticar y tratar pero, al mismo tiempo, atacar lo que genera el problema, hacer ambientes más sanos que generen menos problemas.

Para ello, ¿una propuesta sería la elaboración de una historia clínica socioambiental?

Es un primer paso para involucrar en la tarea cotidiana de los médicos la evaluación de la problemática ambiental. Es algo que antiguamente se hacía mucho en la medicina, en la industrialización de la medicina, en el sistema urbano donde el médico está en un consultorio y viene un paciente de muchos kilómetros y las formas de vida están borradas en las formas de ejercer la medicina. Es recuperar esto y ver de dónde vienen, a qué están expuestas las personas, si involucran agrotóxicos como pueden ser otros componentes.

¿Qué pasa con las exposiciones crónicas y las normativas laxas? ¿Es más difícil evaluarlas medicamente?

Hay algunas cuestiones que son más ingenuas y algunas más perversas. En territorio hay instituciones del Estado que han entrado en prácticas aborrecibles. Por ejemplo, al instalar plantas de tratamientos de residuos en una comunidad, facilitando que esa población no va a pagar ciertos impuestos en retribución al daño que se generará a la salud en los próximos años por la presencia de esa planta. Hay cosas que son ingenuas desde el desconocimiento y otras realmente macabras respecto a instituciones que están dañando la salud sabiéndolo. Son cuestiones a problematizar.

-¿Qué podés contarnos en relación al capítulo que desarrollaste junto a Damián Marcov, “Efecto de los Agrotóxicos en el desarrollo embrionario y en el sistema nervioso infantil”?

Yo me aboqué más a la parte embrionaria y Marcov más a lo neurológico. Argentina está entre los países que más conocimiento producen porque es un problema muy presente. Se estudia en modelos animales porque te permite entender qué mecanismo pueden estar atrás de que aparezca un problema.

Los mecanismo son comunes en algunos animales, la forma en la que nos desarrollamos es parecida, los mecanismo para generarse son parecidos. Se ve que los agrotóxicos generan problemas muy marcados al interferir en la red de comunicación celular. Por lo cual hay muchísimos sistemas que se alteran, sobre todo lo que tiene que ver con desarrollo del sistema nervioso central, el cerebro en particular, y muchos efectos de la línea media, involucra alteraciones en el sistema digestivo que pueden ser funcionales, como intolerancias alimentarias en el niño que nace, hasta anatómicas que puede ser nacer con las viseras fuera del cuerpo.

Esto se ve en distintos sistemas porque no ataca a una parte del cuerpo sino que altera una forma de la comunicación entre los tejidos que organiza cómo se desarrollan. Al mismo tiempo se ve que cuando el animal adulto está expuesto se genera el efecto a varias generaciones después. No solamente su cría tiene problemas, sino que la cría de la cría y la cría de la cría de la cría tiene problemas.

En los animales se ven problemas con la formación de la placenta y con la implantación de embriones y eso se vincula con problemas en el parto. Esto tiene correlato con problemas que se denuncian en todos los pueblos fumigados respecto a cosas que ven más frecuentemente. Son correlatos de evidencias animales que acompañan y coinciden con lo que ven las poblaciones afectadas a muchísimo tiempo.

¿Desde el Estado cambió algo en los últimos años en relacion a acompañar estas investigaciones?

Es cierto que hay un poco más de tensiones institucionalmente y que hay personas muy valiosas actuando desde allí, está la Red de Municipios por la Agroecología. La decisión política para abordar este tema brilla por su ausencia, en esas tensiones se beneficia el aumento de uso de estos agrotóxicos. Una de las cosas que se autorizó en pandemia es que se pudiera fumigar. Las personas estaban encerradas en sus casas y las fumigaciones se hacían con mucho menos reparo que se hacían antes. La verdad es que la tensión está inclinada para el sector agroindustrial y poco para el lado de la salud socioambiental.

Fotos Bocles: lavaca.org

La semana pasada terminó la audiencia pública en la cual se cuestionó la exploración de nuevas áreas marinas en busca de gas natural y petróleo. La empresa noruega Equinor presentó un proyecto para operar frente a las costas de Mar del Plata y otras localidades.

Si el proyecto obtiene luz verde para la exploración sísmica que se plantea, uno de los mayores temores es la posibilidad de derrames de petróleo y las consecuencias para el ecosistema marino.

“Hay un informe de la Universidad Nacional del Centro estudiando la posibilidad de derrames y el porcentaje que dio es del 100%. Va a haber incidentes. Eso además de ‘accidentes’ que pueden ser graves, es inherente a la actividad. Paradójicamente en la semana se dio una escena distópica a partir de lo que pasó en el Golfo de México, una bola de fuego saliendo del mar”, dijo a FM De la Calle Enrique Viale, fundador de la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas..

Explicó que “lo que se considera en la audiencia publica es un permiso de exploración de 3 bloques en el Mar Argentino, uno de ellos frente a Mar del Plata. Generó un revuelo muy grande. Lo que está en juego es la exploración, la búsqueda del petróleo es muy contaminante porque es un bombardeo acústico, eso es lo sísmico que genera mucho impacto en la biodiversidad”.

Viale sostuvo que “lo más trascendental es que por primera vez hay chances concretas de se rechace el informe de impacto ambiental, ha trascendido que el Ministerio de Ambiente iba a rechazarlo”.

El abogado agregó que la audiencia pública “es un hecho histórico porque se anotaron casi 500 personas, totalmente inédito. Lo que muestra una participación que cuestiona la exploración petrolera sísmica offshore, que para la mayoría de la población es complejo, es interesante porque muestra un momento donde la cuestión ambiental trasciende a los especialistas y preocupados de siempre, se está transformando el una ola ecosocial”.

“La explotación petrolera offshore es fuera de costa y sobre el mar, como salen de las 12 millas no son las provincias las que otorgan concesiones sino el gobierno nacional porque es Mar Argentino. Fueron dadas en octubre del 2019 a pocas semanas del cambio de gobierno”, mencionó.

Si estas petroleras se instalan afectarían al corredor biológico, “un lugar de gran diversidad marina que está en peligro, y a las costas bonaerenses”.

Durante el tratamiento del proyecto se presentó un informe ambiental de la Consultora Serman. “Estos informes son hechos por consultoras que tienen como clientes a estas corporaciones. Hay un último párrafo que dice ‘Cabandié pone en peligro un proyecto petrolero’. No está en peligro un proyecto petrolero sino el Mar Argentino. Lo dan vuelta para que nadie puede osar cuestionar al dios petróleo”.

“Cuentan del impacto moderado sobre los mamíferos marinos, todo era moderado, ¿qué quiere decir moderado? Muestran un gráfico, los mamíferos marinos saben cuándo está pasando esta exploración sísmica y se van. Algunas especies no están nombradas. Entonces, ¿le ponen carteles? ¿saben leer? ¿se van?”.

(Por Yica Guardia) Continuando con la retórica acostumbrada por este sistema económico, proponen aumentar las  exploraciones offshore de hidrocarburos. Días atrás la empresa noruega Equinor solicitó tres nuevos permisos para operar frente a las costas de Mar del Plata y otras localidades del sudeste de la Provincia de Buenos Aires, principal corredor biológico del Mar Argentino.

Se ampliaría la frontera acuífera de explotación de hidrocarburos ya establecida en un momento de colapso ecológico y sanitario como el que vivimos, y de emergencia social y ambiental. Es razonablemente impensado. Vale decir que ya desde el 2017 ocurren exploraciones sísmicas en nuestra Plataforma Marítima sin la debida información ni consulta popular.

El fracking está instalado en nuestro territorio como todas las demás formas de saqueo, destrucción y extracción de recursos que son comunes y propios de la Naturaleza. Además de ser recursos obsoletos que ya no permiten más manipulación ni explotación. Todos mecanismos extractivistas sin licencia social y contrarios a la soberanía e industria nacional, como es el caso de la pesca artesanal en el asunto que nos compete estos días.

Por todo esto, el 10 de junio se publicó en el Boletín Oficial la convocatoria a la Audiencia Pública N° 1/21 para compartir con la ciudadanía el Estudio de Impacto Ambiental de la “Campaña de Adquisición Sísmica Offshore en Cuenca Argentina Norte, en las áreas CAN 108, CAN 100 Y CAN 114” (Resolución N° 7/2021).

El método para la exploración de hidrocarburos en nuestra Plataforma Marítima es a través de explosiones sísmicas, técnica con bombardeos mediante cañones de aire que generan un ruido potente similar al despegue de un cohete espacial. Estas ondas sonoras viajan al fondo del océano, se reflejan y son captadas por sensores remolcados detrás del buque de exploración.

Los datos que recolectan son para crear mapas del fondo marino que luego las compañías petroleras utilizan para determinar ubicaciones para futuras perforaciones.  Diferentes estudios desde la Academia y la Ciencia constatan el peligro inminente ante este tipo de métodos, como la concurrencia de derrames de petróleo que rápidamente llegarían a las costas de las playas del sudeste bonaerense y la contaminación de las aguas con graves consecuencias para los ecosistemas marinos, causando desorientación en la fauna marina, pérdida de huevos, desorden en la conducta, impacto y muerte por ondas sonoras de ballenas, orcas, delfines, lobos marinos, entre otros mamíferos acuáticos.

El jueves 1 de julio se realizó la Audiencia Pública con una fuerte convocatoria y adhesión por parte de la ciudadanía, por decreto 1172/03 que estipula el acceso a la información pública. Dicha Audiencia marcará antecedentes en nuestro sistema democrático.

Es importante destacar la urgente y necesaria transición energética que debe emprender el país con responsabilidad de Técnica Ambiental y una gestión ética y transparente con la debida participación de los pueblos y su fiscalización pública pertinente.

En la Audiencia se manifestó una amplia mayoría de expositores en contra del proyecto de concesión offshore para ampliar las fronteras de explotación de hidrocarburos. En diez días el Ministerio de Ambiente de la Nación debe realizar un informe con plazos y modalidad de publicidad que tendrá la resolución final. Deberán explicar, además, cómo tomaron las opiniones de la ciudadanía participante.

Fueron claros y precisos los dictámenes sobre el estudio ambiental presentado como también la decisión de los pueblos que habitamos este territorio, por lo que serán responsables del dictamen y resolución final quienes otorguen permisos y licencias a partir de la misma.

Aguardando dicha resolución oficial, invitamos a escuchar la Audiencia por el canal de Youtube del Ministerio de Ambiente de la Nación, como también a investigar acerca de las explosiones acontecidas días atrás en el Golfo de México por el incendio de un ducto petrolero submarino. Este evento es uno más en una larga lista de sucesos similares: misma causa, mismos responsables. Estos hechos no pueden denominarse accidentes cuando son de peligro inminente y afectan el ambiente y la vida.

La provincia más austral se convirtió en el primer territorio del mundo en legislar contra la cría de salmones, especialmente, en aguas del Canal Beagle. “Esto es bisagra”, dijo a FM De la Calle David López Katz, integrante de Sin Azul No Hay Verde, programa marino de la Fundación Rewilding Argentina.

Dado el “impacto ambiental, el poco beneficio que otorga a la comunidad, porque no genera puestos de trabajo y que encima genera impactos a la salud, hay muy pocas razones para permitir que una industria así opere”.

“Conjuga la opinión del pueblo que se manifestó durante los últimos 2 años y medio que fue cuando se dijo la posibilidad de hacer esta actividad a partir de un convenio que firmó Argentina con Noruega, que es quien promueve esta actividad alrededor del mundo y en Chile durante los últimos años. Solo con contactar a gente de Chile vimos el desastre que significa para el medioambiente y que atenta contra las comunidades, con las culturas locales y los trabajos de calidad”, dijo López.

En relación a la metodología de cultivo explicó que “desde fuera del agua no se ve demasiado, son jaulas que tienen la superficie de una chancha de fútbol y eso para abajo puede tener 80 metros, puede haber de 200 a 800 mil salmones. Es una masa gigante de animales que corren el riesgo de que con cualquier cambio climático brusco una de las jaulas se rompa y se escapen miles de salmones a un hábitat que no les corresponde, porque es una especie introducida del hemisferio norte, y empieza a impactar sobre las especies autóctonas”.

En cuanto a los impactos ambientales, mencionó que “uno de los más importantes es que de todo el alimento que les dan, que es balanceado, se calcula que consumen entre el 30 y 40% y el resto va al lecho marino no permitiendo el ingreso de luz y oxigeno, generando un mar muerto. Como tiene un tiempo límite y las jaulas se van moviendo, por donde van pasando van matando todo”.

López Katz afirmó que la imagen que más se asemeja es la de un criadero de pollos con los animales hacinados en jaulas, hábitat en el que proliferan las enfermedades. “Los antibióticos que se usan son muy fuertes para poder combatir virus que traen estas especies, la mayoría de las enfermedades se generan en lugares con un hacinamiento muy grande”.

“Después uno lo termina consumiendo al salmón y va generando una resistencia a los antimicrobiales y cuando uno necesita de un antibiótico tiene cierta resistencia, a notros mismos nos empieza a generar problemas de salud”.

Respecto a los puestos de trabajo que prometía la explotación de las salmoneras, López Katz argumentó que “trabajamos con economistas de la Universidad de Tierra del Fuego que llevaron adelante un estudio de factibilidad económico y llegaron a la conclusión, ratificada por la industria, que se necesitaban alrededor de 70 personas. Más de la mitad era personal calificado que acá no existe porque esta actividad no se lleva adelante, entonces habría que importarlo, ¿para qué poner en juego nuestro medioambiente, competir con los productos locales, por un producto que no genera derrame a la comunidad?”.

La prohibición es para la cría de salmónidos en aguas territoriales, el ambientalista aclaró que “dentro de los salmónidos están las truchas, que están introducidas en Tierra del Fuego hace más de 30 años y se usa para la gastronomía, para la pesca. Hay productores locales que llevan la actividad de manera sustentable y en sistema de recirculación en tierra. No tiene la misma magnitud de impacto que las jaulas que mencionábamos antes, se permite este tipo de producción a baja escala”.

En cuanto a la persistencia de los intereses empresariales o del rechazo del gobierno nacional a la norma, López Katz aseguró que “la comunidad se expresó determinantemente” al igual que sus legisladores. “Va a ser muy difícil que cambien pero no hay que bajar los brazos y siempre estar pendientes”, concluyó.

Imágenes: Augusto Decamilis, buzo y fotógrafo.

A principios de marzo varios focos de incendio tiñeron el paisaje patagónico de humo, ceniza y ruinas. “A nadie le quedan dudas de que fue intencional”, dijo a FM De la Calle, Patricia Dambielle, integrante de la APDH Chubut.

Afirmó que “el saldo fueron más de 400 casas afectadas, la mayoría quemadas en su totalidad, hubo pérdidas humanas, gente que todavía está con quemaduras, la gente está reconstruyendo gracias a la enorme solidaridad de todo el país”.

Dambielle aseguró que “el impacto psicológico fue para todos los habitantes porque quienes elegimos el lugar por el contacto con la naturaleza cada vez que cruzamos la zona afectada es un desgarro, y mucho más para la gente que ha perdido todo. Hay gente que es artesana y ha pedido no solo su casa sino su frente de laburo”.

Por tal motivo, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos impulsó la campaña Apapachar Patagonia. “Apapachar significa abrazar con el alma, reunimos 2 o 3 voluntaries de cualquier lugar con una familia. Hay apoyos no solo materiales sino emocionales, es impresionante cómo cambia la gente cuando se siente acompañada, es muy lindo lo que se está haciendo en ese sentido”.

25 voluntaries viajaron desde Buenos Aires para ayudar en el proceso de reconstrucción de las viviendas. “Hicieron mingas, ya levantaron unos 20 techos, hoy estaban construyendo las paredes de la casa de un matrimonio mayor”.

Desde la APDH solicitaron al Ministerio del Interior informes sobre las partidas presupuestarias enviadas. “Nos dijeron que se había girado 200 millones de pesos, iban a poner unos módulos provisorios de viviendas, son unos 20 que todavía están sin vidrios. Se entregan en concepto de comodato, después los van a tener que devolver. A la gente que perdió parcialmente la casa tienen habilitados hasta 400 mil pesos para construir y para los que perdieron al casa completa les ofrecen a tasa cero un crédito, tienen que cumplir requisitos y cuando se anotan muchos, va a sorteo”.

Mientras tanto, “a algunas familias les han facilitado el pago de alquiler algunos municipios y el resto se arreglan con amigues, gente solidaria que les ha ofrecido espacio, muchos hicieron refugios y otros están construyendo en el lugar donde perdieron las casas”, comentó Dembielle.

“Las casas que se hacen voluntariamente son de permacultura, con barro, son bastante térmicas, se están haciendo las estufas tipo rusa y cuando logramos que estén cerradas las casas se ponen más calentitas. Se apunta a que sean viviendas permanentes, el diseño que hicieron arquitectos de manera voluntaria permite ampliación a futuro. Tienen living comedor, cocina con un baño y un dormitorio y después dala posibilidad de ampliar, se subsana el tema inmediato pero se prevé una casa permanente”, dijo.

Por donaciones o para participar de Apapachar Patagonia pueden comunicarse con Patricia al 294 410 99 44.

Foto: Télam.

“Teníamos razón desde el comienzo, lo ocultaron, no salen a reconocerlo. El operativo ya se desarrolló ante el desconocimiento de las poblaciones”, dijo a FM De la Calle Domingo “Mingo” Jofré, integrante de las Asamblea Jáchal No se Toca, colectivo que denunció que un cargamento de 100 toneladas de mercurio serían trasladados desde la mina Veladero de San Juan hasta el puerto de Bahía Blanca.

El asambleísta hizo un llamado a comprometerse con las causas ambientales y manifestó su deseo: “Que algún fiscal o algún juez, aunque sea por vergüenza, no por empatía, se presenté en el puerto de Bahía Blanca, pregunte de dónde salió, con autorización de quién, por dónde recorrió, cómo llegó hasta ahí”.

“Con eso hay una cadena de mandos que tendrían que estar presos y se determinaría el cierre de esta mina ilegal que está violando la Ley de Residuos Peligrosos produciéndolos, violando la Ley de Glaciares destruyéndolos, violando la Ley de Medio Ambiente y las leyes naturales porque está destruyendo nuestra cordillera y violando nuestra Ley de Minería que dice que después de tres incidentes la mina debe cerrar definitivamente y esta mina ya se cansó de insultar a nuestro territorio”, afirmó.

Jofré participó de una mesa virtual junto al biólogo e investigador CONICET, Guillermo Folguera, referida a los alcances del mercurio y los riesgos de su traslado.

Según lo informado por el Consorcio de Gestión del Puerto son cinco contenedores de 20 toneladas cada uno que «permanecerán en la terminal hasta ser embarcados con destino al Puerto de Rotterdam en área primaria aduanera, dentro de zona especial para Mercancía Peligrosas según requiere el Código Internacional IMDG».

“La mina Veladero es de oro y plata, por lo menos eso es lo que declara. Se dedican a obtener un lingote que se llama de metal doré, donde van oro, plata y otros elementos que nunca declaran. La faena minera se trata de volar y triturar una montaña y llevar esa roca a un valle de lixiviación, es decir un piletón. Ahí vuelcan esa montaña triturada y la riegan con una solución. Hacen un cóctel que tiene el efecto de extraer de esa roca triturada los minerales diseminados, les interesa el oro, la plata, etcétera, y ahí aparece el mercurio que es un mineral prohibido”, argumentó Jofré.

Explicó que el mercurio “es un subproducto no deseado de la megaminería en nuestro territorio, en Veladero. Es una actividad que produce en su accionar residuos peligrosos altamente tóxicos y prohibidos en el mundo. Ahí ya hay una faena y destrucción, por más que el ministro (Matías) Kulfas venga a decir que en Veladero se está haciendo patria es extractivismo”.

La comunicación oficial da cuenta que el cargamento fue trasladado “con custodia de Gendarmería Nacional. El operativo previo estuvo a cargo del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación y dentro del Puerto se encuentran bajo custodia permanente de Prefectura Naval Argentina” .

Al respecto, el asambleísta mencionó que “son las mismas instituciones que deberían haber controlado que no se produzcan los derrames que ocurrieron en Veladero en 2015. Un año después nos enteramos de dos más, nos enteramos por mensajes de empleados que entraban en pánico, no por los órganos oficiales. No puedo creer que estén controlando porque nunca controlaron”.

El residuo tóxico se exportará para su tratamiento en Suiza y su posterior disposición final en Alemania. “Si hay negocio debe ser non sancto porque la utilización del mercurio está prohibido, no se puede usar ni comercializar, no se puede usar para nada legal. Hace ruido que 100 toneladas de mercurio vayan cruzando el Atlántico medio a escondidas, van a Suiza, hacen un tratamiento y después van a Alemania”.

Por su parte, el biólogo e investigador del CONICET, Guillermo Folguera sostuvo que todo depende de “la confianza en que los empresarios amigos del poder hagan bien las cosas y tengan suerte en el camino. Está todo sostenido desde ahí. Hay que empezar a discutir qué democracia tenemos, el informe del puerto de Bahía aparece una primera cuestión aparentemente oficial, donde no se menciona quién se hará cargo”.

Destacó que “la falta de información no es un equivoco, es una parte fundamental, si no no pueden hacer lo que hacen. En los derrames del 2015, 2017, fue informado de manera informal, en todos los temas no hay informe oficial, megafactoría de cerdos, aprobación de trigo transgénico, la megaminería en Andalgalá”.

“No taparnos los odios, abrir los ojos, reconocer que desde hace mucho tiempo hay gente que reacciona a esto. Escuchar a esa gente que dice que hay un gobierno que cogobierna con la mineras, hablan tanto de la soberanía y la patria y están cogobernando con poderes extractivistas, llevándose recursos no renovables, el costo lo estamos pagando con la salud y el medioambiente”, finalizó Jofré.

El Consorcio del Puerto de Bahía Blanca confirmó este miércoles la llegada de 100 toneladas de mercurio provenientes de la mina Veladero. Ingresaron al sitio 21, muelle concesionado a Patagonia Norte S.A. y son custodiadas por Prefectura Naval.

Según el comunicado, son “cinco contenedores consolidados y precintados” con el residuo peligroso distribuido “en envases de máxima seguridad”.

La CTA de Bahía Blanca, alertada por la información difundida por la Asamblea Jáchal No se toca, destacó que el traslado se realizó “a espaldas de la población de Bahía Blanca e Ingeniero White y del conjunto de las localidades” atravesadas por el convoy.

“Queda absolutamente comprobado que la megaminería genera enormes cantidades de residuos peligrosos, que la mina Veladero viola las Leyes de Glaciares, Residuos Peligrosos y de Medio Ambiente”, manifestó la central y agregó que “por acción u omisión los gobiernos son responsables, tanto en el ámbito municipal, como en el provincial y nacional”.

El Consorcio del Puerto informó que los contenedores “fueron trasladados desde la provincia de San Juan con custodia de Gendarmería Nacional. El operativo previo estuvo a cargo del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación y dentro del Puerto se encuentran bajo custodia permanente de Prefectura Naval Argentina, según protocolos nacionales e internacionales de seguridad vigentes”.

“Los contenedores, de 20 toneladas cada uno, permanecerán en la terminal hasta ser embarcados con destino al Puerto de Rotterdam en área primaria aduanera, dentro de zona especial para Mercancía Peligrosas según requiere el Código Internacional IMDG”.

El comunicado oficial agregó que “todo el procedimiento de consolidación de residuos peligrosos se enmarcó en lo estipulado por la Ley N° 24051, su decreto reglamentario N° 831/93 y en el cumplimiento del Convenio de Basilea sobre el Control de los Movimientos Transfronterizos de Desechos Peligrosos y su Eliminación, aprobado por nuestro país mediante la Ley N° 23922, garantizando de esta manera los máximos niveles de seguridad ambiental”.

Desde la CTA concluyeron que “la megaminería es incompatible con la vida de los territorios y es parte del modelo de saqueo extractivista que nos une en la lucha de la cordillera al mar y del norte al sur de la Argentina”.

La intervención del Ministerio de Ambiente

El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación difundió que la Brigada de Control Ambiental (BCA) fiscalizó los contenedores en el establecimiento que opera la firma Minera Andina del Sol S.R.L. en la provincia de San Juan.

La Secretaría de Control y Monitoreo Ambiental, cuyo titular es Sergio Federovisky, le otorgó a la empresa Minera Andina del Sol S.R.L. la renovación de su Certificado Ambiental Anual (CAA) como generador, operador y exportador de residuos peligrosos. Dicho certificado alcanza la gestión integral de residuos peligrosos consistentes de mercurio metal líquido desde su generación, incluyendo la etapa intermedia de tratamiento de estabilización, hasta su disposición final.

Además, autoriza a la firma a exportar 500 toneladas de mercurio líquido para su tratamiento en Suiza y posterior disposición final en Alemania. También estipula que la empresa debe mantener actualizado su libro de operaciones, asentando sus diferentes etapas, e informar a la cartera ambiental nacional modificaciones sobre el proceso de generación de los referidos residuos, su sistema de manipulación, almacenamiento, transporte, tratamiento o disposición final y cualquier incidente o accidente donde el mercurio generado se vea involucrado en un plazo de 48 horas; y, al momento de la renovación, la cantidad anual producida de ese residuo peligroso, junto con el stock total almacenado.

(Por Yica Guardia – Conexión Socioambiental) Amanecimos el martes con la noticia de que un cargamento de cien toneladas de mercurio, cuya partida desde la mina Veladero (San Juan) con llegada al puerto de Ing. White prevista para el lunes próximo denunciaba la “Asamblea Jáchal No se toca”, ya había arribado a la ciudad.

Visibilizamos parte de los lamentables efectos del ejercicio megaminero y del desarrollo extractivista en el territorio, el cual genera enormes cantidades de residuos peligrosos. Tránsito de sustancias tóxicas como el mercurio no orgánico, violando las leyes de Glaciares, Residuos Peligrosos y de Medio Ambiente. Tal responsabilidad se vuelve tácita. La información a la ciudadanía encubierta, medios hegemónicos de comunicación callados, impunidad latente, órganos de contralor estatales que administran su función superficialmente y corruptamente en tantos otros casos, como leyes que se incumplen recurrentemente.

Un puerto lejano que aparece como destino y perfecta opción. Confusión y desinformación, típicos mecanismos de un sistema que deja rastros que esperamos no den frutos como hace unos años atrás ocurrió en Choropampa en Perú. Recordando aquel triste suceso, el viernes 2 de junio del año 2000 un camión de transporte produjo el derrame de 151kg de mercurio metálico ocasionando daños irreparables en la salud y mortales en su caso en la población.

Damos nota de esto citando parte de un informe de investigación brindado por Conicet: “Los informes del daño que ocasiona el mercurio una vez inhalado indican que el 100% del mercurio elemental atraviesa las membranas alveolares de los pulmones y se difunde hacia la sangre, desde donde es distribuido por todo el cuerpo y que, además entre un 75 y un 80% es retenido por el cerebro, los riñones y el feto de mujeres embarazadas”.

Respecto de la llegada del reciente convoy de mercurio debemos decir que no es la primera vez que transitan por el territorio sustancias con residuos altamente tóxicos y peligrosos. Siempre sucede con la connivencia de los gobiernos provinciales y nacionales y la tímida aparición de los diferentes organismos de contralor que escoltan estos tránsitos por tierra, con total ausencia de información hacia las poblaciones que ignoran semejante travesía.

No existe justificación ni excusa para estas maniobras que atentan contra la vida desde su primera vertiente que es la misma existencia de megaminería en nuestro país.

Cada Estado que mal administró estos territorios socavó sus bienes comunes, extirpó sus recursos hasta sobrepasar límites y consecuencias de degradación social, económica y sanitaria. Como de seguridad ambiental. Un sistema de negociados entre jefes patriarcales gubernamentales y sus colegas en valores corporativos y empresariales, cierran un mercado privado financiero de ganancias extradimensionales y abren camino a un sinfín de responsabilidades jamás cubiertas ni cargadas al portador.

Preguntarnos por qué existen aún este tipo de megaproyectos de minería a cielo abierto, por qué utilizan sustancias tóxicas, por qué se permite el uso del agua abusivamente, por qué no existen órganos de contralor eficientes y respetuosos de la ley y de las normativas vigentes. (…) Preguntas retóricas, preguntas necesarias preguntas que ya no queremos hacernos y de las que no esperamos respuestas, porque no las requerimos.

Quienes denunciamos estos hechos sólo buscamos y accionamos para acabar con el statu quo actual extractivista, ecocida y terricida. Podríamos agregar genocida encubierto o descubierto para quien sepa ver las consecuencias previsibles, peligrosas y evitables de estas acciones.

Aún aguardamos declaraciones oficiales por parte del directorio del Puerto de Bahía Blanca como personalmente por parte del presidente del Consorcio, Federico Susbielles. También del CTE (Comité Técnico Ejecutivo) dependiente del gobierno municipal, ARES Ambiental y el Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentabel (OPDS). Lo mismo respecto a los Ministerios de Energía y Minería y Medio Ambiente.

Y, lo más urgente, aún desconocemos cuánto tiempo permanecerá la carga en almacenamiento en el Puerto de Ingeniero White.

La Cámara Federal denegó a Mega S.A. un recurso de casación y ratificó la anulación del convenio firmado por el fiscal Santiago Martínez y su apoderada en el marco de la causa por contaminación del estuario.

Ante las quejas de la Asociación de Pescadores Artesanales de la Ría y la Fiscalía General, el tribunal había descartado las propuestas de las empresas del polo petroquímico. Las mismas contaban con el aval de la jueza federal Gabriela Marrón.

Mega sostuvo que la Cámara había “equiparado un acuerdo programático sujeto a verificación de su cumplimento con una homologación anticipada que se computa como existente”.

Calificó la medida como “arbitraria” porque pretendería “introducir requisitos o condiciones que no estaban previstos en la resolución cautelar” y afirmó que la querella “intervino previo a la homologación del acuerdo por lo que se respetó la bilateralidad y la participación de las partes”.

Por último, aseguró que su plan cuenta con un “informe técnico”, que “garantiza la intervención de los organismos de contralor” y que “ningún órgano del Poder Judicial puede imponer la intervención de la UFIMA, sino que es una competencia del Ministerio Publico Fiscal”.

Los camaristas Pablo Candisano Mera y Roberto Amábile argumentaron que no existe una sentencia definitiva que habilite la queja ante el tribunal superior y, en relación a la alegada arbitrariedad, manifestaron que la apoderada de la empresa se limitó a plantear su “disconformidad con el análisis” de la Cámara.

Integrantes de la Asociación de Pescadores Artesanales de la Ria se reunieron con autoridades de la Unión Industrial, entidad a la cual están afiliadas las empresas investigadas por la contaminación del estuario.

Luego de once años de trámites judiciales y con las causas estancadas en el fuero federal y el contencioso administrativo, los trabajadores comenzaron una serie de cortes y manifestaciones para visibilizar la problemática.

Un grupo de pescadores y el abogado Lucas Beier fueron recibidos esta mañana por Marcela Guerra y Roberto Elissamburu, directora institucional y director Industrial de la UIBB, respectivamente.

“Les dijimos que traten de interactuar ya que la Unión Industrial tiene como principales asociados a empresas del polo o afines al polo. Necesitamos una solución urgente, desde los empresas de manera individual no nos reciben, no están dispuestos a escucharnos. Necesitamos una solución inmediata, para mañana, del daño que han generado a estas familias desde hace 11 años”, dijo Beier a FM De la Calle.

Semanas atrás, la Cámara Federal anuló los convenios firmados por el fiscal Santiago Martínez y apoderados de empresas del polo petroquímico, por no haber incluido en la discusión a los pescadores ni a la UFIMA, unidad de la Fiscalía especializada en medio ambiente.

Beier comentó que intentan “alguna negociación extrajudicial que derive en un acuerdo judicial. Pero en forma inmediata se necesitan una respuesta, están bastante firmes en su postura, van a seguir con los cortes”.

En cuanto al Consorcio de Gestión del Puerto, organismos que también está denunciado ante la justicia, el abogado destacó que “venimos con buen diálogo hace mucho tiempo, desde hace un año y medio, pero hasta ahora ninguna respuesta concreta”.

“Los pescadores llegaron a un momento de saturación, no quieren escuchar más que hay reuniones. Lamentablemente las causas judiciales están muy lentas y la expectativa es que se demore muchos años más. 2 pescadores fallecieron, algunos se están poniendo viejos y necesitan una respuesta ya”.

Esta semana la jueza Gabriela Marrón rechazó citar a indagatoria a empresarios y ex funcionarios. “No lo van a hacer, dicen que no hay pruebas suficientes y no dicen cuáles faltan. En el delito penal hay una acción típica: dice el que arroja sustancias nocivas, peligrosas para la salud. Ya está demostrado por una pericia que dice que los peces tiene 40 veces más que lo permitido por el Código Alimentario. Faltaría demostrar quién lo arroja: esta más que acreditado por los informes del Comité Técnico Ejecutivo que dice quién y qué sustancias. Hay dos informes en la causa con la nómina de todos los directores. No lo entiendo, le vengo diciendo que si cree que no están identificados que produzca la prueba que tenga que producir”.

“Cuando es una persona jurídica la responsable de arrojar sustancias, los responsables son los directores, lo dice la ley. Parece que acá la jueza quiere que yo pueda acreditar que Juan Pérez un día dio la orden de abrir la canilla. No lo pide la ley, no lo pide la jurisprudencia”, enfatizó Beier.

“Estamos perdiendo el estuario”

“El Consorcio nos atendió pero nos mintió, el Municipio nunca nos atendió, estamos viendo que nos atiendan para llegar a un acuerdo como la gente. Hasta que no haya una solución en concreto vamos a seguir con esta lucha. Van 11 años de tomada de pelo”, dijo Héctor Seijas frente a la sede de la UIBB al móvil de FM De la Calle.

Miguel Córdoba señaló que “la justicia siempre va por debajo de la mesa, siempre quedamos afuera de todas las conciliaciones. A nuestros abogados los atienden mientras nosotros hacemos medidas de fuerza”.

“En este juicio hace 11 años que estamos reclamando por una fuente laboral que teníamos, me pude hacer mi casa, vivía dignamente, le daba una buena vida a la familia. Después del 2008 que se cortó todo tuvimos que reinventarnos”, agregó Fabián Torres.

Córdoba recordó que “había 60 embarcaciones con 7 tripulantes, sumále las familias, los negocios que vivían de los pescadores. De esas 60 lanchas quedan 4 en el agua, el resto las compró el Consorcio. Los permisos de pesca tienen un solo dueño: el Consorcio compró todas las lanchas para desarraigar los pescadores, las compró cuando ya los dueños no sabían qué más hacer para tener esa lancha a flote. Todo eso lo perdimos gracias al Consorcio y las empresas”.

“Que la gente de Bahía tome conciencia de que la contaminación afecta a toda la ciudad, que miren a White, todo lo que viene para acá, estamos perdiendo el estuario. El puerto es lindo para tomar mates el domingo que es lo que le muestra el Consorcio… que metan la mano en el agua”.

Se presentó en la legislatura de Neuquén el informe “La basura del fracking en Vaca Muerta”, el cual evidencia la historia de contaminación e irregularidades en Comarsa, uno de los basureros petroleros más importantes del sector.

La Izquierda Diario, el Observatorio Petrolero Sur y Taller Ecologista analizaron 1182 páginas de actas de inspección de la Subsecretaría de Ambiente de la provincia de Neuquén, organismo de control de la actividad.

“De las actas surge que la empresa instaló piletas clandestinas en terrenos fiscales que ocupó. Desde al pacto YPF – Chevron en 2013 la empresa aceleró la ocupación,  la vivienda más cerca al basurero Comarsa está a 25 metros, según un decreto de 2015 tendrían que estar a 8 km de las zonas urbanizadas. En una inspección hablan de 244 mil metros cúbicos de residuos”, dijo a FM De la Calle Esteban Martiné redactor de La Izquierda Diario.

En Comarsa “se acumulan los residuos del fracking que vienen tanto de compuestos químicos que se mezclan con agua y arena silícea como materiales que están presentes en el subsuelo donde hay metales pesados y material radioactivo. Acumularon gran cantidad de material en suelo descubierto sin impermeabilizar, exponiéndolo ante las inclemencias del clima y a que esto se pueda filtrar al subsuelo. En distintas ocasiones Comarsa miente sobre el volumen de residuos”.

Lo más importante es que “está todo registrado desde los ojos del Estado, hubo una connivencia muy fuerte en todo sentido, hubo también una connivencia desde el Estado provincial y municipal, que en el 2013 les cedió terrenos a un valor de $35 el metro cuadrado que en ese entonces era lo equivalente 1 kilo de yerba”.

Martiné destacó que desde el Estado nacional también hay responsabilidad “por ser autoridad de aplicación de la Ley 24.051 de Residuos Peligrosos. El año pasado el ministro de Ambiente, Juan Cabandié, planteó que la situación era alarmante, sin embargo, meses después el Estado nacional incluyó a las empresas petroleras en un nuevo plan de estímulo a la producción del gas como es el GasAr. Hubo una connivencia estatal sin grieta”.

El periodista dijo que en 2015 Comarsa debería haber iniciado un plan para retirarse de Neuquén. En cambio, “le habilitaron una nueva planta con terrenos fiscales en la localidad de Añelo, punto caliente de Vaca Muerta, pero no garantizaron el cierre y esa planta sigue funcionando”.

“Hoy las piletas de Neuquén están vacías pero el material sigue acumulado y están haciendo un tratamiento de biorremediación que significa mover el residuo. En Neuquén hay un déficit habitacional muy grande, hay permanentemente toma de terrenos, las vecinas de Casimiro Gómez -el barrio más cercano- dicen que no se puede respirar, es sofocante, no se pueden sacar el olor a hidrocarburo de la ropa”.

Por último, Martiné enfatizó que “hubo al menos 15 multas de la Subsecretaría de Ambiente cuando la gravedad de los hechos ameritaban la clausura. Las cinco multas más caras son las que Comarsa no paga, son cinco millones de pesos. La ley establece que por cada día de mora se cobra un 10% más, son alrededor de 500 millones de pesos”.

Pescadores artesanales se movilizaron desde el puerto hasta el Municipio para pedir una respuesta luego de más de diez años de iniciada la causa por contaminación en la ría. Son 52 familias que perdieron sus fuentes laborales.

“Supuestamente el intendente se iba a hacer cargo de nuestro tema y nunca lo hizo. Estamos hartos de falsas promesas, hace 3 años que la causa esta archivada por el fiscal (Santiago Martínez) y la jueza (Gabriela Marrón), que creo no son gente idónea para estar en esta causa, esto debería estar solucionado”, comentó a FM De la Calle Héctor Seijas.

Agregó que “acá cada vez se contamina más y todos miran para el costado. A nosotros nos sacaron de nuestro puesto de trabajo peor que a los perros, nos mandaban a Prefectura, nos sacaban los materiales y hasta nos podrían meter presos”.

Seijas dijo que “se sigue contaminando, la jueza y el fiscal firmaron que en 18 meses iban a arreglar la ría, no podés arreglar en 18 meses la macana que te mandaste durante 30 años”.

Al respecto, la Cámara Federal revocó semanas atrás todos los convenios firmados entre el fiscal Martínez y apoderados de las empresas por no haber dado intervención a la querella, a la Fiscalía ni a organismos técnicos y de control. Previamente, los acuerdos habían sido homologados por la jueza Marrón.

Seijas recordó que “en el Consorcio (de Gestión del Puerto) se firmó un acuerdo por 6 meses, hasta el día de hoy no tuvimos respuesta. Dicen que trabajan pero no vemos avances de nada, que dejen de contaminar las empresas, que dejen de tirar desechos cloacales a la ría”.

Por último, enfatizó: “Estamos mal lamentablemente, haciendo changas, viviendo como se puede y con la pandemia peor. A veces no podemos salir ni a ganarnos el pan, se nos re complica”.

Compartimos el documento entregado por hermanas del Movimiento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir en la reunión interministerial que mantuvieron la semana pasada en Casa de Gobierno.

Llamado de las Mujeres de las Naciones Indígenas

Nosotras, las mujeres de las 36 naciones indígenas, habitadas por las fuerzas telúricas y la sabiduría de nuestras ancestras, hemos salido de nuestros territorios a caminar para sanar. Sanamos encontrándonos con todos los pueblos y seres, sanamos también por el cariño de esos pueblos que se organizaron para alojarnos, alimentarnos, cobijarnos en solidaridad y respeto. Brotaron lágrimas de sus ojos y esperanzas de construir un mañana mejor, fueron narrándonos los nefastos efectos de este sistema sobre las vidas. Cruzamos de punta a punta el país recogiendo esas voces inaudibles.

Hemos llegado a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires trayendo nuestras medicinas, ancestrales y sagradas, en un momento que creemos histórico porque somos conscientes que no hay tiempo que perder, que el #Terricidio es innegable.

Celebramos la oportunidad del diálogo con responsables del Estado Argentino porque el negacionismo que ha sido el proceder ideológico de una casta opresora ya no servirá como lógica política, para no hacernos responsables de este presente producto de una matriz civilizatoria que hoy colapsa y no vislumbra futuro. La misma matriz que produjo el genocidio de los pueblos y naciones indígenas.

Este caminar fue arduo y necesario, fuimos empujadas por las sequías, los incendios, las violaciones a nuestras hijitas en el marco del #chineo, cansadas de tanta impunidad ante tantos crímenes, no podemos pensar en sanar sin justicia. Es por ello que decidimos caminar, con pasos amorosos y comprometidos por la vida, porque no se trata sólo de nosotras sino del mundo.

Son tiempos en los que nos determinan los hechos, convocadas por el llamado de la tierra, de nuestros ancestros y ancestras, estamos decididas a recuperar el Buen Vivir como Derecho, que es la única alternativa civilizatoria que nos rescatará de un sistema de muerte.

Desde nuestro legado ancestral no admitiremos #megaminería, #fracking, #desmontes, #megarepresas, #monocultivos y #agrotóxicos entre tantas industrias contaminantes bajo la idea de “desarrollo y progreso” porque eso es destrucción absoluta.

Estamos en vísperas de la conmemoración del 25 de mayo, para el Estado argentino el primer grito de libertad; y para los pueblos y naciones indígenas alaridos de dolor que aún hoy reclaman memoria, verdad y justicia.

Nuestros hombres indígenas nos han precedido en un intento de diálogo, que se estableciera desde el respeto y reconocimiento de paridad, naciones parlamentando y acordando, sin embargo han fracasado. Nosotras guardianas de los territorios y de todas las formas de vida estamos decididas a no fracasar, porque no claudicaremos, no nos resignamos y no traicionaremos.

Invitamos a los pueblos del mundo a decir #BastaDeTerricidio.

Ante el fracaso de la mediación con las empresas que contaminan el estuario bahiense, la Asociación de Pescadores Artesanales de la Ría reclama avanzar con el juicio y citar a indagatoria a gerentes y funcionarios.

“Ya no hay más nada que hacer, ya está la prueba en el expediente. Eso es beneficioso para todas las partes, tanto para el denunciante porque ven que no va a prescribir la acción penal y, por otra parte, garantiza el derecho de defensa de los eventuales contaminadores. (…) Luego se puede llegar a un acuerdo: dejar de contaminar y reparar”, dijo a FM De la Calle el abogado Luis Arellano.

La semana pasada la Cámara Federal revocó una serie de acuerdos individuales entre el fiscal Santiago Martínez y apoderados de las firmas investigadas y reprochó la demora de más de una década que lleva el trámite de la causa. Horas después, Martínez planteó a la jueza Gabriela Marrón que quedó “claramente en crisis” su continuidad en el caso.

Para el representante de los pescadores artesanales, con las resoluciones de la Cámara Federal “se abre una nueva instancia para ver si de una vez por todas podemos, todas las partes involucradas, sentarnos en una mesa común a discutir este tema y no jugar a las escondidas”.

“El motivo fundamental por el que habíamos apelado –los acuerdos con las empresas- era porque se habían hecho a espaldas de la parte querellante. Es el primer argumento que tiene en cuenta la Cámara. Después hay otros, la falta de un adecuado control técnico, el no citar a los peritos, decir que intervino la UFIMA, la oficina fiscal especializada en temas ambientales, que se dice que fue consultada y no es cierto”, detalló.

¿Falta un análisis técnico serio respecto a lo que propone cada una de las empresas?

El estuario no es un ambiente sencillo y los aportes contaminantes tampoco lo son, entran aportes cloacales e industriales. No se puede resolver atomísticamente con cada uno de ellos como si fueran una isla y no tuviera nada que ver con los demás. Hay que hacer un estudio de cómo cada actividad de las empresas contribuye a un mejoramiento global. No se puede hacer individualmente.

¿Para la Asociación de Pescadores cuál el camino que debería seguirse a partir de estas resoluciones de la Cámara?

Establecer una línea de base, que ya está bastante bien establecida por la pericia de la FAUBA y la Policía Federal Argentina, y lo que hay que hacer para revertir este proceso es evitar estas emisiones, bajar la carga contaminante o eliminarla como establece la Ley de Pesca, dice que está prohibido arrojar sustancias nocivas a las aguas, no hay ningún guarismo, es cero, no se pude arrojar sustancias nocivas al estuario. Eso hay que revertirlo.

Va a tener que ser un proceso, que va a llevar varios años hasta que podamos lograr que los aportes de residuos al estuario sean inocuos para la biología marina. Eso es un proceso que requiere aporte de técnicos de primer nivel, han sido dejados de lado acá el organismo ambiental de la provincia, el organismo del agua, el Comité Técnico que tiene gestión en Bahía. Tenemos que volver todos en un trabajo muy complejo, en una misma mesa, con un soporte técnico científico adecuado para establecer un plan que involucre a cada cosa y saber cómo interactúan.

¿De aquella mesa ordenada por la Cámara Federal a estos acuerdos anulados no hubo nada en medio?

Lo que pasó fue que el fiscal, con muy buena voluntad, intentó juntar a las partes varias veces después de esta medida cautelar. Luego sobrevino a la pandemia, tuvimos varios zoom donde comparecimos la Fiscalía y la querella, las empresas estaban invitadas a participar y no vinieron ni a uno. Salieron corriendo a la noche, hicieron un documento de 4 o 5 carillas diciendo cómo iban a arreglar ellos el estuario y lo presentaron para evitar que la causa siga avanzando, el camino es el llamado a indagatoria y, por otra parte, es mi visión, frenar la causa civil que los va a condenar a reparar. Es otro punto que no tienen en cuenta las homologaciones que están siendo revocadas. No se tiene en cuenta la reparación.

Aparte de tener la voluntad de no seguir cometiendo el delito hay que reparar los efectos. Pueden tener su mejor buena voluntad de dejar de verter sustancias nocivas al agua, han dicho durante 30 años que no vierten pero ahora vienen a decir vamos a mejorarlos, ¿en qué quedamos?

Por otra parte, un punto que muchas veces está en tela de juicio, dicen la Cámara y los abogados piden una reparación de perjuicios suponiendo que pedimos plata para los pescadores o para alguien. Lo que hay que conformar en realidad es un fondo de reparación ambiental que tiene que ser destinado a beneficios comunitarios, a un fideicomiso, a la Municipalidad. Esa es la reparación que se exige.

Sí existe en la causa civil en la que los pescadores piden que se los indemnicen por la merma de la pesca, están en todo su derecho, no es ningún pecado al reclamar la indemnización de un daño.

Otro punto que destaca la Cámara es el que da cuenta de la demora de la causa de más de 10 años incluso de la demora de la cautelar. ¿Qué significa la última parte que dice que “es dable señalar que la ejecución de la medida cautelar no suspende el proceso principal por lo que sin perjuicio de los eventuales acuerdos que se suscriban nada impide el impulso de la acción penal pública frente a la hipótesis delictiva”? ¿Tiene relación con la falta de respuesta de las empresas a las convocatorias a buscar soluciones?

No, porque eso sería parte del acuerdo. Lo que está diciendo la resolución es que los  juicios penales tienen como destino obtener sentencia condenatoria o absolutoria. Nosotros queremos una sentencia condenatoria, que se condene a los responsables a una sanción penal. Ahí tiene que apuntar este juicio.

En estos dos años que estamos dando vueltas con este acuerdo, hemos presentados distintos escritos al juzgado penal diciendo “señora jueza la causa no está suspendida y el siguiente paso por la prueba que se ha recolectado es citar a indagatoria a los responsables”. Ya no hay más nada que hacer, ya está la prueba en el expediente. Eso es beneficioso para todas las partes, tanto para el denunciante porque ven que no va a prescribir la acción penal y, por otra parte, garantiza el derecho de defensa de los eventuales contaminadores. A partir de la indagatoria se dispara el derecho de los eventuales delincuentes de defenderse. Las empresas no han podido acceder al expediente hasta ahora y no va a ocurrir hasta que los citen a indagatoria. Es una garantía constitucional. Luego se puede llegar a un acuerdo: dejar de contaminar y reparar.

Respecto a la prescripción, ¿cómo están los tiempos?

Mal, estos trámites no implican una suspensión del curso de la prescripción. No tengo el cómputo, el plazo va a depender de cuál sea el delito que definitivamente se les impute. La causa lleva más de 10 años.

¿Es habitual que la Cámara se exprese de esta manera?

No, para nada. La Cámara se expresa con idioma correcto pero es un severo tirón de orejas esta resolución.

La Cámara Federal continuó con la anulación de convenios firmados entre el fiscal Santiago Martínez y apoderados de empresas del polo petroquímico. Habían sido homologados por la jueza Gabriela Marrón en la causa que investiga la contaminación de la ría. Involucran a Dow (PBB Polisur), Oiltanking y Mega.

Tal como ocurrió con Profertil, se los revocó, entre otros motivos, por no haber incluido en la discusión a la Asociación de Pescadores Artesanales de la Ría y a la UFIMA, unidad de la Fiscalía especializada en medio ambiente. Resta resolver la apelación referida a Unipar (Indupa).

La Cámara afirmó en todas las resoluciones que los convenios no cumplen con los estándares que fijó en junio de 2019 cuando ordenó “lograr la minimización del daño ambiental a través de un mecanismo alternativo que promueva la participación de los distintos actores involucrados, tanto de las empresas que realizan sus actividades comerciales e industriales en la zona, como así también de los querellantes, de los organismos con funciones de control (municipales y provinciales), de gestión y de profesionales técnicos en la materia”.

El objetivo es “la concreción de un plan sustentable para la Ría de Bahía Blanca en pos de dar cumplimiento con la manda impuesta por el art. 41 de la Constitución Nacional que consagra el derecho a un ambiente sano y equilibrado y establece que las actividades productivas no deben comprometer la atención de las necesidades de las generaciones futuras”.

Los fallos referidos a Dow (PBB Polisur) y Mega S.A. fueron firmados por Roberto Amábile y Pablo Candisano Mera y, en el caso de Oiltanking y Profertil, por este último y Silvia Fariña.

Destacaron que si bien la jueza Marrón designó al IADO para controlar la ejecución de las supuestas mejoras “no se advierte que efectivamente se le haya puesto en conocimiento” de la medida.

¿Qué proponen las empresas?

Dow apunta a la reutilización de agua de efluente en riego y la renovación de intercambiadores de agua por unos de mayor capacidad y mejores materiales para disminuir el efluente y el consumo.

Por otro lado, pretende modificar los patrones de consumo de energías sustituyendo las actuales por renovables, realizar acciones para la sostenibilidad consistentes en promover y facilitar la transición hacia una economía circular donde los residuos se incorporen a nuevos productos y servicios.

Compañía Mega S.A. ofrece reducir a cero –“en condiciones normales”– el vertido de los efluentes líquidos tratados que la empresa actualmente descarga a las aguas del estuario desde su Planta Fraccionadora y reutilizarlos para el riego de espacios verdes dentro de su predio “con la consecuente reducción en el consumo de agua potable que actualmente es utilizada para riego”.

Oiltanking Ebytem S.A. plantea incorporar “un nuevo tanque para realizar separación primaria en un recipiente cerrado con los correspondientes sistemas para control y manejo operativo así como de control de incendio”. Así, afirma, reduciría “hidrocarburos en el efluente final y el riesgo de eventual ignición de vapores combustibles en el espacio abierto, como asimismo, el control de las demandas químicas y bioquímicas de oxígeno; y un ambiente de trabajo más seguro para las personas y autoridades que se acercan a la terminal”.

Profertil, por su parte, pretende mejorar la calidad del efluente; mantener parámetros de vuelcos más rigurosos a los exigidos por la normativa medioambiental vigente, optimizar la utilización de recursos hídricos y un «compromiso de alto impacto condicionados al proyecto de ampliación + UREA».

La Cámara Federal revocó el convenio firmado por el fiscal Santiago Martínez y un apoderado de Profertil en el marco de la causa por contaminación del estuario.

El acuerdo había sido homologado por la jueza Gabriela Marrón a pesar de no haber participado a la querella, a la Fiscalía General ni a organismos técnicos y de control. Se espera que las presentaciones de otras empresas -como Dow, Mega y Oiltanking- corran la misma suerte.

La camarista Silvia Fariña y su par, Pablo Candisano Mera, destacaron la demora de más de una década que acumula la investigación y el “estancamiento” del diseño del plan de inversiones que exigieron en 2019. Por otro lado, advirtieron que “sin perjuicio de los eventuales acuerdos que se suscriban, nada impide el impulso de la acción penal pública frente a la hipótesis delictiva”.

La fábrica de fertilizantes había propuesto mejorar la calidad del efluente; mantener parámetros de vuelcos más rigurosos a los exigidos por la normativa medioambiental vigente, optimizar la utilización de recursos hídricos y un «compromiso de alto impacto condicionados al proyecto de ampliación + UREA».

La Asociación de Pescadores Artesanales de la Ría denunció que «se ha dado a Profertil un trato privilegiado, discriminatorio del resto, casi secreto, otorgándole audiencias privadas sin noticia de nadie y en abierta contradicción con la letra y el espíritu de lo ordenado por la Cámara Federal». Ahora, el tribunal resolvió que la negociación del fiscal Martínez con Profertil “no cumple con los estándares oportunamente fijados”.

El fallo sostiene que “aun cuando se trate de un compromiso individual, un plan superador tendiente a cumplir con el objetivo de recomponer el daño colectivo ambiental provocado en la zona, debió contar previamente con un mínimo respaldo de información actualizada brindada por los profesionales  técnicos y/o peritos que tuvieron intervención en autos, así como la efectiva participación de los organismos que tienen funciones específicas de contralor, tales como el Comité Técnico Ejecutivo (dependiente de la Municipalidad de Bahía Blanca), la Autoridad del Agua o el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible, que den cuenta de la factibilidad de las propuestas homologadas”.

En ese sentido, Fariña y Candisano Mera recordaron que la Unidad Fiscal de Investigaciones de Delitos contra el Medio Ambiente (UFIMA) ya intervino en la causa y podría elaborar un dictamen fundado. “Pese a lo afirmado por la jueza de grado, no se observa del presente legajo la oportuna intervención de dicha unidad especializada en torno a la viabilidad del convenio en particular”.

“La complejidad de los asuntos que se abordan en el marco de la causa hace necesario contar con saberes técnicos especializados previos a la toma de una decisión de tal calibre. Sin esos recursos no es posible realizar un seguimiento y análisis  adecuado  sobre  la  ejecución  del  caso,  máxime  cuando  se  excluye  de  la concreción del mismo a la unidad especializada en la problemática”.

La Cámara concluyó que “teniendo en consideración la pluralidad de intereses de las personas  involucradas en la causa, el diálogo y la oportuna participación de los mismos debe ser garantizada a fin de dar previsibilidad y un adecuado control periódico a las propuestas que se formulen. Es necesario establecer pautas claras acerca del ejercicio para regular, fiscalizar y sancionar las conductas potencialmente dañosas, donde los organismos con funciones de control no pueden ser obviados”.

Una gran nube de humo negro se vio esta mañana en Loma Paraguaya. Provenía de la antorcha de Refinería Bahía Blanca, planta que se vio totalmente paralizada tras un corte eléctrico,

El Comité Técnico Ejecutivo advirtió que producto de su puesta en marcha podría visualizarse mayor luminosidad, venteos y ruido durante el resto del día.

“Se generó un corte en la línea de media tensión que provoca que la planta se pare en su totalidad, la compañía Mega también paró sus plantas. Refinería intentó arrancar enseguida pero sin éxito, por eso se genero esa nube de hubo negro”, explicó a FM De la Calle, el coordinador del CTE Walmir Morete.

Dijo que “recibimos dos denuncias de la comunidad, igualmente ya habíamos asistido. Para realizar un acta de infracción tenemos que estar presentes cuando sale el humo. Como superaron el límite de tiempo admisible por la ley, fue notificada de la infracción y se lleva a las oficinas. Se infraccionó por humo, eso es de todo”.

Agregó que “es humo negro porque es mala combustión, estuvo un rato largo largando, el problema fue que no se activaron los generadores que permiten que la planta siga en funcionamiento cuando se corta la energía, eso es otro tema a solucionar”.

“Eso es algo interno de ellos en el mismo proceso. Cada sector tiene un generador que le permite seguir funcionando. Cuando tienen una baja en tensión provoca que se paren los equipos, si sale el humo que sale, es porque no se prevé una parada, esta funcionando de manera normal y de golpe se para todo, se activan las medidas de seguridad y por eso sale por la antorcha”, mencionó Morete.

Advirtió que la parada de planta llevará todo el día y que la empresa informará el horario de puesta en marcha. Mega, por su parte, no fue infraccionada.

Por último, en relación al software que años atrás permitía a la comunidad monitorear las cámaras del CTE a través de la web de Gobierno Abierto señaló que “las cámaras que tenemos, de las domo que son del CTE, no está funcionando el sistema, sí las cámaras. Estamos trabajando en la pagina web del CTE, la idea es que eso vuelva y que la comunidad pueda ver lo mismo que vemos desde el centro del monitoreo”.

Foto: Jorge Rubio.